Los Grandes Pensadores y Dios a2h2f

En la filosofía de Kant, el alma se concibe como un "nómeno", una realidad que, aunque no puede ser experimentada directamente, es necesaria para la existencia de la experiencia y la moralidad. No se trata de un objeto de conocimiento teórico, sino de un postulado necesario para la razón práctica. El alma como nómeno: Kant distingue entre el mundo fenoménico, el mundo de la experiencia, y el mundo nouménico, el mundo de las cosas en sí mismas. El alma, como el mundo y Dios, pertenecen al mundo nouménico, es decir, no pueden ser conocidos a través de los sentidos ni de la razón teórica. Postulado de la razón práctica: Si bien no podemos probar la inmortalidad del alma, la razón práctica, la razón moral, sí exige su postulación como una condición necesaria para la posibilidad de la moralidad y la realización del bien supremo. Fundamento de la moralidad: La creencia en la inmortalidad del alma se convierte en un fundamento para la realización del bien supremo, la idea de un mundo donde la moralidad sea posible. Esta creencia no es una verdad de la razón teórica, sino una necesidad de la razón práctica para actuar moralmente. La relación alma-cuerpo: Kant considera que el alma y el cuerpo se relacionan, aunque no de una manera causal como la que establece la física. Las sensaciones y experiencias del mundo sensible son las que permiten al alma tener representaciones, pero el alma no puede ser explicada como una parte del cuerpo. No una sustancia material: El alma no se considera como una sustancia material en el sentido de la física, sino como una fuerza esencial que actúa sobre el cuerpo y permite la existencia de la vida y la conciencia. En Kant, el alma no es un objeto de conocimiento científico, sino un postulado necesario para la razón práctica. Su inmortalidad no se puede probar, pero es un requisito para la moralidad y la posibilidad de la realización del bien supremo. El alma no es una sustancia material, sino una fuerza esencial que permite la interacción entre el sujeto y el mundo, y que se manifiesta a través de la conciencia moral.

En la teología y antropología medievales, la antropología se abordaba desde la perspectiva de la fe cristiana, centrándose en la relación del ser humano con Dios. La antropología teológica busca comprender al hombre a la luz de la revelación cristiana, incluyendo la Sagrada Escritura y el dogma,

La visión judía del alma en el Antiguo Testamento (o Tanaj, en la tradición hebrea) no es exactamente igual a la concepción del alma en la filosofía griega o en algunas corrientes cristianas posteriores. En el Antiguo Testamento, el concepto de alma está íntimamente ligado a la vida, la persona y el aliento vital, y no se separa fácilmente del cuerpo como ocurre en ideas dualistas posteriores.

La palabra griega para alma es "psijé" (ψυχή), de donde proviene nuestro término "psicología". Los griegos no tenían una sola visión del alma; su pensamiento fue evolucionando desde lo mítico hasta lo filosófico. La antigua Grecia nos dejó una rica variedad de ideas sobre el alma, desde sombra pasajera hasta esencia inmortal. Estas reflexiones influyeron en la filosofía posterior, en la teología cristiana, y hasta en la psicología moderna. Si te interesa, puedo ayudarte a comparar estas visiones con la antropología cristiana, que también considera al alma como inmortal, pero con un enfoque espiritual y teológico distinto.

La filosofía cristiana es el estudio del pensamiento y la sabiduría desde una perspectiva cristiana, basado en la Biblia y en la fe en Dios. Se enfoca en responder preguntas fundamentales sobre la vida, la existencia, el bien y el mal, la verdad y el propósito humano, a la luz de las enseñanzas de Jesucristo.

Gabriel Marcel fue un dramaturgo y filósofo francés. Sostenía que los individuos tan solo pueden ser comprendidos en las situaciones específicas en que se ven implicados y comprometidos. Esta afirmación constituye el eje de su pensamiento, calificado como existencialismo cristiano o personalismo.

Karl Barth (nacido el 10 de mayo de 1886 en Basilea, Suiza; fallecido el 9/10 de diciembre de 1968 en Basilea) fue uno de los teólogos protestantes más influyentes del siglo XX, que cambió radicalmente el pensamiento protestante con su énfasis en la “total alteridad de Dios”. Barth recuperó la centralidad de la doctrina de la Trinidad dentro de la estructura dinámica y racional de la dogmática cristiana; de particular importancia fue su reapropiación de la cristología de la iglesia antigua . Su vigorosa oposición al nacionalsocialismo alemán condujo a su suspensión como profesor de teología en la Universidad de Bonn. Posteriormente, en Basilea, continuó trabajando en su monumental Dogmática de la Iglesia (completando cuatro volúmenes) y pronunció más de 500 sermones.

