
Descripción de La magia de los números 1o11t
Inventamos los números para dominar al mundo y para intentarlo con la vida. Al final, los números se revelaron y nos convirtieron en sus esclavos inconscientes. Desde tu DNI a tu nómina, son números que te identifican y clasifican y que por otra parte forman solo una pequeña pieza de un conjunto, un ecosistema numérico en el que nos incluimos voluntariamente para ordenar el mundo, más allá de nuestros deseos. La lista de música de este episodio, lo podéis escuchar en: https://bit.ly/3vDCzVL 1. Hemos introducido el demonio de los números en la tierra que pisamos, en el aire que respiramos, en nuestros pensamientos, hasta en nuestra carne. Somos números aprisionados en un recuento que agoniza con el tiempo, y se regodea en los dígitos que representa nuestro poder en la tierra. El número que nos eleva y nos hunde, que pretende gobernar la poesía y que al final se ubica con frialdad en las estadísticas de la población mundial. Así que en, 3, 2, 1, y comenzamos a contar. 2. Inventamos los números sobre todo para contar el tiempo. Porque necesitamos hacer más penosas las esperas, sobre todo aquella en las que tenía que contar en cuantos años, meses o minutos, volvería a estar en tus brazos. 3. Que los números sean importantes no quita que por sí mismos sean aburridos, y sino probad a contar ovejas y veréis que pasa. 4. Perder la cuenta de algo es una buena forma de entender lo que en realidad somos, pues el número de aquello que hicimos se fusionó en nuestra esencia hasta diluirse con nuestra comprensión del mundo. 5. Tener números favoritos, manías a números gafes, preferencia por los pares y fobia a los primos. Es un buen comienzo para establecer una clara inclinación por amantes titulados en matemáticas. 6. En realidad, somos 1, pero además somos infinitos. Y entre esos extremos nos debatimos, cuando lo queremos todo o llegamos a estar tan hartos que no deseamos nada, más que estar solos y sentir que en realidad somos solo un elemento más en el basto universo. 7. La magia de los números tan solo es la representación maravillosa de la armonía del universo que en nuestra infinita ignorancia acabamos vinculando a todo aquello que no comprendemos pero deseamos. Y sí, el 7 es mi número favorito y no se por qué ni me importa. 8. El último episodio de Ecos en la Penumbra fue escuchado por 1109 personas. Un 56% lo escuchaba en su integridad y un 44% se fueron descolgando minuto a minuto de forma progresiva, de uno en uno y de tres en tres para superar el sopor o para atender otros asuntos más importantes. Al final, las métricas y estadísticas de los ecos se pusieron a bailar con su música y me dijeron que a las 12 de la medianoche volverían a sus gráficos y tablas. Cuando terminó todo me encontré un porcentaje de cristal olvidado en la esquina de mi Tablet. Lo usaré como amuleto colgado del micrófono, seguro que dará más alcance a mis palabras. 9. Y es que al final solo podemos amar aquellas cosas que tienen cualidades incontables, por la sencilla razón de que nunca podremos dominarlas. Podrás conocer el amor, la belleza, el misterio, te acercarás deseando, aspirando a rodearlo del halo del magnetismo, del encanto, de la empatía, de lo inspirador y lo adorarás, hasta que alguien sea capaz de escalarlo borrando de un golpe su aura inconmensurable. 10. A base de correr maratones aprendí que los números también te pueden golpear hasta casi matarte o matarte del todo. Pero también te pueden alzar a una gloria tan brillante como efímera, pues después vienen las incontables agujetas. 11. Luego me hace gracia como algunos números representan cosas tremendas. El 66 como el número del diablo, el 13 es considerado presagio de desgracias y mala suerte, luego sobre otros como el 69 recaen artificios corporales de gran complejidad. Y así un largo etcétera de densas y cargantes adjudicaciones a guarismos a los que les toca soportar nuestra obsesiva maní de establecer relaciones tangibles de todo aquello que no comprendemos, no controlamos y al fin y al cabo de nuestras incontables fantasías. 