
Historias de la Segunda Guerra Mundial 5m5en
Descripción de Historias de la Segunda Guerra Mundial 6b3g3g
Atentos a las anécdotas y curiosidades que cuenta Pere Cardona en «Stock de Ràdio» ocurridas en torno a la II Guerra Mundial: Patatas contra un submarino. Tatuajes de cerdos y gallinas en la US Navy. Tiburones en el Canal de la Mancha. El escondite de Las joyas de la Corona británica. Una carta que llega 72 años después. Confunden un vegetal abandonado en un jardín con una bomba. Más historias en www.historiassegundaguerramundial.com Programa realizado 26 marzo 2018 4za2s
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Recordemos historias, hechos insólitos, curiosidades, que sucedieron antes, durante y después de la Segunda Guerra Mundial.
Lo explica Pera Cardona.
Estock de radio con Manolo Garrido.
Las propuestas que nos traes hoy, Pera, ¿tienen más de insólito o más de curiosidad? A ver, tienen bastante más de insólito porque hoy te traigo tres noticias que han sucedido recientemente, que están relacionadas con hechos que sucedieron durante la Segunda Guerra Mundial, y luego también te traigo tres historias que sucedieron durante la Segunda Guerra Mundial, pero que verás que tienen algo de relación con estas noticias actuales.
La primera está situada en una ciudad alemana, concretamente la población se llama Bretten.
Sí, esta primera historia está situada en la ciudad alemana de Bretten, como tú bien dices, porque la policía de esta ciudad recibió el aviso de un anciano de 81 años que decía que había encontrado una bomba, como las que la aviación aliada lanzaba durante la Segunda Guerra Mundial sobre Alemania, había encontrado una bomba de este tipo en el jardín, en el jardín de su casa, entonces les avisó para que se personaran y para que llamaran a los artificieros para poder desactivarla.
Es lo habitual, lo que conviene en estos casos.
Sí, esto es lo habitual, además ten en cuenta que sobre Alemania se lanzaron miles y miles y miles de toneladas de bombas, con lo cual cada dos por tres siempre que hacen algún tipo de obra pública, que amplían algún aeropuerto, tocan alguna carretera o lo que sea, siempre salen bombas de este tipo, con lo cual la policía está bastante acostumbrada.
Bueno, pues la policía se personó en casa de este hombre, fueron hacia el jardín, y realmente sí, se encontraron con un objeto que medía unos 40 centímetros de largo y que pesaba cerca de 5 kilos, lo que este hombre creía que era una bomba, lo que era realmente era un calabacín enorme.
¿Cómo? Un calabacín, un calabacín enorme que alguien le había dejado tirado en el jardín, se supone que para gastarle una broma a este señor para que lo confundiera con una bomba, ¿no? O sea que a alguien le hizo la gracia de decir, aquí te dejo el calabacín para que te lo pienses que es una bomba.
Exactamente, lo que no sabemos es si lo llegaron a desactivar y al igual le hicieron alguna tortilla de calabacín o algo así con el artefacto.
Pero el aspecto era de...
El aspecto era como el de una bomba, claro, de color verde, alargado.
Bueno, pues ya sabemos lo que sucedió en Bretain.
Ahora nos vamos a otra historia a caballo entre Noruega y California.
No sé si esta historia, Pera, se le podría calificar de...
A veces llegan cartas, cartas de amor.
Exactamente, a veces llegan cartas de amor con 72 años de retraso.
Para que se quejen de correos.
Exactamente.
Ahora te voy a explicar la historia de un veterano de 96 años llamado Rolf Kristoffersen, originario de Noruega, como tú decías, pero que en la actualidad reside en California.
Y que durante el mes de mayo del año pasado, de 2017, se llevó una grata sorpresa al recibir una carta que su mujer, ya fallecida, le había escrito 72 años antes durante la Segunda Guerra Mundial.
Porque Rolf, durante la Segunda Guerra Mundial, estuvo sirviendo en uno de los barcos que transportaban mercancías entre Estados Unidos e Inglaterra, en uno de aquellos convoyes.
Entonces, claro, las comunicaciones en aquella época no eran como las comunicaciones a las cuales estamos acostumbrados hoy en día.
Y era muy usual, ¿no?, el enviar cartas desde el frente hasta los familiares.
Me imagino, Pera, que más comunicación desde casa hacia el frente que desde el frente hacia casa.
Exactamente, entonces, el sistema que encontraron Rolf y su mujer, Virginia, para ponerse en o, fue que Virginia le fuera escribiendo cartas a los puertos que se había, donde iba a fondear el barco en el cual estaba trabajando Rolf, ¿no? Lo que pasa es que una de estas cartas llegó tarde, estuvo un tiempo en la oficina del puerto, y el consignatario, al final, lo que hizo fue devolverla a su remitente.
Porque el buque ya había partido.
Porque el buque ya había partido.
Entonces, cuando a Virginia le llegó la carta,
Comentarios de Historias de la Segunda Guerra Mundial 3z472x