Solos en una isla desierta, durante la pandemia. 173y2c

Muy buenos días, muy buenas tardes, muy buenas noches a todos y bienvenidos una vez más a este vuestro canal a rumbo a la supervivencia. ¿A quién tenemos hoy? Hoy tenemos a Alex Gainza. Bien, ¿y quién es Alex? Pues mira, desde pandemia tenemos prevista esta entrevista. Desde pandemia, por cuestiones de la vida, hasta ahora no habíamos podido. Casi todo ha sido por mí, ahora no puedo, ahora sí, ahora no. Ya por fin hemos llegado, llevaba mucho tiempo y de verdad tiene una historia que os va a sorprender.

O sea, yo he vuelto a releerla, porque ya por fin, bueno, pues le pusimos fecha, aquí la tenemos, por fin la entrevista, pero he vuelto a releer un poco la historia. Le pedí que me hiciera otro resumen de todo lo que le había pasado, porque yo algo recordaba de lo que le había pasado con él ya antes de lo que había ocurrido en Panamá, pero es que la historia es una tras otra, o sea, es un es un conglomerado, es increíble todo lo que ha ocurrido. Estoy muy contento de que le tengamos con nosotros, estoy muy contento de que nos pueda contar esto, porque fue una odisea y es él el protagonista y el que nos va a contar todo.

Entonces, lo primero que todo, Alex, que nos cuentes, yo creo que un poco desde el principio, qué es lo que te llevó desde tu Barcelona natal hasta Gunayala, en Panamá, qué es lo que te llevó a zarpar, cómo fue la travesía y cómo empezó toda esa aventura que vamos a ir desgranando ahora a lo largo de esta entrevista. Cuéntanos.

Bueno, pues yo soy Aleix Gainza, soy marino mercante de profesión y de estudio y como buen marino siempre mi deseo había sido pues dar la vuelta al mundo en un velero, que es un sueño que creo que compartimos muchos alrededor del mundo, entonces, bueno, pues yo cuando conocí a Eugenia, mi actual mujer, yo le dije, mira, esto va viento en popa, pero que sepas que mi deseo, mi objetivo en la vida es dar la vuelta al mundo en un velero.

Entonces me respondió, ah, perfecto, pues me apunto, vamos a comprar un barco y nos vamos y así fue un poco, no tan rápido, pero buscamos un barco, lo compramos, lo estuvimos preparando durante unos años en Barcelona y nos casamos y luego de viaje de novio nos fuimos a dar la vuelta al mundo o al menos con esa intención y nada, llegamos a Gunayala, entre Barcelona y Gunayala hay muchísimas historias, muchas batallitas que ya podemos contar en otra ocasión, pero bueno, sí, llegamos a Gunayala, la historia que yo quería compartir no es de la primera vez que llegamos porque estuvimos ahí una temporada maravillosa con la intención pues de cruzar el canal de Panamá y seguir para el Pacífico, pero bueno, por razones familiares de trabajo y tal, pues al final no pudo ser y volvimos a Colombia para dejar el barco ahí y volver a España y todo esto empezó cuando se regresó al barco a Colombia, estuvimos pues unas semanas preparando con la intención pues de pasar otra temporada en Gunayala, en San Blas, porque nos había maravillado la zona y queríamos estar ahí más y explorar otras partes del archipiélago que no conocíamos, bueno, un poco seguir navegando por esas aguas, entonces pues en Colombia embarcamos a dos tripulantes canadienses porque teníamos a nuestra hija pequeñita, entonces queríamos, interesante, pues tener ayuda con ella para que aprendiese inglés, un poco también un par de manos más para el mantenimiento del barco y después de eso pues zarpamos, no sin inconvenientes, porque el mundo marítimo siempre es un conjunto de eventualidades que van pasando, averías que hay que ir solucionando, pero bueno, finalmente zarpamos de nuevo hacia San Blas con el barco pertrechado para ello y seguimos, bueno, pues salimos a navegar, a medio camino tuvimos algún inconveniente con el tema motor, bueno, en fin, no fue una travesía fácil, pero finalmente llegamos a San Blas.