
Infernum Z - Libro 4 - El asedio de Plasencia - 017 6y1x5d
Descripción de Infernum Z - Libro 4 - El asedio de Plasencia - 017 4k472
El asedio de Plasencia es la cuarta entrega de la saga Infernum Z. Con mucho humor, mucho suspense, muchos zombis y muy extensa. Casi ochocientas páginas de suspense, en el que, adelantándonos a los personajes, veréis cómo la compleja telaraña se va tejiendo a su alrededor hasta conducirlos a un desenlace inesperado para todos. La infección continúa, pero tras la derrota de Ferranzo las grandes hordas de zombis se han disgregado en pequeños pero muy numerosos grupos. Lo poco que quedaba del gobierno ha desaparecido, por lo que varias regiones se han unido en una Federación cuyo fin es reunificar todos los territorios y alcanzar un ambiente de aparente normalidad potenciando el comercio, la recolonización y el apoyo militar; y los Jabatos, perenne dolor de cabeza del coronel Hernández (al mando de Musel City) han sido nombrados Legados de la Federación para representarla en las negociaciones de adhesión con las ciudades situadas al otro lado de la frontera. Pero esa apacible vida desaparecerá en cuanto les sea encomendada un simple misión. Deberán ir a la Base Origen, una base científica levantada alrededor de la base subterránea nazi de la que surgió Ferranzo, reunirse con los investigadores y, junto con ellos, trasladarse a Plasencia para anular el creciente movimiento que pretende presionar al senado para conceder derechos civiles a los no-muertos. Son muchas las sorpresas que les aguardan en el camino a Plasencia, una ciudad fronteriza excesivamente alejada del resto de asentamientos, y demasiado cerca de la oscura frontera y de lo que se esconde al otro lado de ella. O, lo que es lo mismo, el lugar ideal para acabar con ellos y lanzar un ataque definitivo. Un ataque que, procedente del otro lado del Mediterráneo, se está gestando en lo más profundo del la Base Origen y en el que, tanto los Demonios como los Constantinianos, tendrán un papel dramáticamente fundamental… sin tener ni la menor idea de que quien está realmente al frente de la inminente “Eclosión”, es el único ser al que Ferranzo teme y con el que contrajo una deuda que ahora deberá pagar. Pero, por supuesto, frente a ellos tendrán a los Jabatos, a la Segunda Brigada Cabriteña, a las tropas del Coronel Blanco (acuarteladas en Grajal De Campos), a las del comandante Roberto (de la Ciudadela de Sanabria), a sus habituales compañeros de aventuras (Juanfra, Lucio, Nufrio, etc.) y a dos departamentos de inteligencia al servicio de la Federación: el DAE (Departamento análisis exocientíficos) y la CSIC, “Cooperativa Secreta de Inteligencia Cabriteña”. Aunque… bueno, en realidad estos últimos no son tan inteligentes, así que con ellos de por medio el caos está garantizado. ¿Estáis preparados para afrontar lo que os aguarda? ¡Pues que comience el juego! 6i694g
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Capítulo nueve la colina de la pereza sí ya lo sé seguro que el empleo de un sustantivo tan escasamente prometedor para nombrar el lugar en que aconteció uno de los más encarnizados combates de la cuarta fase de la invasión habrá hecho que muchos sonríes o según la hora que sea que vos the face pero lejos de toda chanza la colina de la pereza encarna a uno de los más heroicos bravíos y desconocidos episodios ocurridos durante la defensa de la sierra de santa bárbara y en la que un puñado de arrojados soldados bajo el mando del sargento echanove al avistar una poderosa fuerza enemiga tomaron la valerosa decisión de en vez de escapar mantener sus posiciones y librar un combate sin par contra una horda que según los datos obtenidos de las imag genes satelitales nadie fue tan tonto como para ir allí a contar cuántos eran de verdad le superaba en una proporción de diez mil a uno llegados a este punto considero que es de justicia mencionar que algunas fuentes no oficiales mantienen que en realidad la proporción real era muy inferior sin embargo tan arteros argos juntos se caen por su propio peso ante las pruebas empíricas que aportó en mi