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Descripción de Una fina línea 394744
Hace 5 años, en plena pandemia, una fina línea separó nuestra realidad de la ficción, de la distopía... Luis de Vega salió con su cámara a retratar esa irrealidad como si de un escenario de guerra se tratara. Mientras, en los hospitales, cientos de personas en coma experimentaban su propia irrealidad, un delirio que les arrastraba a vivir en mundos paralelos. "Una fina línea" es un episodio original de "Historias a Pie de Micro", de Formato Podcast https://formatopodcast.com/apiedemicro/ ¿Quieres patrocinar un episodio y que tu historia sea protagonista? Escríbenos a [email protected] Créditos: Guión, narración y dirección: Chema Martínez Pastor Entrevistas, diseño sonoro y atmósferas musicales: Luis Blanco Diseño de carátula: Chema Martínez Pastor, con fotos de Envato y de la cuenta de Instagram de @erdevega Con la colaboración especial de Rubén Gutiérrez y Raquel Rero Voz de indicativo inicial: Beatriz López p3i9
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Puesto de control de la Comandancia Naval de Ceuta, dígame.
Hola, mi nombre es...
Quería comunicar algo que estoy viendo ahora mismo.
Estaba nadando en aguas abiertas y al pasar por delante del puerto me ha parecido ver movimientos extraños alrededor del yate del jeque.
¿Se refiere al yate del jeque Alokum? ¿Qué tipo de movimientos? Sí, sí, al yate del jeque.
El que llegó ayer al puerto.
Lo hemos visto todos en la tele.
Vamos, es que es fácil saber cuáles son los movimientos extraños que hay alrededor del yate del jeque Alokum.
¿Qué tipo de movimientos? Sí, sí, el yate del jeque, el que llegó ayer al puerto.
Vamos, es que es fácil saber cuál es el yate porque es el doble de grande que el resto.
Yo le cuento lo que estoy viendo.
Veo una Zodiac acercándose sin luces.
Tres personas a bordo.
En el muelle hay dos hombres que no parecen marineros.
Todos van vestidos de negro y con mochilas que parecen llevar armas.
Creo que van a atacar al yate.
Entendido.
Enseguida enviamos a alguien del cuerpo.
Por favor, quédese donde está y en ningún caso se involucre.
Repito, nosotros nos encargamos de ello.
Busque un lugar seguro y quédese allí.
No, no, no, no.
No creo que tengan tiempo.
Se están moviendo.
Están actuando ahora.
Van a entrar al yate de un momento a otro.
Están sacando unos fusiles.
Van a atacar al jeque.
Entiendo, pero es que no es seguro que usted haga nada.
En unos minutos, mis compañeros… No voy a quedarme aquí parado mientras esto pasa, gente.
No si puedo evitarlo.
Hay vidas en juego.
¿Pero usted quién es? ¿No entiende el riesgo o es que se ha vuelto loco? Quédese donde está, repito.
Lo siento, gente.
No puedo.
Voy a intervenir.
Necesito cortar.
Oiga, ni se le ocurra… Bueno, yo recuerdo que estaba yo en una parte, en la frontera, digamos, de Ceuta, porque yo estaba en España.
Y luego, yendo a Nado, ibas hasta la otra parte.
Entonces, el jeque este estaba aparcado en un yate aquí, en la parte de España.
Y yo estaba por allí y, de pronto, yo vi que unos hombres se iban a cargar al jeque.
Y yo fui y no sé cómo lo hice.
La escena con la que hemos comenzado este episodio no ocurrió en realidad.
Al menos, no como la has escuchado.
Se trata de una recreación que hemos hecho con dos actores y un guión que nos hemos inventado y que está basado en este testimonio que estás escuchando.
Yo había salvado unos desfiles con los guardias reales.
Y luego me dijeron, bueno, y encima te vamos a ingresar en tu cuenta no sé cuántos millones de dinero.
Quizá te suene esta voz, ya que Luis fue el protagonista del anterior episodio de Historias a pie de micro.
Pues en octubre de 2020 cogí el COVID.
El COVID atacó muy fuerte a Luis.
Tras un paso angustioso por el hospital, donde quedó incomunicado, y tras varias situaciones límite, no hubo más solución que aplicar remedios más agresivos para luchar contra el virus.
Estuve así la friolera de seis meses en coma en la UCI.
Begoña, la hija de Luis, solo podía ver a su padre a través de un cristal y conocer su estado gracias a los médicos y enfermeros del hospital.
Él está en un box de la UCI, que es como una habitación, y está cerrado con cristales.
Pues como él todavía contagiaba COVID realmente, pues no me dejaban entrar a verle, ni tocarle, ni siquiera con el EPI.
Hasta que un día, las buenas noticias por fin llegan.
Y bueno, empezó a mejorar. Le empiezan a quitar la sedación.
Ni me acuerdo el día que me durmieron, ni me acuerdo el día que también, vamos, me desperté, por decirlo así.
No me acuerdo. Ya hay cosas que no recuerdo. Tengo cosas que parece que han sido sueños.
Lo que no sabían era que en ese momento comenzaba otra película.
Es muy raro porque estaba muy despierto, pero no era él.
Incluso sus ojos eran diferentes. Está en un continuo delirio. Me habla cosas muy raras, me manda a buscar.
Lo primero que le dije, hija, ve a la caja de ahorros a tu correr a ver si me han ingresado no sé cuántos millones, 200 millones o no sé cuánto.
Que le he salvado al jeque no sé qué en un atentado.
Y es que las historias que Luis comienza a relatar parecen sacadas de la mente de un guionista cinematográfico.
Sí, porque él estaba en una barbería cortándose el pelo, pero hay gente muy mala en esa barbería y tengo que tener cuidado.
Y todo cosas así. Realmente yo pensaba que...
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