"Que nadie manipule tus emociones" 1r5ln

Buenos días o buenas tardes. Que nadie manipule tus emociones. Hoy estoy en compañía de María Jesús Álava Reyes para su libro Que nadie manipule tus emociones. Un libro que llega en un momento en que miremos por dónde miremos es el caso, o parece que es el caso. Un placer volver a coincidir contigo María Jesús. La última vez que hablamos fue durante el COVID hace cinco años, como el tiempo pasa. Muchas gracias Valerie y encantada de verdad porque además sé que lo trabajas muy en profundidad y si hacemos una entrevista de que nadie manipule tus emociones es porque te lo has leído, lo has señalado y has puntuado lo que te parece más interesante. Tu libro es una reflexión personal y profesional de tu carrera como psicóloga y resaltas la importancia de la educación emocional desde la infancia para evitar la sensación de haber fracasado al no prepararnos psicológicamente.

Se subraya la necesidad de reconocer la individualidad en cada persona, como por cierto lo hace la medicina tradicional ayurvédica desde hace más de 5.000 años, no digo más. Para empezar vamos a hablar de la educación emocional en niños. ¿Por qué continuamos sin brindar a los niños una adecuada educación emocional siendo consciente de su impacto? Hace poco leí unas declaraciones tuyas diciendo que hemos fracasado. ¿Cómo esperar que todo vaya bien puesto que somos el fruto de una generación que no se ha trabajado psicológicamente? Se necesita tiempo para modificar esta realidad. ¿Cómo resolver esta ecuación? Primero, sabemos que es importante prepararnos emocionalmente y lo seguimos sin hacer. Yo creo que deberíamos empezar con los niños muy pequeños y luego cómo hacer para que nuestras propias generaciones que provienen de personas que veían la psicología como algo para locos, sepamos modificar nuestra manera de actuar y de pensar.

Valeria, fíjate, en mi trayectoria profesional a lo largo ya de 40 años, de esos 40 años yo trabajé 16 años directamente con niños y además muy específicamente en la etapa de 0 a 6 años y ahí vi que ese trabajo era clave, fundamental. En los seis primeros años es donde se conforman los pilares de la personalidad y donde se desarrolla el 80% de todo el potencial intelectual de una persona. En los seis primeros años. Y nosotros lo que hicimos fue un experimento maravilloso en el cual a los niños, conociendo su singularidad desde el principio, a un niño con 3-4 meses ya le puedes valorar. Podéis hacerle una evaluación de desarrollo y ver cómo están las diferentes áreas en motricidad, en adaptabilidad, en sociabilidad, en el lenguaje receptivo comprensivo que tenga. Y hay ya muchas diferencias, con 3-4 meses entre unos niños y otros hay muchas diferencias.

Pero si tú desde la educación trabajas esa individualidad de cada niño, lo vas compensando y lo haces desde la educación emocional, lo que haces es que desde el principio sacas el máximo potencial de cada niño y les enseñas a pensar, les enseñas a reflexionar, les empiezas, les enseñas a cuestionar. Desde los dos años les pones en círculo y ya están cuestionando cualquier cosa que tú hagas. Les enseñas a no ser manipulables. Y algo fantástico, les enseñas a ser niños seguros, con confianza, con alegría, con una buena autoestima. Y les enseñas estableciendo también unas pautas básicas en educación. Yo en 2002 saqué el libro El no también ayuda a crecer. Y decía cuidado, cuidado porque no lo estamos haciendo bien. No lo estamos haciendo bien con los niños y estamos sustituyéndoles