relato y que durante tanto tiempo nos han sido ocultadas no obstante y sea como fuere de lo que no cabe duda es del coraje demostrado por los siete hombres que integraban el pelotón al que se le había encomendado la defensa del estratégico baluarte situado en la provincia de cáceres comunidad autónoma de extremadura justamente en la frontera sur de la mancomunidad de las hurdes en lo más alto del pico altamira con sus novecientos ochenta metros de altura el pico altamira era una mole de granito y pizarra cuya cúspide no sólo albergaba una miríada de antenas de comunicación de todo tipo todas fuera de servicio con la excepción de una a la que conectaban la propia radio del pelotón para poder escuchar las emisiones de blackjack sino que también era un importante cruce de caminos que no comunicaba para que va a subir una montaña y arriesgarte a que el motor del seat panda te pegue un calentón si hay una carretera muy bonita y más plana que un tablero de parchís que la rodea las importantes poblaciones del casar de palomero al noreste abandonada a zavala al noroeste también abandonada y marchad al sur abando pues no listos que es que sois muy listos esta no estaba abandonada porque una panda de hippies se había instalado en ella unas semanas antes del fatídico día malditos jipis una vez aclarada la aparentemente nula importan hacía de tal posición podemos concluir que en principio el verdadero motivo por el que tan aguerrido grupo de combatientes había sido destinado a él no había sido otro que el de enviarlos a un sitio en el que nadie pudiese verlos y lo cierto es que la hora inmortal pelotón bautizado como los siete magníficos no fue justamente valorado por sus superiores hasta que estos tras ser informado sobre su increíble hazaña ofrecieron un multitudinario ágape para como era menester conmemorar su muerte en acto de servicio algo que obviamente contradice a quienes mantienen que sí fueron relegados a un puesto tan aislado fue únicamente debido a que todo el mundo los consideraba gafes claramente tan falaz difamación no es más que un infundado rumor que nada tiene que ver con el hecho de cada uno de ellos fuese el único superviviente de su unidad o en el particular caso del sargento el único superviviente de tres unidades diferentes si acaso lo único que tal cosa evidencia es que sin duda alguna cada uno de ellos era un combatiente ex opcionalmente dotado para el noble arte de la guerra y ejemplarmente versado en todas las técnicas de supervivencia habidas y por haber permitidme ahora que haga un breve inciso para desmentir a las malas lenguas que mantienen que el verdadero propósito del tal comilona en realidad no era otro que el de festejar que por fin se habían librado de ellos cuan mala es la envidia que infravalora los éxitos ajenos para enmascarar los fracasos propios pasemos ahora a rememorar los hechos acontecidos para ello en mi denodado esfuerzo por ceñirme firmemente a la realidad me serviré tanto de los testimonios ofrecidos por quienes lo vieran todo desde lejos malditos jipis antibelicistas como de los testimonios de personas que les conocieron y gracias a las que después de haber entrevistado personalmente he llegado a conocer en profundidad las personalidades de nuestros héroes lo que me ha permitido emplear mi prolífica y siempre imparcial imaginación para rellenar las lagunas dejadas por el olvido y la completa ausencia de testimonios de primera mano de cualquier persona que hubie ha tomado parte activa en la batalla y hubiese sobrevivido a ella además tras haberme sido concedida una autorización de grado ciento ochenta y siete y medio que como todos sabréis es la requerida para obtener a material de alto secreto he tenido el inmenso honor de escuchar por mí mismo las grabaciones de las voces de los propios héroes anda que no are you ni nada y que fueron recogidas por varias radios civiles y militares cuando el soldado jacinto quien se encontraba a cargo de la emisora del pelotón al verse inmerso en el fragor del combate se dejó el micrófono abierto permitiendo
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