El Cineasta CARLOS POLO nos presenta el Corto KAMALI 5382l

Crónicas a pie de calle con María Jesús Romero de Ávila de Lara. Hola, qué tal, muy buenas amigas y amigos de Informa Radio, porque ya sabéis, tenemos que estar informadas e informados, por supuesto. Estamos aquí en este programa de Crónicas a pie de calle, programa de entrevistas que se emite los sábados de 8 a 9, ya sabéis que ahora tenemos también canal de televisión, así que saludos a los televidentes que nos veis desde por la mañana, tempranito a las 8, ahí están, muchas gracias, aquí en nuestro canal de YouTube, en Informa Radio, en el Dial104 y luego ya sabéis, si no da tiempo, los estupendos podcast que se pueden escuchar en iVoice, en Spotify y bueno, por supuesto, en YouTube queda también la grabación, que además hacen los compañeros, hacen unas maravillas, unas virguerías con las presentaciones, así que gracias.

Y por supuesto, siempre nuestro querido técnico David López, que está ahí al pie del cañón, gracias David y por supuesto nuestros oyentes y televidentes, siempre gracias por estar ahí, vernos y escucharnos. Pues hoy nos visita de nuevo, estuvo aquí hace año y medio más o menos, Carlos Polo, que es cineasta, experto en marketing, digital y mucho más, así que nada, bienvenido Carlos Polo, ¿qué tal? Muchas gracias, muy bien, gracias por volver y me invitar a otra vez, estoy estupendo aquí.

Me alegro, bueno, bueno y nos encanta traer gente del cine aquí, no viene mucha, pero bueno, de vez en cuando viene alguien. Bueno, no pasa nada, pues yo vengo las veces que no, eso es que tengo cosas que mostrar. Eso está muy bien. Bueno, estuviste el año pasado, o hace ya un poquito más, con Jaime Arnaiz, con el productor, para presentar el cortometraje El babero de Picasso, ¿qué tal? Bueno, una buena obra, muy chula, que os quedó muy bien.

Bien, la verdad es que quedé muy contenta porque afinamos muchísimo y conseguimos el carácter que buscábamos, que era revivir aquella época y aquel personaje, y sobre todo la experiencia de trabajar con Jaime Arnaiz, de dejar producciones, que la verdad es que desde entonces pues es como que nos hemos hecho muy amiguetes y la verdad es que no me coge mucho el teléfono porque cuando le llamo sabe que le voy a pedir, bueno, o embarronarle de alguna manera, pero quedamos muy contentos con el resultado. Pues ya está, eso es lo importante.

¿Y tú qué tal estás ahora mismo, Carlos? Bien, bien. Que decías que has cumplido 50 tacos, ¿no? Bueno, estás en lo mejor de la vida. Sí, le he dado la vuelta al jamón, ¿no? Sí, como dicen, pero bien. No, bien, o sea, a nivel es un poco, vas cumpliendo etapas y pues te dan tus bajones porque ves 50 en el DNI y dices, Dios mío, ¿qué es esto? Pero bueno, no te queda otra.

Y bien, porque el año pasado, aparte de los rodajes y tal, pues fue una época un poco complicada a nivel laboral porque fueron unos tiempos reguleros, pero la verdad es que gracias a la empresa en la que trabajo y que llevo ya un año trabajando con ellos prácticamente, pues este año estoy mucho más tranquilo, más relajado. Qué bien. Se duerme bien cuando sabes que tienes sueldo a fin de mes. Que tienes un trabajo que te gusta además, ¿no? Sí, la verdad es que... Estás en marketing, audiovisual...

Sí, sí. Bueno, mi trabajo es... Roza casi el trabajo ideal para mí, que viene a ser rodar, rodar y luego estar relacionado con todo el tema de la innovación tecnológica en el mundo audiovisual. Y luego, aparte, aprender un montón porque también me toca montar, también me toca hacer dirección de producción, buscar equipos. Está muy bien.

Totalmente relacionado con lo que a ti te gusta. Absolutamente. Y además, no es por nada, pero mis jefes se portan muy bien. No me están escuchando, seguro, porque son Estados Unidos, entonces no creo que esté despierto. Pero estoy muy, muy contento. Muy contento. Eso está fenomenal. ¿Y tú qué querías ser de mayor cuando eras pequeñito, por cierto? Bueno, yo hice...

Lo primero que intenté fue entrar como piloto, piloto del ejército. Anda. Sí. Porque a mí me gusta siempre ser piloto, lo que pasa es que en mi casa no hay dinero para ser piloto comercial, que en aquella época costaba. Y como no hubo suerte, porque había que hacer una especie de oposiciones y era muy complicado y tal, pues al final decidí estudiar la primera carrera que se me puso por delante, que fue farmacia. ¿Farmacia? Bueno.

No tiene nada que ver, ya lo sé. Sí, pero bueno, oye, está bien. Sí, pero que, a ver, cuando eres joven eres muy veleta, o estás bien enfocado, o puedes tomar decisiones que a lo mejor... Pero bueno, después de eso, yo ya sabía que no me iba a dedicar al mundo de la farmacia. Tengo un mogollón de amigos farmacéuticos.

¿Nunca te has dedicado? No, no, no. O sea, primero ya tenía serias dudas de que iba a dedicarme a la farmacia.

Pero siempre he estado por otro lado, con el tema de los ordenadores por detrás, y bueno,