12. Una prueba de que queremos usar los números como grilletes de la vida es el de nuestro empeño por atrapar nuestros cuerpos en ellos. Y así, peso, ancho, largo, perímetro, copa, altura, van variando de forma más o menos ostensible a lo largo de nuestra vida sin tener apenas margen de control, incluso con denodados esfuerzos para ello. El cuerpo se va con los números de juerga y cuando vuelven la resaca es nuestra. 13. Cuando la música consigue elevar el número de pulsaciones de mi corazón, muchas incontables palabras vienen acompañando esa energía sonora para poblar estas líneas, cinco, seis, quizás siete en ocasiones, de estos párrafos de los que me invento un mundo donde por suerte no hay dimensiones finitas y cabemos todos, bailando, respirando la emoción que las canciones de nuestra vida nos traen a la mente y al corazón a pesar de los años, décadas que ya pasaron. 14. Y es que si algo bueno nos enseñan los números es que lo mejor es escaso y pasa rápido, mucho. Y que los préstamos vitales siempre se cobran un interés abusivo, brutal, implacable. Así que te recomiendo que no te quedes empanado esperando que lleguen los peces a tu habitación. Y no pasa nada si sales a la calle a andar con las aletas de bucear. 15. Lo peor de los números, es que llegue el momento en que ya no puedes contarlos. Porque mientras contamos podemos hacer como que vivimos, e incluso a veces hacerlo. 16. Quizás por eso estamos empeñados en aprender a contar desde muy pequeños, así podemos controlar lo que más nos puede ayudar a no convertirnos en una de las penosas estadísticas del telediario. 17. Mi hijo se examina mañana de física y química. Las fórmulas se columpian de las patillas de sus gafas, desprendiendo decimales que le irritan los ojos, cansados ya tras tantas horas de atravesar intrincados laberintos matemáticos para sortear el caos terrenal. Nos educamos con números para dar un orden manejable a un mundo que siempre está preparado para absorbernos en la pasión descontrolada. 18. Los humanos hemos conseguido dominar a nuestro animal interior impactándole números en la mente con el fuego candente de la educación. Así podemos darle una dimensión apropiada a la práctica de nuestros vicios, y buscar una progresión conveniente a la progresión de las virtudes. El problema viene cuando la obsesión altera los términos de la ecuación y nos convertimos en unos sádicos virtuosos. Ya ha pasado muchas veces. 19. De todas formas, los números acaban siendo una manera más de profundizar en nuestra obsesión como seres expansivos, absorbentes e ilimitados en la capacidad de vampirizar mundos. Al fin y al cabo, con el manejo de los números determinamos cuando hemos acabado con algo y tenemos que empezar con otra cosa. La esperanza es aprender a que no necesitamos contar hasta cero y buscar el crecimiento, no la extinción. 20. Para terminar y para empezar te sugiero que adoptes el cero como tu número favorito. Desde ahí todo es posible y nada lo es, no tienes más condicionante que entender que partimos de un todo que al no ser nada puede adoptar formas infinitas. Y es que la mejor manera de dominar el mundo de los números es comprender que nacen de nuestra necesidad de controlar ese vacío del que procedemos y al que de forma irremediable tenemos que volver. Este es el ecos 19, me gustaría pensar que ese número crecerá de forma indefinida, pues infinitas son las ideas con las que podemos bailar con la música, benditos ritmos de la humanidad. ¿Quieres que sigamos bailando? Dime tú el número al que quieres que lleguemos. BANDA MUSICAL Wim Mertens. Not Me Yann Tiersen. I’ve Never Been There Pink Floyd. Sheep Queen. Crazy Little Thing Called Love Elza Soares. O Samba Está Com Tudo Vangelis. Oceanic Kraftwerk. Nummern Rafaella Carra. Fiesta Ennio Morricone. Man with a Harmonica David Bowie. Ashes to Ashes ELO. Confusion Matt Bianco. Half a Minute Lene Lovich. Lucky Number La Unión. Amor Fugaz Delafé y las flores azules. Muertos The Beatles. Help! La Dama se Esconde. Fugaces Tears For Fears. Everybody Wants To Rule The World Enya. Caribbean Blue Battiato. Otra Vida 6h562
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
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