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¡Hola, hola, hola! ¡Buenos días, buenas tardes o buenas noches, allá donde te encuentres! Nueva edición, nuevo programa de Hisora Neurociencia. La neurociencia está en el aire. Ya estamos aquí nuevamente conciencia, con buenos momentos, con buen rollo, con buena música y con una gran invitada.

Y desde este lado del micro, en Alcalá de Henares, en Radio Creatividad, desde mi punto, desde mi lado, Álvaro Capitán, junto conmigo Miguel Ángel Simal. ¡Muy buenas! ¡Hola, hola, hola! Desde este lado del mundo, porque hoy vamos a recorrer el mundo, o al menos medio mundo.

Vamos a recorrer medio mundo y ahora me pensaba que me ibas a decir que estábamos en el otro lado de la mesa, que es real, es así. Ahora mismo estamos en la misma mesa, pero como en las pelis estas más antiguas, donde un aristócrata se pone en un lado de la mesa y un familiar en el otro lado, que están a 10 metros, pues así estamos.

Pásame la mantequilla, por favor, Capitán.

Tenemos un programa magnífico que hablaremos hoy de neurodivergencia y con una persona que es experta en comunicación en medios, pero que también es mamá de una pequeña, de una nena, dentro del mundo neurodivergente. Va a ser magnífica la entrevista, la charla con nuestra invitada.

Y podemos empezar casi, casi, casi enseguida, si Miguel Ángel me lo permite, como siempre él está a los mandos, es el jefe de los mandos, así que ahí empezamos con la parte de la editorial.

Sus deseos son órdenes.

Pues este mes, el mes de abril del año 2025, como sabéis, se conmemora el mes y el momento del autismo, no solamente o del espectro autista, sino también de la neurodivergencia en general, un concepto que más allá de etiquetas nos invita a reconocer que no todas las mentes funcionan igual y que eso no sólo está bien, sino que además es profundamente valioso.

Pero hablar de neurodivergencia no es sólo hablar de cerebros que piensan distinto, distinto de ti, de mí, de todos nosotros, es hablar de estructuras que no se adaptan, de sistemas educativos que aún exigen uniformidad y de familias que deben enfrentar desafíos que el entorno muchas veces no alcanza a comprender.

Hoy queremos poner sobre la mesa la realidad de muchas niñas, niños y adolescentes que se enfrentan a un mundo que aún no está hecho para ellos y que quizá no comprendan del todo, ni para su energía, ni para su ritmo, ni tampoco para su manera única de aprender.

Nos acompaña, o nos acompañará en un ratito, una comunicadora que vive esta experiencia muy, muy de cerca. Con ella hablaremos de educación, de maternidad, de posibles y ajustes necesarios y de cómo se construyen discursos más inclusivos desde lo personal, pero también desde lo colectivo.

Porque reconocer la neurodivergencia es el primer paso, sí.

Pero también, y es realmente importante, la idea es transformarnos como sociedad para que cada persona pueda vivir con respeto, con libertad y, por supuesto, saber quién es y en quién se puede convertir.

Bienvenidos, bienvenidas, una vez más, un programa más, a Hisora Neurociencia. La neurociencia está en el aire.

¿Qué te pareció la entrada? Potente, potente y muy muy con los pies en la tierra, ¿no? Y hace falta que muchas, muchas personas alcen la voz para que todo el mundo tome conciencia de esta realidad que es, que es que nos envuelve, pero muchas veces o miramos para otro lado o la ignoramos directamente. No solamente tener conciencia en este sentido, sino conocer experiencias de primera mano, que es lo que traemos muchas veces en la neurociencia, está en el aire, para que desde el otro lado del micro, desde el otro lado de