Consecuencias del pecado original 4q464h

Comienza tu cura en las ondas con el padre Íñigo Ugalde.

Buenos días, amigo de Radio María. ¿Qué tal estás? Bienvenido a este nuevo programa de tu cura en las ondas que nos posibilita esta gran casa de Radio María a la que le agradecemos y a la que estamos agradecidos por todo ese plantel, esa plataforma enorme que nos da tantas posibilidades de formación, de oración y si quieres de difusión, eso está a tu mano.

Bueno, vamos a tocar hoy principalmente un tema, un tema que es el de la unidad del hombre.

La unidad enteriza, la unidad entitativa, la unidad psicosomática del hombre, apasionante, con un montón de consecuencias y conclusiones. No te vayas, empezamos ya. ¡Venga! Bueno, ¿qué tal estás? ¿Has pasado bien estos días? Espero que sí. Ya empieza a remitir el frío, o sea que todo fantástico. Bueno, nos queda marzo con tal acuaresma, maravillosa.

Entonces, hay un vídeo, vamos a comenzar, ¿no? Como la unidad del hombre, el misterio del hombre, en fin, que la gente se le ha olvidado que somos un misterio y vamos a ver lo que vamos a ver que me parece súper interesante, súper interesante. Entonces, hay un vídeo por ahí, hay un tío, ¿qué te parece lo del tío? Bueno, que aparece, que hace una sola pregunta en la calle, ¿no? Y entonces, esa pregunta que va haciendo absolutamente de forma casual por la calle a cualquiera en Nueva York, siempre hace la misma pregunta y la gente responde cada uno lo que le dé la gana, claro, ¿no? Y entonces, la pregunta que hace, y solo hace una, es ¿qué es lo que te hace sentirte, digamos, seguro de ti mismo? Esa es la única pregunta que hace. Y entonces, cada uno, efectivamente, a partir de ahí responde.

Entonces, imagínate, con una cámara, un micrófono, en mitad de la calle en Nueva York, pues la gente, ante esa pregunta, responde, pero mil cosas distintas, mil, o bueno, depende de los vídeos que haga, pues si hace mil vídeos, pues mil respuestas, ¿no? Entonces, una chica dijo, Jesús de Nazaret, ¿vale? A mí Jesús. Entonces, habla de Jesús como la que le da seguridad, es Jesús.

Luego tienes otra gente que te habla de la moda, de los amigos, de la diversión.

Y entonces, otro dijo, mi terapeuta, ¿vale? Entonces, yo me voy a quedar con estas dos polos, porque tanto la chica que dijo Jesús de Nazaret como mi terapeuta, esos dos vídeos, pues tuvieron millones, pero millones de visualizaciones, pero millones es muchísimos, yo no me acuerdo cuánto, pero una salvajada.

De hecho, ambos dos vídeos tienen como una segunda parte, quiero decir, localizan la pregunta, son dos chicas que habían respondido, una había dicho que era Jesús, y luego la terapeuta, y hay una segunda parte a esa pregunta, ¿no? Y responden o ahondan en ese, ¿no? Entonces, claramente aquí hay como dos, y en el fondo se tocan, aunque hay una parte, el que habla del terapeuta no lo capta, pero hay una unión. Entonces, es verdad que necesitamos algo espiritual, ¿no? Yo creo, creo, y sobre todo para los oyentes de Radio María, que los que responden, ¿no? ¿Qué es lo que te hace seguro? Que es la moda, o la diversión, o el good looking, ¿no? El parecer bien, el... bueno, todo esto.

Pues se nos queda muy... sabemos que es... y cuanto más intentes como fundamentar tu existencia, tu seguridad, tu aplomo, tu... en fin, como el sentido vital de tu existencia, una cosa tan efímera como puede ser la moda, o el horario, o la diversión, o la salud, pues está abocado al fracaso, ¿no? Porque, en fin, todo eso es tan suavemente pasajero, y consume tanta energía el, digamos, ese desasosiego de no estar a la moda, o de la salud, ¿no? De que se va quebrantando, es que se va quebrantando la salud. Es verdad que muy poco a poco, pero se va quebrantando, se va quebrantando la salud.