UCSM: El Amigo Asignado 6l1b33

Hola, bienvenidos, transmitimos del canal de espiritualidad y el día de hoy vamos a leer un curso sobre milagros. ¿Les interesa? Bueno, los que puedan reunirse. Yo sé, es un poco tarde, es viernes, pero este es el horario con el que contamos, así que vamos a aprovecharlo. Por años leímos un curso de milagros. De hecho, hay más de 300 videos grabados aquí. Ahora estamos en el libro, que es un poco la aclaración, el libro más extenso. Cuando hacíamos la lectura del otro material, siempre hacíamos una oración al inicio. No sé si ustedes lo recuerdan. Bueno, aquellos que me acompañaron en esa época, esta oración la repetíamos en cada ocasión y en ocasiones incluso hacíamos una visualización, pero ahora simplemente vamos a hacer una oración con todos ustedes, pero quiero que sientan la realidad de esto que estamos diciendo. A ver, vamos a cerrar los ojos. Podemos juntar las manos en actitud de oración. Esto es unir lado derecho e izquierdo, padre madre como uno.

O esto también es la unificación, la voluntad de mantenerme unido. Por eso unimos las manos al orar. Y con los ojos cerrados quiero que repitan esto en sus mentes. Estoy aquí únicamente para ser útil. Estoy aquí en representación de aquel que me envió. No tengo que preocuparme por lo que debo decir ni por lo que debo hacer, pues aquel que me envió me guiará. Me siento satisfecho de estar donde quiera que él desee, porque sé que él estará allí conmigo. Sanaré a medida que le permita enseñarme a sanar. Bien, ahora podemos abrir los ojos. Esa es la llamada oración del sanador. Es una oración que siempre hacíamos en el curso, sobre todo cuando daba el curso en vivo. Estamos sacando la cuenta de cuántas horas de lectura del curso deben haber ocurrido en los últimos diez años, y creo que fácil debemos haber rebasado las 5.000 horas. No es poca cosa, les digo, después de repetir tanto el curso como que tu cerebro se cablea para los conceptos, las ideas y cómo impartirlos también.

Así que les digo, no desdeñen la práctica, que siempre es importante. Porque uno puede decir, comprendí una idea, sí, pero ahora ponerla en práctica es otra historia. Y en repetir la idea muchas veces es como que llega a instalarse mejor en ti. Y la práctica misma de esa idea se hace también más poderosa. Así que la lectura sigue siendo importante. Yo sé que en estos días de tecnología y de estar scrolling down los vídeos, estar mirando, distrayéndonos con material corto, pareciéramos no tener tiempo para enfocarnos en la lectura. Pero les digo, sigue siendo importante. Así que los invito a leer. Y si pueden leer el material directamente, por supuesto, háganlo. ¿Por qué desarrollamos el curso así? Mucha gente lee el curso en línea, solamente un párrafo y lo explican y se extienden en eso por toda la lectura o lo que sea que ellos van a hacer ese día. Otras personas ni siquiera leen párrafos del curso, sino simplemente explican algo que comprendieron del curso.

Aquí nosotros siempre hemos dado lectura, leemos párrafo por párrafo y vamos explicando de qué se trata. Y creemos firmemente en que la intención del libro es que se imparta de esta manera, de que exista una suerte de canalización, de que podamos ser como el conducto a través del cual esta luz pasa al mundo. Cuando tienes la intención de sostener esa voluntad divina, esta pasa a través de ti, te inspira a dar el mensaje que debe llegar a la gente que está pendiente del mensaje. Entonces, en realidad no importa si se reúnen 50 personas o 300, lo importante es que tengamos la disposición de recibir. Recuerden la oración. Estoy aquí únicamente para ser útil. Pueden ustedes decir eso en el lugar donde se encuentran, ¿verdad? Piénsenlo. Frente a la familia. Estoy aquí únicamente para ser útil. Frente a la gente en el trabajo. Frente a tu labor. O simplemente con desconocidos en la calle. Estoy aquí únicamente para ser útil. Estoy aquí en representación de aquel que me envió.

Es reconocer que no existo en aislamiento. Soy un rayo de ese sol. Soy una extensión de aquello que me envió.