Entre Dimensiones Ecos del Averno, El Teléfono Maldito de Japón 35623s

Desde el podcast Entre Dimensiones os presentamos una nueva sección en la que tenemos la suerte de contar con el heraldo de las leyendas urbanas, Daniel. En colaboración con el podcast Echos del Averno os traemos este espacio donde trataremos las leyendas urbanas más misteriosas y aterradoras que podáis conocer. Cada semana una leyenda urbana terrorífica que vais a disfrutar con nosotros, pero os lo advierto agarraos bien a vuestros asientos, a vuestros sillones o a vuestra cama y no os dejéis vencer por el miedo. Adelante Daniel, cuéntanos la leyenda urbana de esta semana.

Buenas noches, apaga la luz, silencia el móvil y abre bien los oídos, porque esta historia no se cuenta de día. Hoy en la sección Echos del Averno de Entre Dimensiones tenemos el sonido que nunca querrás escuchar, una leyenda urbana que nació entre frecuencias, pitidos distorsionados y supersticiones ancestrales.

Hoy vamos a hablar de la leyenda urbana del teléfono maldito de Japón. En Japón hay un número que nadie quiere marcar, un número que, según cuentan en diversos foros, hilos de Reddit y blogs perdidos en la red, trae la muerte al que lo recibe. 090444444. ¿Exageración? Tal vez, pero si conoces la cultura japonesa, sabes que el número cuatro es tabú.

Se pronuncia shi, igual que la palabra muerte, y cuatro cuatros, shi, shi, shi, shi, es como un presagio repetido, un eco fúnebre, como si la propia muerte te marcara una y otra vez. Se dice que si recibes una llamada de ese número y contestas, no hay una voz al otro lado, no humana al menos. Algunos hablan de susurros, otros de una especie de zumbido que se mete en tu oído como un insecto invisible. Y hay quienes aseguran haber escuchado su propio nombre dicho al revés antes de que la línea corte.

Me llamó a las 2.44 de la madrugada. No tenía a nadie registrado con ese número. Contesté, y lo único que escuché fue algo como un llanto, pero metálico, como si viniera de dentro de un túnel. Montaje, paranoia colectiva, puede ser, pero no estás solo si te has sentido raro al escuchar esto. Número fue real, existió. Durante un tiempo, si llamabas, te respondía un mensaje automático promocionando servicios telefónicos, pero luego desapareció, desactivado, eliminado, como si algo o alguien no quisiera que siguiera sonando.

Esta historia inspiró cortometrajes de terror como 44444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444444 donde un joven recibe la llamada y acaba perdiendo mucho más que la cobertura. Internet se llenó de creepypastas, desafíos virales y advertencias. Y aunque la empresa telefónica japonesa negó cualquier maldición, jamás volvieron a usar ese número. Puede que todo sea una coincidencia o una broma que se salió de control. O puede que...