Trending Misterio
iVoox
Descargar app Subir
iVoox Podcast & radio
Descargar app gratis
Frikipills Radio
Insert Coin: La era dorada de los salones recreativos (o Arcade)

Insert Coin: La era dorada de los salones recreativos (o Arcade) 415a1n

20/2/2025 · 34:40
0
267
Frikipills Radio

Descripción de Insert Coin: La era dorada de los salones recreativos (o Arcade) 4cdg

Si creciste en los salones recreativos, este episodio es para ti. Volvemos a aquellos templos de neón donde las monedas eran nuestra vida extra y los piques con amigos eran más épicos que cualquier final boss. 💾👾 En este tercer episodio de la temporada, charlamos con Rober de El Templo del Arcade (templodelarcade.com), un auténtico experto en la historia de los arcades retro, sobre las máquinas que marcaron nuestra infancia y la magia de esos espacios donde los videojuegos eran una experiencia social única. Recordamos las joyas que nos hicieron vibrar y analizamos cómo ha evolucionado el mundo arcade hasta hoy. 📺 Disfrútalo en vídeo en YouTube o Spotify 🎧 Escúchalo ya en iVoox 💬 ¿Cuál fue tu juego arcade favorito? Cuéntanos en comentarios! 👇🔥 3m2v1t

Lee el podcast de Insert Coin: La era dorada de los salones recreativos (o Arcade)

Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.

Hoy os traigo un tema que huele a tabaco y a monedas de cinco duros.

¿Recordáis esas tardes en los salones recreativos donde cada partida nos costaba un riñón y las leyendas se medían a base de récords en Pac-Man o Street Fighter 2? Pues preparad vuestros mejores movimientos con el joystick, porque hoy repasamos cómo unas simples máquinas de píxeles conquistaron el mundo.

Insert coin y empezamos.

Bienvenidos, bienvenidas, soy Dani Collado, DanDan para los amigos, y esto es Freaky Pills Radio, píldoras de subcultura en formato podcast.

Este episodio va más allá de la nostalgia.

Para quienes hayáis vivido los años dorados de los salones recreativos, es un maravilloso viaje al pasado.

Para los gamers de ahora, es una clase de historia que, curiosamente, conecta con el presente, porque las máquinas arcade están más vivas que nunca.

Para entender los videojuegos arcade o arcade de toda la vida, tenemos que viajar a un tiempo en el que las consolas eran cosa de ciencia ficción, poco más o menos, y las monedas, las gordacas de 25 pesetas, valían su peso en oro.

Aunque había ya una especie de recreativas analógicas desde principios del siglo XX, unas con unas bolas que bajaban por unos circuitos, bolas de madera o de metal, que teníamos que manejar y, bueno, luego, llegado a los tubos catódicos, hubo unas primeras máquinas experimentales.

Pero, digamos que el punto importante de las recreativas, la etapa importante, comenzó con Computer Space en 1971, el primer arcade comercial.

Diseñado por Nolan Basnell y Ted Dabney, los mismos que luego fundaron Atari, era un juego en el que pilotabas una nave espacial.

El problema, pues que el público no estaba listo para tanto friquismo, y por eso Computer Space fue un fracaso, pero sentó las bases de algo mucho más grande.

Un año después, en 1972, Atari dijo, vale, pues vamos a simplificar esto, y nació así Pong, un simulador de tenis que era tan adictivo como sencillo.

Era, por decirlo de alguna manera, el Dark Souls de los bares, fácil de aprender pero muy complicado de dominar.

Con Pong, los arcades comenzaron a conquistar corazones y monederos.

Llegamos al momento épico, los años 80.

Esos años en los que los salones recreativos eran templos del gaming, llenos de luces de cañón, máquinas por doquier y más ruido que en una radio de Transformers.

En 1978, Taito lanzó Space Invaders, los marcianitos de toda la vida.

¿Qué ocurrió entonces? Pues que ahí comenzó la fiebre, la música y el ritmo del juego se aceleraban aumentando la tensión, y los ingresos de las máquinas también aumentaban.

Se rumorea de hecho que en Japón tuvieron que imprimir billetes porque Space Invaders se quedaba con todo el dinero.

A esta fiesta de píxeles se unieron clásicos como Pac-Man, que nos dio el primer héroe redondo del gaming, y Donkey Kong, donde Mario, o Jumpman más bien, se enfrentaba a este mono y debutaba como Fontanero Santarín.

Los salones recreativos eran la cuna de leyendas, donde los cracks competían por récords y los gorrones miraban como si estuvieran en un estadio.

Hoy nos ponemos gameplays en YouTube o Twitch, pero entonces solo había que acercarse al que sabía jugar y disfrutar.

Pero como toda buena historia, los arcades también tuvieron su caída.

En los años 80, la llegada de las consolas caseras como la NES hizo que muchos gamers se quedaran precisamente en la comodidad de su hogar.

Los salones comenzaron a vaciarse, hasta que en 1991 Street Fighter II entró en las salas con más potencia que un Haboken.

¿Qué ocurrió? Que entonces se creó una auténtica comunidad competitiva de nuevo en los salones, con peleas uno contra uno que decidían quién era el rival más fuerte del barrio.

Y qué me decís de los 90, con Dundas Revolution.

Ese juego convirtió, o nos convirtió, a los fans del joystick en bailarines profesionales.

Si no eras bueno en el DDR, difícilmente podías impresionar a tus colegas.

De hecho, más de uno tuvimos después una alfombra para jugar en casa.

Por cierto, si podéis, echad un ojo y buscad la película La Máquina de Bailar.

Aunque los salones recreativos no son lo que eran, su legado sigue vivo.

En Japón, por ejemplo, todavía encuentras arcades en cada esquina, mientras que en Occidente han evolucionado hacia los barcades, donde juegas a clásicos como Metal Slug mientras te tomas una cerveza.

Está bien, pero es mejor compartirla con los amigos, ¿no? Y no olvidemos que sin los arcades no existirían sagas como Tekken, Mortal Kombat e incluso Mario Kart.

Cada partida, cada moneda, fue un paso hacia el mundo del gaming que conocemos hoy.

Las recreativas están de regreso, ya sea porque nos queremos dar un capricho, construirnos una y tenerla en casa, o porque vamos a sitios tan chulos como el Templo del Arcade, que ahora descubriremos cómo se llama realmente, aunque yo creo que para gustos colores.

Y para ello me he traído precisamente a uno de estos templarios, a alguien del Templo del Arcade, que viene a contarnos qué ha sido de estas recreativas.

Ellos, en el templo, lo que hacen es rescatarlas, darles vida, darles esplendor y, bueno, qué mejor que nos lo cuente Robert, aquí presente.

¿Qué tal, Robert? Bueno, encantado.

Bienvenido a Frikipilz Radio.

Nada, bienvenido a Frikipilz Radio.

Muchas gracias a ti por venir a acompañarnos hoy y, bueno, te voy a preguntar, vamos a ir desgranando un poco.

Bueno, lo primero.

Templo del Arcade.

Comentarios de Insert Coin: La era dorada de los salones recreativos (o Arcade) 5u75i

A