Apariciones cotidianas demasiado reales - Los expedientes X del Buenos Días Madrid (214) 1k4x6j

Bueno y si hablamos de Álvaro Pombo tenemos que hablar de otro Álvaro, de nuestro Álvaro Martín, director de Madrid Misterioso. Ya saben que todos los miércoles viene a este estudio a hablarnos de expedientes equis, en este caso para hablar de encuentros insólitos en lo cotidiano.

Pero antes de nada, yo creo que, hombre, teniendo en cuenta que esta semana hemos conocido el fallecimiento del Papa Francisco, se han disparado todo lo que tiene que ver en torno a las profecías y de eso te quería preguntar, Álvaro.

Muy breve, muy buenas nieves y feliz Día del Libro, que me toca algo relativo a mi tocallo, pero vamos que estoy muy lejos de él, de ese grande y ese enorme de las letras, pero Día del Libro y día también de Vuelta de Semana Santa con esa noticia que ha impactado a todas las redacciones del fallecimiento del Papa. No vamos a decir mucho porque igual ya estamos saturados, pero sólo decir dos pinceladas. ¿Estamos ante el último Papa? Nostradamus dijo que, ¿no? Algo empezó a decir.

Sí, sí, y se hablaba del Papa Negro. El Papa Negro como tonalidad de piel o el Papa Negro como su forma de actuar respecto a la Iglesia. Una forma un tanto oscurantista, una forma, puede ser también metafórico, pero sí que hay candidatos que efectivamente son de origen africano y sí que tienen la tez negra. Muchos están deseando que salgan ellos como Papa, porque ya esto no da para más a esos tremendistas que quieren ya el fin del mundo. Luego hablaba un santo inglés que se llamaba San Malaquías.

Hizo unas profecías de todos los papas que iban a venir desde su época en adelante y dijo que el último Papa con el cual habría una especie de grandes disturbios en Roma y en el Vaticano se llamaba Pedro el Romano. Entonces habrá que estar pendientes si el sucesor de Jorge Bergoglio es italiano, que también hay algunos candidatos fuertes en ese sentido, o si se llama Pedro o se pone como nombre de Papa Pedro. Así que estamos pendientes más en tono de huasa que otra cosa. No sobre la muerte del pontífice, que lamentamos mucho, sino sobre qué va a pasar después en esas quinielas que son a cual más funesta.

Luego no va a pasar nada, que nadie se preocupe, pero son las profecías que han emergido y son profecías del final de los tiempos. Pero mientras tanto, estamos en el aquí y en el ahora y ahora toca hablar de misterios. Y tantos misterios, además, porque cuando hablamos de fantasmas y además con ese misterio que envuelve a esas presencias con gran teatralidad, fenómenos paranormales que resultan impresionantes, claro, es una parafernalia, podríamos decir, que sobrecoge. Pero en este caso vamos a hablar de... Pero que no es necesaria.

Que no es necesaria y que además vamos a hablar de esas presencias que la gente nota y que nota de una manera muy real. Pero como estamos tú y yo aquí hablando. Es que, imagínate, nos hemos imaginado por la casuística y por las leyendas y las historias románticas del XIX, que un fantasma aparece con una capa blanca o que no tiene piernas o que sale flotando. Puede ser. Pero hay casos, y hace poquito llegó uno, y por eso me animé a hablar de este tema, hay casos en los que es tan real que dudas si has visto un fantasma o no.

Hasta que hay un detonante que dices no, no, era un fantasma, porque esa persona que yo he visto está fallecida. Vamos con un ejemplo, que es el que me hizo... Además voy a hablar de muchos compañeros del mundo del misterio, así que yo los nombraré. Este caso que te voy a contar lo narraba hace muy poquito en su canal de YouTube un investigador, un parapsicólogo que se llama Santiago Vázquez, bueno, muy famoso por su etapa en el programa de Cuarto Milenio.

Bueno, pues este señor cuenta en su canal que él vive en Guadarrama, vive aquí en la sierra, y que hace unos días, hará un par de semanas no más, estaba por la noche paseando por el pueblo, eran sobre las 11 de la noche, frío, lluvia, y en ese ambiente que había muy poca gente en la calle, se encuentra, se cruza de frente con un señor bastante mayor, él dice que tendría 80 y largos, vestido no demasiado abrigado, sin paraguas, con un trajecito de color beige, y él no, o sea, Santiago se quedó mirando a este señor que se le cruzó, pero el señor pasó olímpicamente de él, cuando normalmente, normalmente en los pueblos, pues buenas tardes, buenas tardes, no como en Madrid ciudad, pero en los pueblos que todo el mundo se conoce, pues buenas tardes, buenas tardes, o buenas noches. Nada, el hombre fue a su bola, la aparición, porque ya te digo que es una aparición,