¿Mala racha… o hay algo más? 5h4n3y

Hola, bienvenido a un nuevo capítulo de cómo resolver tus problemas de pareja.

Si quieres comenzar una relación, mejorar las cosas con tu pareja actual o si lo que quieres es pasar página, aquí vas a encontrar los mejores consejos.

Estás escuchando en Emocioteca.com a Mercedes Cobo.

¿Y si las rachas en pareja no fueran solo altibajos inevitables, sino señales de algo más profundo? ¿Y si en lugar de ignorarlas, aprendiéramos a verlas como una oportunidad para entender qué está pasando realmente entre nosotros? A veces, lo que llamamos racha es una forma de estar juntos que sin darnos cuenta nos va desgastando.

Imagina una pareja que lleva meses discutiendo por lo mismo.

Cada uno se siente incomprendido, atrapado en un bucle sin salida.

Dicen que es una mala racha, pero en realidad llevan demasiado tiempo repitiendo patrones sin resolver nada.

Cada intento de mejora, en verdad, es un parche mal colocado sobre una herida que sigue abierta.

Y claro, este estancamiento empieza a notarse.

¿Cómo? Pues en los silencios incómodos, en los abrazos que no se dan, en las ganas de evitarse.

¿Y qué sucede cuando una racha, bueno, duele más de lo normal? Nos repetimos que todas las parejas tienen sus momentos, pero si esos momentos ya no son la excepción, sino la norma, pues quizá no estemos hablando de una mala racha.

Los síntomas de que el malestar ya se ha vuelto cotidiano son estos.

Mides lo que dices, evitáis determinados temas, fingís que todo va bien.

Ten en cuenta que cuando uno de los dos sostiene la relación y el otro apenas participa en ella, empieza a aparecer un desequilibrio emocional, porque uno se agota, el otro se desconecta y algo se rompe, aunque nadie, por supuesto, diga nada.

Se instala el silencio, la distancia, y ahí es donde importa cómo nos tratamos cuando precisamente no estamos de acuerdo.

Hay parejas que discuten y luego se reconcilian, que saben volver a encontrarse, y otras en cambio convierten cada roce en una batalla campal o en una guerra fría.

Pero lo que duele en realidad no es el conflicto, sino cómo lo atravesamos.

Si se queda sin cerrar, si se repite lo mismo sin resolver, acaba dejando una huella de desgaste que pesa más que la discusión original, ¿a que sí? Antes de continuar, recuerda que cuentas con tu consulta telefónica gratuita para tratar ese tema en tu relación de pareja que te tiene ahí atascada.

Solo tienes que entrar en mi web emocioteca.com, en o, y reservar en la agenda el día y la hora para hablar conmigo.

Yo te llamaré.

También el deseo, ten en cuenta, y la conexión cambian con el tiempo.

Cuando la rutina sustituye la cercanía y el esfuerzo desaparece, algo esencial se pierde en la pareja.

No todo lo que se desgasta es por falta de amor, a veces es porque no se cuidan suficientemente las cosas, y esa sensación de estar mal se va haciendo habitual.

Si ya no sabes desde cuándo te sientes así, entonces te aviso, no estás en una mala racha, esto es más hondo.

Pero vamos a ver, ¿cómo saber justo esto, si es una mala racha o es algo más lo que estáis atravesando? Bueno, te dejo una pregunta fundamental, dime, ¿cómo te sientes la mayor parte del tiempo en tu relación? Dale una vuelta.

Y te comento algunas señales de alerta.

¿Estás más tiempo mal que bien? Siempre haces tú todos los esfuerzos.

Discutís por lo mismo una y otra vez.

Ya se ha perdido la ternura y el descanso.