Albert Einstein, uno de los científicos más brillantes de la historia, tuvo una relación compleja con la idea de Dios. Aunque no era creyente en un Dios personal como lo describe la religión tradicional, tampoco era ateo. Su visión se acercaba más al panteísmo de Spinoza, donde Dios es visto como la armonía y las leyes del universo. Einstein dijo en una ocasión: "Quiero conocer los pensamientos de Dios; lo demás son detalles." También expresó: "Creo en el Dios de Spinoza, que se revela en la armonía de todo lo que existe, pero no en un Dios que se preocupe por el destino y las acciones de los seres humanos." Esto significa que Einstein veía a Dios como una fuerza que da orden al cosmos, no como un ser personal que interviene en nuestras vidas. Sin embargo, tenía un profundo respeto por el misterio del universo y la espiritualidad que muchas personas encuentran en la religión.

La dedicación de San Jerónimo es un ejemplo inspirador de amor por la Palabra de Dios, el estudio profundo y el servicio a la comunidad cristiana. Su legado vive aún hoy, recordándonos la importancia de buscar la verdad y comprenderla en su profundidad. Como Jerónimo dijo: "Ignorar las Escrituras es ignorar a Cristo".

Kierkegaard trazó el camino del negativismo, es decir, de una filosofía que parte de lo negativo en cuanto al valor, para tomar de él una referencia a lo positivo en cuanto al valor. Así, la angustia y la desesperación constituyen la base de partida para un acuerdo sobre una vida sin angustia ni desesperación.

Soren Kierkegaard trazó el camino del negativismo, es decir, de una filosofía que parte de lo negativo en cuanto al valor, para tomar de él una referencia a lo positivo en cuanto al valor. Así, la angustia y la desesperación constituyen la base de partida para un acuerdo sobre una vida sin angustia ni desesperación.

Emmanuel Mounier piensa que el ser humano se ha vuelto contra sí mismo por- que ha perdido el sentido de su preeminencia como persona ante las co- sas. De ahí que su pensamiento se proyecte como una defensa activa de la persona, pues sólo de ese modo el ser humano se podrá recuperar de la crisis del siglo XX.

Cuando se busca "aclarar conceptos", la intención es desglosar y definir términos, ideas o nociones para que su significado sea más claro, preciso y entendible. Esto ayuda a evitar malentendidos y promueve una comprensión más profunda. Aquí se explica cómo se realiza y su importancia:

Jean-Paul Charles Aymard Sartre, conocido comúnmente como Jean-Paul Sartre, fue un filósofo, escritor, novelista, dramaturgo, activista político, biógrafo y crítico literario francés, exponente del existencialismo y del marxismo humanista.​

A lo largo de la historia, ha habido pensadores cuyos ideas y obras han marcado un antes y un después en el desarrollo de la humanidad, moldeando nuestras creencias, valores, estructuras sociales y políticas.

Libertad y determinismo son incompatibles y sólo uno de los dos puede ser cierto: El determinismo es cierto y la libertad humana una ilusión. La libertad humana es real y el determinismo no es completo.

Marsilio de Padua no sólo se atrevió a señalar que la causa más relevante que afectó gravemente la paz fue la injerencia del poder clerical, sino que fue más allá al proponer un modelo de soberanía2 sustentado en la totalidadde ciudadanos como un gran legislador universal.

La relación entre fe y razón ha sido un tema central en la reflexión cristiana a lo largo de la historia. La fe y la razón, lejos de estar en conflicto, pueden coexistir y enriquecerse mutuamente, guiándonos en nuestro camino hacia la verdad y el entendimiento de Dios.

Demócrito es el creador de la teoría atomista y mecanicista del Universo,según esta teoría,la realidad sólo está constituida por átomos materiales e infinitos que se mueven en el espacio vacío se distinguen entre si por tamaño,posición y orden.

La historia del pensamiento es el estudio del desarrollo de las ideas y conceptos que han moldeado el entendimiento humano a lo largo del tiempo. Esta disciplina abarca diversas áreas como la filosofía, la ciencia, la religión, la política y la cultura. Analiza cómo las ideas han evolucionado, interactuado y transformado sociedades y civilizaciones.