Episodio 25 | Cómo dejar de perseguir objetivos 6qs1l

Vamos adentro está dedicado a todas nosotras que tenemos una mente inquieta, emociones intensas y un alma imparable. Bienvenida a este espacio de introspección donde comenzará tu gran viaje de conexión contigo misma y así poder crear todos los hábitos de mujer de espíritu libre que ya están dentro de ti, esperándote para poder construir una autoestima inquebrantable. Soy Mariana Santa María, una mujer altamente sensible que busca incansablemente nuestra libertad emocional y la paz mental.

Hola y bienvenida a un episodio más de Vamos Adentro. Hoy, como dijimos en el episodio anterior, vamos a hablar acerca de cómo dejar de ponerme objetivos y enfocarme en el proceso. Mucho se habla acerca de esto, de vivir el proceso, de soltar el resultado, pero realmente esto nos cuesta mucho trabajo y te quiero explicar cuál es el motivo del por qué te está costando tanto. Cuando nosotros somos pequeños, nacemos ya con una programación.

Es como un software precargado de cómo se supone que debemos de vivir la vida, además de que en nuestros primeros años observamos cómo viven nuestros padres o nuestros cuidadores y entonces intentamos entender la vida como una persecución constante de objetivos porque parece que nunca es suficiente. Siempre tenemos que ir buscando más dinero, más comodidad, más satisfacción, más amor, más paz, más salud.

Entonces es como si nunca fuera suficiente lo que tenemos y siempre tenemos que ir buscando más.

¿Qué pasa? Que cuando yo me estoy poniendo objetivos constantemente, mi foco está en el futuro. Entonces es como si ahora mismo desde donde tú estás intenta mirar lo más lejos posible. Entonces es como si tu foco estuviera allá, no aquí en tu entorno en donde estás aquí ahora, sino allá en el horizonte donde quiero estar. ¿Qué pasa? Que de aquí a donde llega mi mirada hay todo un camino, ¿no? Todo un camino que no soy capaz de vislumbrar porque no sé exactamente qué hay de aquí a donde yo quiero llegar y eso se llama vida.

Entonces, ¿qué pasa? Que si yo estoy con mi foco mentalmente y toda mi energía está en el objetivo, me estoy perdiendo de lo que estoy haciendo ahora y cuando llego al objetivo o cuando no llego al objetivo, ahí es donde entra o la continua perfección o la continua frustración de pensar y de creer que no soy suficiente porque nunca consigo lo que quiero.

Cuando yo me estoy poniendo objetivos, los objetivos generalmente son mentales y están condicionados a un ideal que yo creo que tiene que ser, más no necesariamente es la verdad. No sé si me explico. Es decir, yo me voy creando ideales en el mundo y esos ideales generalmente son bastante rígidos en el sentido de que no estoy abriéndome a las infinitas posibilidades de todo lo que puede pasar de aquí al objetivo o de aquí a lo que me está motivando a llegar allí.

Entonces, te quiero dar hoy tres claves para poder soltar el objetivo y poderte sumergir en el proceso de la vida y de esta manera vas a poder encontrar mucho mucho más tranquilidad, mucha más satisfacción y también vas a sorprenderte de la gran persona que ya eres y te vas a sorprender de todo lo que ya tienes y entonces poco a poco tu mente va a ir soltando esos ideales de lo que deberías de ser o que deberías de hacer porque ya lo estás haciendo y muy curiosamente cuando nos damos cuenta de que en la vida realmente ya tenemos todo lo que necesitamos y ya somos todo lo que tenemos que ser, es como puedo respirar, puedo respirar y puedo soltar el mundo que me va persiguiendo ahí con un diálogo mental de todo lo que tengo que hacer, todo lo que debería de hacer, todo lo que no hago bien, todo más ya sabes ese diálogo como que es incensante y es bastante machacador. Así que toma una respiración profunda y una exhalación profunda y vamos con el punto número uno.

Cuando nosotros buscamos un objetivo que aparentemente puede ser algo del mundo exterior, que puede ser siempre este mundo exterior,