Vera, de Auguste Villiers de L'Isle-Adam 222h3x

Empeñado en aterrorizar al lector y en ser azote de la sociedad burguesa o google villiers de origen noble fue venerado por sus contemporáneos para verlaine era uno de los mayores poetas y un narrador genial mezcla de ironía metafísica y terror ferviente seguidor e interesado en el ocultismo creía en la superioridad del espíritu sobre la materia y en la pervivencia del amor más allá de la muerte tema central de uno de sus más célebres relatos verá pero el sesgo fantástico y casi cercano a la ciencia ficción de su escritura convive con una crítica feroz a los valores mundanos que abrazaban las masas de su tiempo murió en la más absoluta de las miserias mezclando dicen agua con carbón porque no disponía de tinta para escribir ivoox originals presenta historias para ser leídas un podcast de ciencia ficción terror y fantasía dirigido por olga paraíso ficciones sonoras con los que podrás sumergirte en otra realidad vera o guts billie la forma del cuerpo le es más esencial que su sustancia el amor es más fuerte que la muerte ha dicho salomón si su misterioso poder es ilimitado caía una tarde de otoño en parís en estos últimos años los carruajes cerrados del bosque iluminados ya rodaban hacia el sombrío barrio de saint germain uno de ellos se detuvo ante la puerta de una amplia mansión señorial rodeada de jardines seculares sobre la cintra había un escudo de piedra con las armas de la antigua familia de los condes de azul a saber una estrella de plata en campo de azur con la divisa pálida with lyrics bajo la corona protegida por principesca funda de armiño los pesados batientes se abrieron un hombre de treinta y cinco años de luto con el rostro mortalmente pálido descendió del vehículo taciturnos sirvientes portaban antorchas sin verlos salvo las gradas y entró era el conde de azul vacilante subió los blancos escalones que conducían a la habitación donde esa misma mañana había depositado en un féretro forrado de terciopelo y rodeado de violetas entre ondas de batista a su dama de placer a ver a su pálida esposa arriba la suave puerta giró sobre la alfombra de azul descorrió las cortinas todos los objetos estaban en el lugar donde la condesa los había dejado la víspera la muerte la había golpeado súbitamente la pasada noche su bien amada se había desvanecido en goces tan profundos se había perdido en abrazos tan exquisitos que su corazón roto de delicias había desfallecido sus labios se habían teñido bruscamente de púrpura mortal apenas había tenido tiempo de dar a su esposo un beso de despedida y sonriendo sin pronunciar palabra sus largas pestañas como crespones fúnebres descendieron sobre la hermosa noche de sus ojos el día sin nombre había pasado hacia el mediodía el conde de azul tras la espantosa ceremonia en el panteón familiar despidió en el cementerio a la negra comitiva luego encerrándose solo con la amortajada entre los cuatro muros de mármol tiro tras sí la puerta de hierro del mausoleo perdí a incienso sobre un trípode delante del féretro