Más Con Menos: Encuentra La Vida Que Quieres En Todo Lo Que Posees 3t5k44

Hola a todos y bienvenidos a Ideas para Vivir Mejor, el espacio donde te ayudamos a crecer tanto personal como profesionalmente, aunque no tengas tiempo ni para leer libros ni para hacer cursos. Soy Eugenio Payá Ruiz, lector en Pedernido, escritor y experto en desarrollo personal. Y hoy quiero traerte el resumen de un libro que se llama Más con Menos.

Está escrito por Joshua Becker. El libro nos dice que hoy en día en nuestra sociedad estamos expuestos a cerca de 5.000 impactos publicitarios diarios. 5.000 impactos diarios. Esos son 5.000 voces que te están diciendo que te falta algo, que necesitas esto o aquello, que sin esta cosa no estás completo. Esos son 5.000 formas distintas de decirte una y otra vez lo mismo. Compra más y serás más feliz.

Y lo curioso es que, por mucho que cambie el producto, el mensaje siempre, siempre, siempre es el mismo. Da igual que te estén intentando vender un coche, una aplicación, una batidora. La promesa es idéntica. La felicidad está a un clic, a una tarjeta, a un paquete de distancia, lo que sea. Y como resultado de todo esto, el hogar típico a día de hoy, nos dice el libro, tiene 300.000 objetos. Lo has oído bien. 300.000 objetos tenemos de media en casa. Y ahora dime tú si de verdad necesitamos tanto.

Nos han vendido la idea de que el minimalismo es como una especie de penitencia, como si el minimalismo fuera vivir con lo justo, soportando escasez y renunciando a todas las cosas buenas de la vida. Pero la verdad es otra. La verdad nos la explica el libro y nos dice que el minimalismo no es tirar todo y vivir solamente con una planta y con una taza. No va de renunciar. El minimalismo va de elegir, de volver a escuchar lo que de verdad importa, de decirle sí a lo que realmente es esencial y decirle que no a lo que solamente nos ocupa espacio mental y físico.

Por tanto, te repito, el minimalismo no es decir que no. El minimalismo es decir que sí, pero decir que sí a lo que importa. Decir que sí a las cosas que nos nutren. Piensa en los minimalistas no como personas que no tienen nada, sino como alguien que se ha dado cuenta de algo muy esencial. El exceso no suma, y a veces menos es mucho más. ¿Quieres más tiempo? ¿Quieres más flexibilidad? ¿Quieres más libertad? Pues a lo mejor el primer paso no es hacer más, sino tener menos.

¿Y si lo que tenemos de más nos está quitando aquello que más queremos? ¿Cuántas cosas nos acompañan en nuestro día a día que ya no necesitamos? ¿Cuántas de esas cosas ocupan espacio, ocupan energía y ocupan atención? Y yo sé que el problema es que los anuncios nos atacan por todas partes. Te lo dije el otro día, abres el móvil y ahí están.

Vas en el coche y los escuchas en la radio o los ves en los carteles. Miras por la ventana del autobús y ves los carteles, las vallas publicitarias, etc. El mensaje se repite, con distintas caras, con distintos logos, con distinto color, pero todo es compra, compra ahora, lo necesitas, te lo mereces, etc. Y eso funciona porque hoy estamos comprando mucho más que nunca, mucho más que nunca.

El hogar medio tiene esos 300.000 objetos que te decía antes, que son el doble de los que tenía hace 50 años, y sin embargo nosotros seguimos queriendo más y más y más. ¿Cómo hemos llegado hasta aquí? Porque lo que nos están vendiendo ya no son objetos, nos están vendiendo emociones. Nos están diciendo cómprate este abrigo y te vas a sentir aceptado, cómprate este coche y vas a recuperar el control de tu vida, de tu familia, de tu trabajo.

Compra este perfume y te va a desear todo el mundo. Y todo eso viene acompañado por una oferta irresistible. Siempre hay un solamente por hoy, últimas unidades, días de oro, 50% menos… Los seres humanos no compramos por lógica, compramos por impulso, es decir, compramos por emociones. Y yo creo que todos queremos más.