URANTIA - I.14.2 - El Universo Central y Divino: 2. La constitución del Universo Central 6f2y1j

Esta conferencia comenzará a grabarse.

Bien, pues vamos a dar comienzo a una nueva sesión de comentarios al libro Durantia.

Esta vez estamos en la parte primera, el universo central y los superuniversos, y vamos a continuar con el documento 14, el universo central y divino.

De este documento habíamos estado viendo en la pasada sesión, la primera de este documento, una introducción y el epígrafe primero, el sistema paraíso Abona.

En este epígrafe nos relataba el libro Durantia de una forma bastante descriptiva, podría decirse astronómica, física, pues cómo es la composición del sistema entero paraíso Abona, en el sentido de que tiene el universo central de Abona dentro de sí a lo que es el paraíso.

Un paraíso que está formado por la Isla Eterna del Paraíso y por las 21 esferas sagradas de la Deidad, 7 del Padre, 7 del Hijo, 7 del Espíritu.

Pues bien, esas esferas sagradas forman 3 circuitos, el circuito de las esferas del Padre, del Hijo y del Espíritu.

La continuación de esos 3 circuitos son otros 7 circuitos que son precisamente el universo central de Abona, el universo central y divino como dice el libro Durantia.

Y estos 7 circuitos contienen pues mil millones de esferas perfectas completamente desarrolladas evolutivamente.

Y por ello en total alrededor de lo que es la Isla Eterna del Paraíso hay 10 circuitos, 3 de las esferas sagradas de la Deidad y 7 de las esferas perfectas del universo de Abona.

Luego nos hablaba también este epígrafe bastante detenidamente sobre unos círculos oscuros de gravedad, unos cinturones formados por volúmenes, por cuerpos oscuros de gravedad en 2 circuitos, en 2 cinturones que separan al universo central de Abona de los 7 superuniversos del Tiempo y del Espacio y que tienen una función equilibradora de lo que es precisamente la conjunción, el límite, el deslinde entre el universo central de Abona y los 7 superuniversos.

Y además, bueno, pues de una forma bastante técnica se dedica a detallar bastante lo que son estos cinturones que, bueno, pues giran el primer cinturón, el interior, en el sentido antihorario y el exterior en el sentido horario.

Bueno, aparte nos hace una mención el documento anterior interesantísima sobre la cuestión del Tiempo.

Nos dice en el Paraíso no funciona el Tiempo, cosa que ya sabíamos cuando vimos el Paraíso, la Isla Eterna del Paraíso.

No hay Tiempo.

Esto obedece al cono del Tiempo.

El cono del Tiempo significa que en el punto más elevado por tal dimensional entre lo manifestado y el entorno del Espíritu, pues ahí no funciona el Tiempo.

Hay una explicación que dimos con ocasión de otros documentos del libro Durantia sobre qué es el Tiempo en realidad, porque a nosotros nos parece algo objetivo, pero resulta que es algo completamente subjetivo y depende del grado de limitación de la operativa de la mente de cada una de las conciencias de personaje.

¿Qué ocurre? Que en la Isla Eterna del Paraíso la mente es infinita, con lo cual no hay ninguna limitación y por ello no hay necesidad de Tiempo.

Sin embargo, a partir de ahí, ya en el universo central de Abona, el Tiempo opera.

Opera.

Y opera de una forma levísima.

¿Levísima con respecto a qué? Levísima con respecto, por ejemplo, a nosotros, los personajes, de un nivel de operativa de la mente muy alejado del de los personajes del universo de Abona.

El universo central de Abona, en el cono del Tiempo, está casi en el vértice, el Tiempo influye muy poco y nosotros estamos en la base del cono.

A nosotros el Tiempo nos influye muchísimo porque al tener muy limitada la operativa de nuestra mente, en nosotros la capacidad de procesamiento de la información tiene que ser sucesiva, no puede ser simultánea.

No podemos hacer dos cosas a la vez.