SERMONES DESDE LA INHOSPITA TRINCHERA - SERMON DE LA DOMINICA IN ALBIS - 2025 476i34

Esta es cristiandad luchando para que cristo reine en el nombre del padre y del hijo y del espíritu santo amén estamos en el domingo en albis pasada la primera semana de pascua es decir en su octava para nuestra edificación meditemos reflexionemos contemplemos los hechos llevados a cabo por nuestro señor es decir sus diversas apariciones durante todo este tiempo antes de su ascensión en primer lugar la aparición de jesús nuestro señor ya resucitado a su madre santísima enseña una piadosa tradición y no lo contradice el sagrado evangelio que la primera visita la hizo jesús resucitado a su madre benditísima la razón para ser ella honrada con esta distinción fue por ser quien más de cerca había participado de las angustias del calvario y con más perseverancia había rogado por la resurrección de su hijo sabiendo que al tercer día debía realizarse este feliz acontecimiento estaba la celestial señora recogida en su habitación la madrugada del domingo de pascua entregada a fervorosas súplicas y suspirando por el dichoso momento de abrazar nuevamente al objeto de su amor el dulcísimo jesús cuando ve aquí que de repente brillantes resplandores inundan aquel humilde aposento y jesús radiante de gloria esplendorosa como cinco soles las cinco llagas de su cuerpo se presenta ante los ojos de nuestra señora dos solas palabras interrumpieron el silencio de aquellos solemnes momentos madre hijo y junto con ellas vuelan de corazón a corazón mutos encendidos afectos de júbilo y de amor afortunada señora no es ella aquella triste entrevista que tuvisteis con él antes del jueves de la cena cuando pidió licencia y bendición para ir a padecer ni es aquella otra sobre toda ponderación dolorosísima que despedazó vuestro corazón en la calle de la amargura ni tampoco aquella voz humoribunda con que le oíste y confiarlos desde la cruz al discípulo fiel o quejarse de sed en comandar al padre eterno su espíritu es vuestro hijo glorioso inmortal vencedor ya de todos sus enemigos triunfante de la muerte del pecado y del infierno para no padecer ni morir ya nunca jamás gozaos madre bendicísima gozaos madre feliz pero acordaos que sois también nuestra madre y que lo sois de muchos hijos que no han resucitado todavía que no lo han hecho por medio de la confesión y de la comunión pascual que no han resucitado del sepulcro de la culpa del pecado mortal orad por su resurrección como orasteis por la de vuestro divino jesús hace de que como a vos os apareció en tal día así aparezca también a estos desventurados llame a su corazón los alumbre con su luz los saque de las tinieblas del pecado a la claridad hermosa de la divina gracia la segunda aparición para santa maría magdalena