
Infernum Z - Libro 3 - El último tren a Asturias - 017 1r4k58
Descripción de Infernum Z - Libro 3 - El último tren a Asturias - 017 2w706r
Nuestros amigos han logrado escapar con vida del asalto de los zombis a San Cabritos, pero lo han hecho muy maltrechos y con dos de ellos contagiados por el virus. Sin embargo, la inesperada aparición de Manuel les ha concedido una oportunidad para sobrevivir... ¿pero a qué precio? ¿Se convertirán en las mismas abominables bestias a las que llevan tanto tiempo combatiendo, o al igual que él se volverán inmunes? Lo cierto es que ni el mismísimo Manuel lo sabe. Y la respuesta a esa pregunta les llegará durante la dura travesía que les aguarda. El invierno ha comenzado, las primeras nieves cubren las montañas de la Cordillera Cantábrica y cruzarla no va a ser tarea fácil. Además del frío y la nieve, deberán enfrentarse a los carroñeros que sobreviven asaltando a los grupos de refugiados, a los zombis que pululan por las montañas en busca de alimento, y a Ferranzo, quien no está dispuesto a permitir que sus más tenaces enemigos pongan en peligro su plan para crear una nueva especie. Sabe que no pueden alcanzar la costa, y por ello hay millares de zombis aguardando el momento de caer sobre ellos. Como veis, no lo van a tener nada fácil. Sobre todo teniendo en cuenta que ignoran la verdadera magnitud de lo que les aguarda. Pero no estarán solos en esta batalla. Por una parte, han dejado muchos amigos tras de sí, y estos no van a permitir que se adentren solos en el infierno. Y, por otra parte, un estrambótico personaje que ha hecho de un remoto refugio de montaña su hogar, está esperando su llegada armado con... una emisora de radio y mucha información. Eso por no mentar a una embarazada que aguarda a que su marido legionario regrese a su lado, un puñado de alemanes que no tienen ni la menor idea de español, un exprofesor de ciencias reconvertido en el alguacil de un campamento de refugiados, dos guías con poca fortuna y menos habilidad para los idiomas, y el siempre inefable grupo formado por el alcalde Melitón y su leal "camarilla" (gallo "Pachorro" incluido) quienes a bordo de lo poco que queda de su tren están dispuesto a hacer lo que sea necesario siempre que sea en aras de la "Nueva Reconquista" y para mayor gloria de España; por lo que no dudarán en luchar contra los infieles... independientemente de que estos sean saqueadores, zombis, "demonios" o soldados británicos. A fin de cuentas, lo único importante es sobrevivir un día más para poder seguir matando. 5q2d3y
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Capítulo diecisiete en casa ajena esto es la hostia dios dijo osvaldo situándose ante una hilera de cadáveres que debía medir no menos de dos kilómetros de largo por tres metros de alto para hacerse un selfie eres absolutamente repugnante le reprochó lola esos restos no son de zombis sino de humanos que fueron masacrados por las torres las automáticas mientras intentaban escapar de la zona de cuarentena solamente eran personas familias desesperadas intentando escapar de la muerte caminando durante días por tierras que ya no eran las que habían conocido un camino demasiado largo y penoso para acabar siendo acribillados por unas máquinas colocadas para proteger a los m más cobardes y a mí eso me da lo mismo esto es una pasada de espectáculo mis fans van a flipar en colores cuando me vean con tantos muertos a la espalda tus fans repitió lola te refieres a los cuatro gilipollas que leen esa mierda de revista que editan en el crucero justo a esos la zorrita y a mí me parece que es una maravilla de revista todas las adolescentes del crucero se pirran por los héroes que salen en ella y esta foto me va a colocar en la puñetera portada no insistas lola dijo maitane no podrás convencerle es solo otro gilipollas más en un mundo lle uno de gilipollas un poco por delante de ellas pablo josé y el teniente observaban con atención el lugar al que se dirigían el grueso de los muertos vivientes no menos de tres mil estaban concentrados en la explanada de los túneles pero era extraño estaban completamente quietos lo único que podía son distinguir gracias a sus prismáticos fue que de vez en cuando sus cabezas se movían levemente era casi como si los zombis estuviesen durmiendo de pie como si hubieran entrado en una especie de letargo lo cual resultaba extremadamente desconcertante sobre todo teniendo en cuenta que hasta aquel instante ninguno de los integrantes del equipo de rescate había visto a los zombis actuar de aquella manera a lo mejor es que el frío los ha dejado congelados no estoy tan seguro objeto pablo yo más bien diría que la explicación más plausible es que como les han ordenado permanecer vig hilando las entradas esos cabrones simplemente están ahorrando energías es bastante lógico porque si no pueden desplazarse tampoco pueden encontrar presas así que sencillamente se quedan totalmente quietos hasta que algún movimiento sonido o incluso el olor de una presa les advierte de que vuelven a tener comida a su alcance a así que en mi opinión será mejor que no nos confiemos ya habeis oido advirtió a su gente el teniente despleguemos en abanico y bajemos campo a través hasta la carretera de pero hacedlo con sumo cuidado cubríos con la vegetación y entre los restos de los vehículos para pasar destape recibidos está claro todos asintieron con la cabeza recordad añadió pablo si no queremos joderla es imprescindible que nadie haga el menor ruido así que si necesitáis eliminar a alguno de los pocos zombis solitarios que hay por la zona hacerlo usando los fusiles con silenciador un único y certero dis paró en la cabeza si erráis el tiro bastará con que una de esas cosas empiece a chillar para que todas las demás se nos echen encima vaya veo que de verdad controlas este tipo de situaciones el teniente parecía encontrarse extrañamente satisfecho eso es muy pero que muy interesante pues a mí no me lo parece tan sólo es una mezcla de mala suerte una larga singladura por la ruta de las meteduras de pata y la experiencia necesaria para no partirme una pierna cada vez que caigo en una de ellas aunque espera exactamente por qué has dicho que es interesante por nada simplemente es bueno saber que tengo a mi lado a alguien que sabe como arreglárselas nada más unos minutos después llegaron sin incidentes hasta la carretera cubierta de coches y cadáveres en descomposición y pablo subiéndose el pañuelo que llevaba al cuello se cubrió la nariz mientras murmuraba joder y pensar que estuve a punto de convertirme en uno de ellos y eso preguntó el teniente fue un par de semanas después de lo del embalse de la almendra mi perro y yo estábamos a punto de intentar cruzar la frontera cuando dos tíos aparecieron de repente y me advirtieron de lo que me pasaría si lo intentaba guao pues ya puedes estarles agradecido porque al hacerlo te salvarán la vida sabes quizás podrías invitarles a que se viniesen a vivir al crucero me encantaría poder hacerlo pero les mataron en una escuela los zombis nos tendieron una emboscada que o amigo
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