S.J. Libros dentro de libros 3112s

Nunca había estado en Barcelona por Sant Jordi. Había oído hablar de esa fiesta, claro, rosas, libros, dragones, pero no fue hasta que lo viví que entendí realmente de qué iba todo eso. Ese 23 de abril la ciudad despertó diferente. Las calles, normalmente ruidosas y aceleradas, estaban cubiertas de puestos de libros que parecían brotar del suelo como flores literarias. Cada esquina olía a tinta fresca y a rosas rojas. Caminaba por la Rambla atrapado entre parejas que se regalaban sonrisas y rosas, niños con espadas de cartón cazando dragones invisibles y libreros que recomendaban historias como si ofrecieran pequeños tesoros.

Me regalaron una rosa, así, sin más, una desconocida con una sonrisa cómplice me la atendió, como si supiera que era mi primer Sant Jordi. Sentí que esa flor era más que un gesto, era una bienvenida, una invitación a ser parte de algo antiguo y nuevo al mismo tiempo. Compré un libro, claro, no pude resistirme, y mientras lojeaba en una terraza soleada, escuchando las conversaciones de la gente, pensé que esta fiesta no es sólo sobre libros y rosas, es sobre compartir, compartir historias, emociones y un pedazo de uno mismo. Y ahí estaba yo, un recién llegado, sintiéndome por primera vez parte de Barcelona, como si ese dragón legendario me hubiese adoptado, porque en Sant Jordi todos somos un poco caballeros, un poco princesas, y también un poco dragones.

Hola, hola y bienvenidos una semana más a vuestro podcast pseudo literario. Somos Dani y Estefanía y seguimos siendo Marilia Andrés Podcast. Ha sido un poco con delay. Con delay.

Nosotros vamos un poquito en canarias. ¿Qué tal estás Estefanía? Pues muy bien, muy emocionada. Ha sido un Sant Jordi muy especial, lo he pasado muy bien acompañada y queríamos dedicar este capítulo. ¿A quién? Pues a Jordi y a Pedro. Dijimos que se lo íbamos a dedicar. Ahora no te eches atrás. Este especial Sant Jordi y a ellos dos, que han sido personas, digamos, que nos han devuelto la sonrisa en este mundo oscuro.

Bueno, ahora no sé qué estoy diciendo. Es que vengo así muy espimosa, porque he tenido un día muy ajetreado. Me estás dejando muy sorprendido, pero bueno, pues dedicamos el capítulo de hoy a Jordi y a Pedro. Jordi porque es Sant Jordi además y Pedro porque te tiene con cara de tonta todo el día. Estoy muy tonta. Estás muy tonta. O sea, se te nota en la mirada que vives enamorada. Bueno, hermana, tú también. Bueno, la hermanada te cuenta. Así que nada.

Qué bonito es celebrar un día tan especial como Sant Jordi. A ti te debe dar cosa que no esté Pedro por aquí, ¿verdad? Bueno, tenemos una lista de cosas que hacer y en esa lista pone pasar un Sant Jordi juntos, con lo cual. Es que creo que es una festividad tan maravillosa ahora pasarla con tu rosa en la mano, buscando libros. Es que además estaba Barcelona ayer con una luz especial, con este sol ya de primavera. Yo miro a todos los ojos y estoy como ah, reviento.

Pero bueno, este año lo hemos cambiado por Jonathan Bailey. Ah, es verdad que tú vienes de Londres. Oye, pero eso ha sido un planazo también, ¿eh? Sí, sí. Cómo te cuida, qué regalazo de cumpleaños te hizo ver la obra de teatro de Ricardo II, ¿no? II, sí. De Shakespeare, así muy literario todo también. Aparte de patearnos todo Londres para abajo. Oiga, ¿has visto que ya me he quedado con esta voz rota para siempre? Sí. Soy, no sé. La nueva Estefanía.

La nueva Estefanía es más y más parecida como a Encarna Sánchez. La voz de las ondas de los 80. Tendremos que pedir a la radio que nos ponga ya en horario nocturno. Sí, sí, y que se pueda fumar aquí, que es lo que nos faltaba. ¿Te imaginas? Oh, eso me encantaría, esas emisoras de radio de antes con esta de humo, con el whisky en la mano. Yo quería ser una locutora de ese tipo. Yo fumar, nada. Yo fumar, yo lo tendría la mano solo. Ya voy para tres años.

Sin fumar, qué fuerte me parece. Sí, con lo que yo era. Qué fuerte con lo que tú eras, sí, sí.

¿Me vas a decir qué libros has tenido este año o lo dejamos para más tarde? Sí, no, si quieres te lo digo. Mira, este año tengo El extranjero de Camus, que había leído otros de Camus, pero este no, de Camus, ¿no? Y también el libro de la biografía.