Devocional Cristiano para Menores-Adolescentes | HABLEMOS CLARO - La puerta de tu corazón | 2025-04-25 363v7

Imagen tan poderosa. Jesús no entra por la fuerza, no derriba puertas. Él toca suavemente y espera, espera que seas tú quien decida abrir la puerta. Él quiere entrar a tu vida, no como una visita, sino como alguien que se queda, que transforma y que ama sin condiciones. Con estas palabras en mente damos inicio a nuestro devocional para menores y adolescentes que el día de hoy 25 de abril lleva por título La puerta de tu corazón. Ha llegado el momento de buscar en nuestras biblias y guardar en nuestro corazón el versículo del día de hoy que lo podemos encontrar en Apocalipsis 320 y dice, mira que estoy a la puerta y llamo.

Si alguno oye mi voz y abre la puerta entraré, cenaré con él y él conmigo. Hace unos años en un vuelo hacia Alemania tuve el privilegio de conocer a dos personas increíbles, Laura y Carlos. En el silencio suspendido sobre las nubes compartieron historias que resonaron con la promesa de Apocalipsis 320 donde Jesús nos dice que está a la puerta y llama esperando que lo invitemos a nuestra vida. Laura me contó cómo se sintió perdida y sola, abrumada por las presiones de la escuela y las relaciones difíciles, pero un día en la quietud de su habitación sintió una presencia que calentó su alma, era Jesús parado en el umbral de su vida esperando ser acogido con un adelante.

Al invitarlo a entrar Laura entró en compañía y una paz que transformaron su soledad en un sentimiento de estar profundamente acompañada. Carlos por su parte había creído que tenía que cargar solo con el peso de sus problemas, pero descubrió el mensaje de Apocalipsis 320 y se dio cuenta de que Jesús estaba listo para caminar junto a él y llevar sus cargas. Al abrir la puerta de su corazón Carlos encontró con una paz y con una alegría que superaron todo lo que había conocido, una verdadera revolución en su manera de enfrentar la vida. Me contaron que la cena con Jesús simboliza algo mucho más grande que una simple comida, es la comunión más íntima, un compartir de vida, esperanzas y sueños.

Juan otro pasajero del vuelo se unió a nuestra conversación y compartió como al abrir su corazón había sentido un amor y consuelo que colmaban su ser, incluso en tiempos turbulentos en su familia. A bordo de aquel avión mientras compartíamos estas historias de fe me quedó claro que la invitación de Jesús es eterna y su presencia es una promesa constante de compañía y amor. Él está llamando a la puerta de nuestro corazón incluso mientras volamos hacia nuestros destinos. ¿Le abriremos? ¿Qué comunión maravillosa nos espera al aceptar su invitación y cenar con el Salvador del mundo? Ha llegado el momento de inclinar nuestro rostro para orar.

Te agradezco Dios por la promesa de que Jesús está a la puerta de mi corazón y quiere entrar en mi vida. Dame la sabiduría y el entendimiento para poder abrirle Señor porque yo sé que cuando abra Él estará ahí, a un lado de mi vida, en cada decisión que tome, en cada momento difícil, Él me acompañará y me ayudará a cargar con todos mis problemas. Todo esto te lo pido en tu precioso y dulce nombre. Amén. Hasta pronto, mis queridos chiquitines y adolescentes. Nos escuchamos mañana con una nueva historia. Estoy segura que nos ayudará a entender mejor cuál es el propósito de Dios para nuestra vida. Que tengas bonito día. Bendiciones.