El caso Almonte 332s3s

Uno de los casos que explicaremos en Paradero Desconocido ha sido resuelto en la actualidad, por lo que es de vital importancia abordarlos sin importar los años que hayan pasado.

En la primavera de 2013, la población onubense de Almonte se vestía de gala para recibir a la Virgen del Rocío, un acontecimiento que tan solo tiene lugar cada siete años.

Mientras las calles se llenaban de jolgorio, un suceso macabro tenía lugar en un piso de la calle Avenida de los Reyes, donde un padre y una hija perdían la vida apuñaladas.

¿Quién acabó con la vida de esta familia de la pequeña localidad de Almonte? Quedaos con nosotros en otro caso sin resolver de Paradero Desconocido.

Es sábado 27 de abril de 2013.

Miguel Ángel Domínguez, de 39 años, y su hija María Domínguez Olmedo, de 8, se encuentran tranquilamente en su casa de la Avenida de los Reyes, en Almonte.

Miguel Ángel ha invitado a un amigo a ver un partido de fútbol, pero se está haciendo tarde.

Le ha prometido a María que saldrían a cenar una pizza y después darían una vuelta para ver a la Virgen del Rocío, siendo trasladada hasta la parroquia de la Asunción.

María, que no suele estar acostumbrada a salir tan tarde de casa, tiene preparado el vestido que se va a poner encima de la cama.

Sobre las diez menos cuarto de la noche, el amigo se despide de Miguel Ángel y abandona el edificio, y él decide darse una ducha antes de salir.

En la calle la gente va y viene sin parar.

En el bar que se encuentra situado justo debajo de la puerta de la vivienda, hay varias personas tomando algo en la terraza.

Nada parece advertirles de lo que está sucediendo en aquellos momentos a escasos metros de donde se encuentran.

El lunes 29 de abril, Mariano Olmedo, el suegro de Miguel Ángel y abuelo materno de la niña, va a la escuela de María a recogerla para llevarla a comer a casa.

Ve como todos los niños abandonan el recinto, pero no ve a María por ninguna parte.

Tras esperar largos minutos, llama con insistencia a su yerno Miguel Ángel, pero no le responde al teléfono.

Decide ir a la secretaría de la escuela para preguntar por María, pero allí le indican que la niña no ha asistido a clase.

Sorprendido, vuelve a llamar a Miguel Ángel creyendo que tal vez María se habría puesto mala en el último momento, pero como sigue sin responder, decide llamar al trabajo.

La respuesta que recibe le hacen saltar todas las alarmas ya que le indican que tampoco ha ido a trabajar.

Decide llamar a su hija Marianela, la madre de María, pero ella tampoco sabe nada, por lo que le pide que vaya hasta el domicilio familiar para echar un vistazo.

Acude a paso raudo hasta el lugar y encuentra la puerta abierta del portal.

Le parece extraño.

Sube las escaleras hasta la puerta de entrada a la vivienda, que también se encuentra abierta, y allí, horrorizado, encuentra un escenario repleto de sangre.

En shock, entra a toda prisa y encuentra el cuerpo sin vida de Miguel Ángel en su habitación.

Llama a su nieta por toda la casa hasta que finalmente la encuentra también sin vida en su dormitorio, tumbada sobre un charco de sangre y la cabeza tapada con una manta.

Horrorizado, piensa que Miguel Ángel ha matado a la niña y luego se ha suicidado.

Baja las escaleras del domicilio a toda prisa, chillando, la ha matado, la ha matado.

Pocos minutos pasan hasta que la guardia civil se persona en el lugar de los hechos y acordona la zona.

El cuerpo de Miguel Ángel lo encuentran en el dormitorio principal, al lado de la cama de matrimonio.

Por la cantidad de sangre y las heridas es evidente que ha sido apuñalado varias veces.

Su cuerpo se encuentra desnudo y las marcas en brazos y manos evidencian que se ha defendido de su agresor.

Las manchas por toda la casa demuestran que la pelea se fue trasladando por el pasillo hasta allí.

El cuerpo de María se encuentra en otro dormitorio, en el suelo, al lado de su cama.

El vestido que tenía preparado de la noche anterior ahora salpicado de sangre sigue donde lo dejó.

Una manta cubre la cabeza de la niña y cuando la apartan descubren que ha sido salvajemente asesinada.

Les horroriza la vehemencia de las cuchilladas y la violencia con la que ha sido agredida, casi mayor que en el cuerpo del padre.

En una de las manos encuentran un cuchillo que parece haber sido extraído del cajón del dormitorio.