Ep_52: Rendirse, resistirse o responder ql6n

Hola, soy Mónica García, fundadora del Centro del Factor Humano y coach de liderazgo personal y profesional. Bienvenido o bienvenida al Quinto Elemento, el podcast de liderazgo que parte de la premisa de que hay un puesto de líder en tu vida que te corresponde por derecho de nacimiento y que solo tú decides quién ocupa.

Este podcast es para ti si quieres desarrollar la mentalidad y las habilidades necesarias para este puesto y hacerlo en mi compañía y en compañía de otros líderes.

En el episodio de esta semana quiero hablarte de tres de los modos en los que podemos reaccionar ante una situación que no es de nuestro agrado, que no es como queremos o incluso que va en contra de nuestros valores. Pero veremos que cada una de ellas tiene un impacto no solo en nosotros, sino también en lo que creamos y en lo que construimos con aquello que ponemos. Así que vamos a ello.

Y fíjate que he empezado con que cómo reaccionamos tiene un impacto. Bueno, pues esta es la clave del liderazgo. No solo el autoliderazgo, cómo me gestiono yo, sino que todo aquello que hacemos está influenciando, está creando las circunstancias que luego serán también las que nos vuelven a nosotros. Y empezar poniendo foco aquí me parece que es muy importante porque una y otra vez comparto contigo dónde está tu poder, en qué puedes influenciar, cómo puedes experimentar una circunstancia de una forma diferente, independientemente de la circunstancia.

Recuerda que tu experiencia de ella depende de tu respuesta o de aquello con lo que contribuyes. Pero es que resulta que tu respuesta o aquello con lo que contribuyes ahora es parte de la circunstancia que otros también están viviendo. Por eso es importante que en el liderazgo nos responsabilicemos de la parte que estamos poniendo nosotros y empezar a ver que todo aquello que experimentamos o que con lo que nos encontramos somos parte de ello. Lo influenciamos y lo estamos co-creando.

Si queremos cambiar algo, por lo tanto, una forma de cambiar es primero entrar en este estado de conciencia en el que recordamos que somos parte de ello y podemos influenciarlo. No controlar el resultado final, pero sí influenciarlo. Entonces, ¿cuáles son estas tres formas de responder? Mira a ver cuáles son las que son más comunes para ti o cuál te resulta más familiar, pero verás que puede ser que cualquiera de las tres sea una respuesta o sea una forma en la que tienes de reaccionar dependiendo también de la circunstancia o de la situación o del entorno en el que te encuentras.

Si es laboral, si es personal, ahí verás que podemos reaccionar de una forma en lo laboral y otra en lo personal. Pero volvemos, cuando algo no es como quiero, cuando algo no me gusta, va incluso en contra de mis valores, de mis principios, de quién yo soy. Bueno, pues la primera es rendirse. ¿A qué me refiero con ello? Yo veo que algo no es como quiero, me causa incluso sufrimiento, pruebo alguna cosa para ver si lo puedo cambiar o directamente digo esto es suficientemente grande como para que yo no lo pueda cambiar y me rindo.

Rendirse quiere decir que una de dos o me voy de allí y dejo de mirarlo, hago como que eso no existe o continúo yendo allí en un trabajo, puede ser que deje el trabajo o me rindo, esto no lo puedo cambiar, me voy a otra cosa o que continúe en ese trabajo pero sin decir nada, es decir aguantando. Cualquiera de estas dos soluciones, lo que hace la primera es ese sistema o esa situación va a seguir ocurriendo hasta que alguien haga algo diferente.

Pero si tú te vas y no haces nada diferente o si te quedas y no haces nada diferente, de alguna manera estás siendo cómplice de que eso continúe, el status quo continúe desde ahí. Si ahora dices ya bueno, pero si no depende de mí, si yo no puedo hacer nada, una de las cosas que siempre podemos hacer es verbalizar.

Verbalizar, oye, ¿soy yo la única persona que ve esto? ¿Soy la única persona a la que esto le sienta mal o ve que hay sufrimiento aquí, que hay dolor? Porque si soy la única persona entonces ya sé que tengo que ir para allá.