Meditación 8-14 92e1z

Buscamos esa postura cómoda pero al mismo tiempo que nos permita dormirnos.

Ponemos las manos sobre las piernas, sentamos los pies en el suelo, en o con él, cerramos los ojos y a partir de este instante vas a tomar conciencia de ese maravilloso recurso que nos lleva aquí a la hora que es la respiración y empiezas a tomar conciencia de cómo entra el aire en tu cuerpo y de cómo sale. No modifiques esa respiración en absoluto, simplemente observa cómo respiras, no te identifiques con esa respiración, has de realizarla sin juicio, sin evaluarla.

De igual forma en la que mirarías la vela, la llama de una vela, observando sin juzgar. Toma conciencia de cómo entra el aire en tu cuerpo y de cómo sale. Respira lentamente por la nariz, nota cómo se te hincha la barriga cuando entra el aire y cómo se deshincha cuando lo sueltas. Observa esa respiración sin modificarla, toma conciencia de que algo respira en ti, no te cuesta esfuerzo respirar.

Respiras y te llenas de calma, respiras y te llenas de paz. Visualiza cómo al inspirar, ese aire que entra, ese aire que es vida, va recorriendo el interior de tu cuerpo, revitalizando, alimentando, sanando, reparando cada célula, cada órgano, cada tejido que hay en él. Imagina que la respiración es un proceso de sanación, es un proceso de calma al inspirar, entra aire que sana, entra aire que calma y cada célula sana y cada órgano se rejuvenece y cada tejido se alimenta con ese aire.

Toma conciencia de que al inspirar y soltar el aire, sueltas con él todo aquello que ya no vale, todo aquello que ya no sirve, todo aquello del pasado que ya no sirve para nada. De forma que inspiras y te nutres de vida, expiras y sueltas. La respiración es tu ancla del momento ahora, del momento presente.

Si en algún momento viene alguna imagen, algún recuerdo, algún pensamiento, simplemente obsérvalo y sin juzgarlo, déjalo ir y utiliza tu ancla, la respiración, para volver a la aquí y a la ahora.

Observa esa respiración, no la modifiques, toma conciencia de que está y de que existe, toma conciencia de que no te cuesta esfuerzo ninguno respirar. Respiras y te llenas de calma, respiras y te llenas de paz.