Como la serpiente engaño con su astucia a Eva 2w3y3u

Vamos a buscar hoy la Biblia Segunda Corintios Segunda Corintios, capítulo dos, no Segunda Corintios, capítulo once, disculpe, Segunda Corintios, capítulo once, verso uno, así quince sería Segunda Corintios, capítulo once, verso uno, si yo leo.

Ojalá me toleraseis un poco de la locura.

Si toleranme.

Porque os sé lo consuelo de Dios, pues os he desposado con un solo marido para prepararos como una virgen pura a Cristo.

Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo.

Porque si viene alguno predicando a otro Jesús y que el que os hemos predicado o si recibís otro espíritu, el que habéis recibido o otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis.

Y pienso que en nada he sido inferior a aquellos grandes apóstoles.

Pues aunque sea tosco en la palabra, no lo soy en el conocimiento.

En todo y por todo os lo hemos demostrado.

Porque yo humillándome a mí mismo para que vosotros fuisteis enaltecidos por lo cuantos he predicado el evangelio de Dios de Evaldé.

He despojado a otras iglesias recibiendo sanario para serviros a vosotros.

Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, alguno fuiste carga.

Pues lo que lo que me faltaba lo suplieron los hermanos que vinieron de Mesopotamia, Meso, Macedonia y en todo me guardé y me guardaré de ceros gravoso por la verdad de Cristo que está en mí, que no se me impedirá esta mi gloria en las regiones de acá ya.

¿Por qué? Porque no os amo.

Dios lo sabe.

Más lo que hago lo haré aún para quitar la ocasión a aquellos que la desean a fin de que aquellos en que se glorían se han hallado semejantes a nosotros.

Porque estos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos que se disfrazan como apóstoles de Cristo.

Y no es maravilla, porque el mismo Satán se disfraza como ángel de luz.

Así que no os extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia, cuyo fin será comprometer sus obras.

Sí, hasta aquí leímos.

¿Me oye bien? ¿Sí? ¿Se oye bien? ¿Se entiende bien? Perfecto.

Sí.

Segunda Corintios, capítulo 11, verso 1, aquí se oye y leímos.

Esta parte está hablando algo muy importante.

Realmente nosotros ya sabemos, ¿verdad? ¿Por qué viene esta tragedia que pasa en el mundo? Hoy en día hay mucha gente sufriendo, ¿verdad?, por su resultado.

Resultado de la maldición que cayó en la tierra por causa del pecado.

¿Sí? Y como que en el principio, el diablo, ¿verdad?, el diablo es el que engañó a Eva, primero desde Adán, y los entregó total en la maldición por causa del pecado.

El pecado es la desobediencia de Adán y Eva, ¿verdad? Ya sujeto a Satán, uno, ya está separado de Dios, entregado en la tiniebla total, y ahí se pierde.