El doble crimen de Almonte (I) - Tráiler 073# 69113r

Escúchame, cierra tus ojos pronto, alguien está en la ventana, o llamando a la puerta, o quizás no, se oyen ruidos en casa, escuchaste, hay alguien a tu lado, la silenciosa noche y todo lo esconde, está cerca, que se rompe en el alma de un hombre para llegar a matar, que ha ocurrido en su corazón para cruzar los límites del tabú ancestral, que lo ha conducido, les habla Francisco José Fernández Cruz Sequera y les doy la bienvenida a este programa en el que cada viernes recorremos la naturaleza del crimen y del criminal, comenzamos.

Buenas noches, bienvenidos una vez más a este nuevo programa del día de autos, estamos acostumbrados a lanzar una moneda al aire y elegimos cara o cruz y tenemos la certeza de que va a ocurrir una de ambas cosas, lanzamos la moneda, cae y sorprendentemente se queda de canto, ni cara ni cruz, este es un caso que permite hacer una cosa que todo el mundo hace en la creencia o en la presunción de que es muy fácil y que es muy difícil, que es juzgar, más allá de que los jueces vivan al otro lado de ese muro de silencio, de corporativismo, de privilegio en el que se encierran para alzarse por encima del resto de los seres humanos, un hecho totalmente reprobable, cuando descendemos a ese juez que todos los días debe decidir sobre la vida de otro con base en las pruebas, cuando las pruebas son claras, contundentes, evidentes, no hay problema, es muy fácil, pero qué hacer cuando hay tantas cosas a favor como tantas cosas en contra, si el automatismo nos lleva a decir indubio pro reo, en caso de duda a favor del reo, en contra de lo que decía Dolores Ibarruri, más vale matar a 100 inocentes que se escape un solo culpable, la ley dice que más vale que se escapen 100 culpables a condenar a un solo inocente, pero lo cierto es que cuando el crimen es un crimen menor, pues pensar que hemos suelto un culpable, bueno, cuántas veces no habrá habido culpables que han sido inocentes, lo compensamos de alguna manera, pero cuando tenemos más de 150 acuchilladas en una niña, 104, cuando vemos la premeditación, el festival de sangre que organiza este hombre, el asesino, ese autor desconocido a día de hoy, que ese crimen sin castigo, ese crimen sin autor, pues te produce un desasosiego, cuando uno va por las calles de una localidad tan genuina, tan auténtica, con tantas cosas buenas y con algunas malas, como es Almonte, y piensas que te puedes cruzar con alguien que es capaz de darle a una niña 104 acuchilladas, que además la conocía, como que te inspira poca tranquilidad, pero además yo invito a los oyentes a que en este programa busquen las cosas que están