T3.28. Reflexiones personales 1f6d53

Hola, me llamo Lola Arias y hoy, como cualquier otro día, no nos quedaremos atrás.

Muy buenos días, tardes o noches a los que me estáis escuchando.

Esta es la última reflexión de la temporada. El mes que viene tendréis varias entrevistas y el especial final de temporada.

Como ya sabéis la temporada del podcast empieza en octubre y termina en junio.

De esta manera puedo conciliar mejor con el hecho de que mis hijos estén más tiempo en casa durante el verano. Si bien seguiré haciendo malabares para poder seguir trabajando y que la asociación no te quedarás atrás, siga avanzando. Agradecer de corazón a los 5.500 oyentes y 368 suscriptores que me van escuchando a lo largo de estos meses, muchas gracias de verdad de corazón. Quisiera que este episodio fuera una recopilación de los temas que se han ido exponiendo a lo largo de esta temporada.

Arranqué la temporada con el objetivo de consolidar el contenido del podcast y con el propósito de dar mayor espacio a la etapa adulta y a la vejez de las personas que tienen síndrome de Down u otro tipo de discapacidad intelectual. A lo largo de mis reflexiones también he querido informaros sobre otros temas que son de actualidad, tanto para las personas con discapacidad intelectual como para el público en general.

La inteligencia artificial, las campañas publicitarias y el cine, el cuidado de los cuidadores o la incomodidad que nos produce estar cerca de una persona con discapacidad. Incluso os he compartido mi visión sobre las cabalgatas de los reyes magos y sobre Eurovisión. También he hablado sobre la premisa de que cualquier tiempo pasado fue mejor.

Hace poco descubríamos que hace cinco mil años las sociedades ancestrales consideraban a las personas con síndrome de Down como personas de su comunidad y los enterraban en sus casas o con objetos valiosos. Además os he ofrecido una radiografía de lo que es y en qué consiste el tercer sector en nuestro país y he reflexionado sobre la pérdida de la ilusión a medida que nos vamos haciendo mayores y sobre la frustración ante los lentos avances de nuestros hijos.

Y después de todo eso y mucho más, después de 86 episodios y tres temporadas, un día compartí un poco más de mi historia personal con vosotros. En cuanto a las entrevistas creo que han sido variadas e interesantes a partes iguales. ¿Vosotros qué opináis? Con motivo del Día Mundial de la Parálisis Cerebral, la primera entrevista de la temporada fue con Nacho Santías, un chico de 22 años cuya parálisis cerebral no le impide tener una vida plena y lucha por los derechos de las personas con discapacidad a través de la Fundación CADETE.

Para hablar de los avances tecnológicos y del propósito de reducir la brecha digital de las personas con discapacidad intelectual, invité a dos personas que representan dos ejemplos extraordinarios desde el sector privado. Uno es la aplicación de Inderclub, fundado por Max Roures, centrada en facilitar citas y planes sociales entre personas con discapacidad intelectual. Y el otro es el asistente de inteligencia artificial Lucía, representado por su cofundador Carlos Pérez.

También me he hecho eco del nacimiento este año de una nueva fundación llamada Fundación Alex Rivera, que aspira a ser un referente a nivel mundial en la etapa adulta de las personas con síndrome de Down. Y he charlado con fundaciones que llevan muchos años trabajando por la formación y la inclusión laboral, como la Fundación Prodis, capitaneada actualmente por su directora general Valle Oñate.

También he destacado iniciativas empresariales como la marca de ropa Kikotoko, cuya fundadora crea a pies juntillas que el mundo puede ser un poquito mejor. Y como Ayate, una empresa social cuyo único fin es la de promover el voluntariado de jóvenes menores de edad. Sus fundadoras creen en el potencial de los menores y en la mejora de la sociedad.