T4.18. Reflexiones personales 675u2c

Hola, me llamo Lola Arias, y hoy, como cualquier otro día, no nos quedaremos atrás.

Muy buenos días, tardes o noches a quienes me estáis escuchando.

Hoy quiero hablaros del mes de marzo, es decir, de todo lo que ha pasado durante estas cuatro semanas en cuanto a la movilización social, la concienciación y la reivindicación de derechos.

Ya habréis leído o visto y oído que estas semanas han estado marcadas por importantes conmemoraciones y campañas de sensibilización en torno a la igualdad, la inclusión y la diversidad.

Desde el Día Internacional de la Mujer, hasta el Día Mundial del Síndrome de Down, pasando por el Día de las Enfermedades Raras, distintas campañas y eventos han marcado la agenda pública y privada de entidades sociales, istraciones y, sobre todo, de las familias, tanto en España como a nivel internacional.

En un mundo que sigue afrontando retos en derechos humanos, accesibilidad e inclusión, estas acciones de gran impacto siguen siendo fundamentales para dar visibilidad a realidades que aún necesitan mayor reconocimiento y apoyo.

En 2025, la lucha por la igualdad de género sigue siendo una prioridad a nivel global.

Este año, ONU Mujeres promovió el lema Para las Mujeres y Niñas en Toda su Diversidad – Derechos, Igualdad y Empoderamiento, destacando la importancia de garantizar derechos sin exclusiones y reconocer la diversidad de experiencias y desafíos que viven las mujeres y las niñas en todo el mundo.

No debemos olvidar que uno de cada diez mujeres vive en condiciones de pobreza extrema y que cada año un millón y medio de niñas y adolescentes de 10 a 19 años dan a luz en América Latina y el Caribe, seguido de África Subsahariana.

Esta circunstancia perpetúa la pobreza y limita sus oportunidades educativas y laborales.

Sin duda, en los últimos 30 años se han logrado grandes avances que debemos celebrar, pero los desafíos para las mujeres en la sanidad, en el equitativo a la educación y a los recursos económicos o la existencia de matrimonios forzados nos obligan a seguir trabajando en favor de las mujeres.

Porque las mujeres no somos un colectivo, no lo somos en cuanto que representamos el 49% de la población mundial y por tanto no somos minoría.

En cuanto al Día Mundial del Síndrome de Down que se celebró el pasado 21 de marzo, las redes sociales han estado echando humo durante esta semana y hemos disfrutado de campañas publicitarias tan potentes como las de Down España con el lema «Tan como tú» que ha logrado más de un millón de visualizaciones.

O de la Fundación Prodis con el lema «25 años sin aceptar un no», coincidiendo con los 25 años de vida de la entidad y que se han podido ver en las marquesinas de la parada del autobús aquellos que vivimos en Madrid.

También es importante destacar que la campaña de los calcetines desparejados sigue plenamente vigente en toda España y que cada año se suman a ella colegios, empresas, asociaciones, amigos, vecinos o gente nueva y ajena al colectivo que lo descubre y que repetirá el año que viene.

A nivel internacional, la organización italiana CoreDown ha continuado con su labor de sensibilización lanzando campañas creativas para fomentar la inclusión laboral.

Y en Estados Unidos, las dos entidades más importantes y representativas, la Sociedad Nacional del Síndrome de Down y la Fundación Global del Síndrome de Down han llevado a cabo acciones centradas en la concienciación, la recaudación de fondos y la promoción de la inclusión que involucran a las escuelas, a la comunidad y a las organizaciones privadas.

En cuanto al día de las enfermedades raras, aunque la fecha oficial es el 28 de febrero, a lo largo de la semana.