En este nuevo episodio de La Taberna de Crowley, nos adentramos una vez más en el sótano de Churritos Paranormales, ese rincón donde las carcajadas y el misterio conviven en perfecta armonía. El Turco, Crowley y, por supuesto, Churrito, nos traen el cuarto taller del espacio Churritos, dedicado a desentrañar el protocolo de actuación que emplean en sus salidas e investigaciones paranormales. Pero que nadie se engañe: aunque el tono sea gamberro y distendido, lo que aquí se expone es una guía seria (y seria a su manera) sobre cómo enfrentarse a lo desconocido. Durante la charla, el trío repasa con detalle el inventario técnico básico para cualquier exploración urbana con tintes paranormales: cámaras nocturnas, grabadoras de audio, sensores de movimiento, medidores de campos electromagnéticos (como los famosos REM-POD y K2), y hasta las adoradas bolitas de luz para gatos que, según Churrito, funcionan sorprendentemente bien en estas investigaciones. Pero la cosa no se queda solo en el “equipo”. También nos cuentan cómo preparan el terreno antes de una experiencia: desde inspeccionar la zona a plena luz del día para evitar accidentes, hasta colocar cuidadosamente cada dispositivo donde más probabilidades hay de captar actividad. Incluso hay sitio para lo que consideran el paso más importante del proceso: ¡cenar bien antes de comenzar! Y por supuesto, no faltan los experimentos estrella, como la sesión de preguntas (sí/no y abiertas), grabadas con múltiples dispositivos para detectar cualquier anomalía sonora, o el aclamado método Estés, en el que uno del equipo se aísla con auriculares y antifaz para convertirse en canal receptor de posibles voces del más allá a través de una radio de escaneo rápido. ¿El elegido? Raulillo, el más escéptico de todos, que, sin embargo, es el que más se presta a estas pruebas. Entre insultos fantasmales y respuestas inquietantes, la experiencia oscila entre la risa y el escalofrío. Además, lanzan una invitación a los oyentes: compartir sus propias experiencias paranormales, grabaciones o testimonios a través de correo o redes sociales. Todo será tratado con respeto, humor… y con un punto de escepticismo, como manda el estilo de la taberna. Este episodio-taller es tanto una guía práctica como un testimonio de la manera en que lo misterioso y lo cotidiano pueden encontrarse en un sótano lleno de sensores, bocatas y mucho sentido del humor. Si alguna vez te has preguntado cómo se investiga “en serio” el más allá sin perder la risa en el intento, este es tu sitio. https:// www.edenex.es