Episodio 3 - Maratón de Roma y charla con Pablo García 2yv2v

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motivación e historias que te inspirarán a seguir corriendo.
En el podcast de hoy, donde vamos a hablar del maratón de Roma, he cometido un par de
errores al mencionar la edición del maratón. La edición de 2024 es la número 30 y la
de 2023 la número 29. Así que cuando escuchéis el podcast, por favor, tened esto en cuenta.
La fe derrata. Gracias.
Hola, el tema de hoy del podcast, de este episodio 3, va a ser la maratón de Roma.
¿Por qué hacer este podcast sobre la maratón de Roma y no sobre otras de las marathonmellos,
como habíamos iniciado con el episodio 1 de la maratón de Berlín?
Bueno, pues porque resulta que hay dos personas, que son Idoia y David,
que se han lanzado a la aventura de correr esta maratón dentro de un mes.
Y bueno, en ánimo de animarles y contarles un poquito las triquiñuelas de este recorrido
y de esta experiencia, pues procedo a contar cómo me fue a mí el año pasado en dicha maratón.
La idea de correr esta maratón surge un poco, pues como viene siendo habitual en mí,
de casualidad. Era un precio bastante asequible para lo que suele ser una maratón. Creo que
empezaba en 59 euros. A mí me costó al final el dorsal 74 euros, porque cogería algo de seguro,
como viene siendo habitual, por si pasa alguna lesión o pasa algún acontecimiento de última hora.
Y en julio de 2023, cuando ya tenía en mente que iba a correr el maratón de Nueva York,
pues claro, dije, venga, pues después de este, ¿a cuál voy? Y dije, Roma es asequible,
los vuelos no fueron tampoco muy caros, 130 euros más o menos, directos a Fiumicino,
y el hotel fue un poco más complicado, porque los hoteles en Roma no son el concepto que
tenemos de hoteles como tenemos aquí en Tres Estrellas en España. Allí son un poco más
cutrecillos y al final pues cogí una habitación sencillita en un edificio antiguo que tenía varias
plantas y alguna de esas plantas era un hotelillo. Yo lo cogí cerca de la estación de Termini,
que es la estación que conecta el aeropuerto de Fiumicino con Roma mediante un tren en Leonardo,
el tren va directo y creo que eran 14 euros en su momento, ahora habrá subido actualizando precios,
y Termini no es una muy buena zona para quedarse, pero el hotel estaba un poquito más apartado,
estaba en Vía Nacional y desde ahí podía ir andando a la salida y volver desde la meta,
porque cuando corrí en 2024, en marzo de 2024, esta carrera salía del Coliseo y
llegaba también al Coliseo, entonces luego podía volverme andando y así fue. Bueno,
pues dicho esto, la Maratón de Roma surge en el año 1982, es decir, que la Maratón y yo
compartimos año de nacimiento y estoy corriendo en 2024 la edición número 39. La medalla es
chulísima, la camiseta es monísima de la muerte, me gusta muchísimo qué diseño han cogido,
es de Joma, si mal no recuerdo, y tiene el Coliseo estampado tanto en la camiseta como en la propia
medalla. Pues planifico el viaje para cogerme unos días antes y poder ir a la feria, poder
pasear por Roma, porque es una ciudad maravillosa, todos lo sabéis que tiene una historia estupenda,
como un bollón de restos arqueológicos e historia que todos conocemos, ya no sólo por la peli de
Gladiator, sino porque todos en algún momento habremos viajado, habremos querido ir o incluso
hasta podemos haber estudiado latín, como fue mi caso, y me cojo unos días de vacaciones,
me voy el jueves y me cojo el billete de vuelta el propio domingo de la Maratón. Bueno, iba yo sola,
así que tampoco suponía mucho engorro, simplemente es que al hacer el checkout del hotel a las seis
de la mañana o así, tengo que dejar las maletas y a la vuelta pues me tengo que asear en el propio
baño del hotel, porque mi habitación ya no estaría disponible en ese momento, pero sin mayor
inconveniente, no supuso mucho este pequeño hándicap de tener que dejar la habitación sin poder
ducharme. El viaje es sencillo, me encanta que en el aeropuerto de Fiumicino ya no tienes que sacar
los líquidos de la maleta, porque tienen unos escáneres que son súper guays y ya podían los
demás aeropuertos copiar la idea y traérnoslo a España, por ejemplo, no tienes que sacar, pasan a
Fiumicino.