Donde la sangre es escasa, René Rebetez. Un cuento de vampiros 6k4x65

Y si les presenta historias para ser leídas un podcast de ciencia ficción terror y fantasía dirigido por olga paraíso ficciones sonoras con los que podrás sumergirse en otra realidad a donde la sangre es escasa un cuenta de vampiros tiernos rené ribetes lo espero sentada en el borde de la fuente de netzahualcóyotl que adorna al parque de chapultepec en homenaje a los poetas navas indolente mente acordada en la pequeña muralla que rodea el agua de la fuente mirando el reflejo de sus catorce años en la superficie unida dejo los libros abandonados al son uno de ellos abierto exhibiendo impugnó ricamente un texto de historia del medio oriente su mano derecha palpó la rugosas superficie del muro tropezó con un terrón que dejó caer aplomo sobre esos ojos que la miraban desde el agua una espiral nació en su frente y se expandió haciendo hasta dar su rostro cuando el agua sea quieto otro rostro emergió aparejado con el suyo los ojos brillando como guía jarro sonrientes ella se dio la vuelta de espacio para verlo sintió el o de las manos en sus hombros y el agua título nuevamente estremecida parecemos saco nautas dijo el ella río y se sintió segura al recordar que ignacio era dos años menor que ella y el agua hacia quito nuevamente y con ella su piel que tenía esa premonitorias actitud de estremecer sea su o quiroz sobre sí misma y se colgó a su cuello el muchacho se dobló y resultó ser alto muy alto par sus doce años y ellas subió con él en vilo a las alturas dejando sus trenzas caer verticalmente y sus pies la evitando milagrosamente venezuela giraron como una onza sobre los grandes mosaicos un transeúnte hubiera creído ver una gigantesca libélula festejando su abandono de cris salida al cabo de un momento la simbiosis vertiginosa se deshizo y se fueron tomados de la mano por el sendero que conduce al gran tottenham que había regalado al parque del gobierno del canadá dos adolescentes que inspiran para no ir al colegio ella menuda y no tan frágil el la han vivido y anacrónico el cabello en sorteado de extienden bucles renacentista ocultando a su nuca la nariz aguileño hay una frente amplían en el rostro alargado que se abre para recibir esos ojos un unidos y brillantes como un par de arroz en la arena uno piensa en cely el lord byron tal vez o en algún personaje de dickens al mirarlo la boca es fina y casino sonríe afortunadamente porque al hacerlo hay algo en ella que produce náuseas porque es amplia vital esa sonrisa pero deja al descubierto una atenta dura demasiado blanca y la forma de esos dientes de mármol es como una sierra mejor que no se ría a duras penas que sonría sin entre abrir los labios solo formando en las mejillas ese par de hoyuelos cómicos tan viejos sólo tiene doce años se recuerda a sí misma y sigue tratando a su lado fácilmente la dama de catorce un poco risa es cierto el rostro pecoso y las trenzas doradas tejiendo una estela tras de sí ignacio la atrae como una bujía anémica hipnotizada una mariposa de colores agarrados gira en torno suyo a su centrino encanto ya sus movimientos verticales hasta caer en un beso para el cual debe quedarse en puntas de pie durante mucho tiempo para salir finalmente del encuentro con el rostro invado y los ojitos enturbia dos un testigo inesperado baja repentinamente de un árbol cercano un gato joven atigrado ignacio ágil mueve el prodigioso sincronismo de su cuerpo y lo atrapa en un santo amén el toma huya y ella se acerca diciéndole cosas en el idioma de los gatos y la calma haciéndole cariños con los dedos en la base del cráneo algo le a ignacio porque ría muy fuerte anunciando los filósofos dientes sillas y motivada mente le arrebata el gato y lo lanza al aire como una pelota un aullidos vienen crescendo desde el aire habrán dándose hasta tomar forma de gato gira