
OT 79. Oración por la Semana del Enfermo 4m2i4w
Descripción de OT 79. Oración por la Semana del Enfermo 61937
A las puertas de la XXXIII semana del enfermo, bajo el lema “En esperanza fuimos salvados” queremos centrarnos en ser especialmente conscientes de la importancia de la visita a ellos, los enfermos, buscando siempre acompañar en los momentos de debilidad. En este momento de encuentro fraterno, queremos también dirigir nuestra mirada a las necesidades más urgentes de nuestro tiempo como son la falta de alimentos en muchas partes de nuestro mundo. Por ello nos unimos en oración a la campaña contra el hambre de Manos Unidas bajo el lema “Compartir es nuestra mayor riqueza”. Pidamos al Señor que seamos capaces de compartir con aquellos que más lo necesitan, ya sea nuestro tiempo, visitando a tantos enfermos de nuestro alrededor; como compartiendo nuestros bienes materiales, poniéndolos al servicio de los que sufren más allá de nuestras fronteras. Que nuestras acciones y oraciones reflejen el amor fraterno y la preocupación por los más débiles. Lecturas: Del libro de los Salmos (Salmo 27): "El Señor es mi luz y mi salvación". Noticia: Francisco ante la Jornada Mundial del Enfermo: “La esperanza no defrauda” De la Segunda carta de San Pablo a los Corintios: "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de las misericordias y Dios de todo consuelo (...)" Cantos: El Señor es mi fortaleza. En los pobres yo te vi. Pongo mi vida en tus manos. Entrañas de misericordia. Sois la sal. 545968
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Hoy nos reunimos en la paz y en la alegría del Señor, invocando su presencia en el nombre
del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. A las puertas de la 33ª Semana del Enfermo,
bajo el lema «En esperanza fuimos salvados», queremos centrarnos en ser especialmente conscientes
de la importancia de la visita a ellos, los enfermos, buscando siempre acompañar en los
momentos de debilidad. En este momento de encuentro fraterno, queremos
también dirigir nuestra mirada a las necesidades más urgentes de nuestro tiempo, como son
la falta de alimentos en muchas partes de nuestro mundo. Por ello, nos unimos en oración
a la campaña contra el hambre de manos unidas, bajo el lema «Compartir es nuestra mayor
riqueza». Pidamos al Señor que seamos capaces de compartir con aquellos que más lo necesitan,
ya sea en nuestro tiempo, visitando a tantos enfermos de nuestro alrededor, como compartiendo
nuestros bienes materiales, poniéndolos al servicio de los que sufren más allá de nuestras
fronteras. Que nuestras acciones y oraciones reflejen el amor fraterno y la preocupación
por los más débiles. Que esta oración nos inspire para ser agentes de cambio, construyendo
juntos un mundo donde reine la justicia, la paz y el respeto por la creación. Y con esta
intención decimos juntos «Oh alto y glorioso Dios, ilumina las tinieblas de mi corazón,
dame fe recta, esperanza cierta, caridad perfecta, sentido y conocimiento, Señor,
para que cumpla tu santo y veraz mandamiento».
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