Aranceles de Trump a la UE: Impacto y Retos para la Industria del Vino 4852c

CURSO DE VINOS EN LA CARA B DE VINO PARA CAMALEONES
Leon, ¿cómo estás? Oye, mil gracias por pertenecer a la familia más chula del mundo del vino.
Hoy un curso de vinos en esta cara B, un tanto peculiar, porque va más ligado a la actualidad.
Ahora que tenemos un presidente naranja por ahí pululando y haciendo de las suyas.
Un tío realmente impredecible, o sea, puede levantarse una mañana y cambiar las reglas del mundo.
Así que nosotros hablaremos de eso, porque cuando queremos conocer el mundo del vino
también tenemos que saber un poquito de economía, un poquito solamente, para estar atentos a lo que está ocurriendo en el mundo
y cómo afectaría a la industria del vino, que por supuesto sería en nuestro país, en España,
una de las más perjudicadas por esa guerra de aranceles que puede pasar.
Yo no digo que vaya a pasar, pero parece ser que va a pasar. Así que hablaremos un poquito de esto, Camaleón.
¿De qué comenzamos? ¡Venga! ¡Tequila! ¡Tequila!
Vale, Camaleón, pues vamos a comenzar por el principio de los principios.
¿Qué es un arancel? Bien, un arancel es un impuesto a la importación. Punto.
Puede ser un impuesto directamente a la importación de todo un país o de toda la Unión Europea
o de un país en concreto, o puede ser un impuesto a un tipo de producto concreto,
pero al final es un impuesto a la importación. Y esto es muy importante, porque tú imagínate
que eres un exportador de vinos de Rioja y que parte de tu producción va vendida a Estados Unidos.
Pues cuando llega el producto allí, el gobierno de Estados Unidos te dice
pues ahora si quieres vender este producto aquí, tienes que pagar un arancel, pero no se lo dice la bodega.
El que paga el arancel, es decir, el impuesto, es el consumidor americano, es la empresa americana.
O sea, es como un peaje, iba a decir una multa, pero más o menos, ¿no?
Es un peaje que le pone a esa empresa americana, pues en lugar de comprar vino en Chile,
pues lo estás comprando en la Unión Europea y por lo tanto aquí tenemos un acuerdo
que el 20%, por ejemplo, es un arancel. Entonces estás encareciendo el producto.
¿Pero quién lo paga? Repito, ¿la Unión Europea? No.
Si el arancel está impuesto de Estados Unidos a los productos de la Unión Europea,
que es como lo que pretende hacer Donald Trump, lo pagan los americanos.
Entonces tú me dirás, Farán, ¿y por qué se tienen que liar estos a poner aranceles
si al final lo van a pagar ellos?
Bueno, pues normalmente un gobierno pone aranceles con la intención de proteger,
en principio, a las industrias locales de la competencia extranjera.
Aquello del lema este que tenía Donald Trump en su campaña de
Make America Great Again, me parece, algo así era.
Pues claro, su idea es que, claro, como China les está comiendo territorio
para ser la gran potencia mundial, pues él tiene esta visión romántica
de que quiere que otra vez Estados Unidos lidere el mundo de esta manera,
económicamente y sobre todo a nivel empresarial.
Y entonces lo que en teoría pretende, o pretende alguien que impone aranceles,
es proteger a tu industria local. Fíjate, ¿eh?
Proteger a tu industria local haciéndoles pagar a ellos. Es una barbaridad, ¿no?
Por ejemplo, según él, y hablando en términos de vino,
protegerías o defenderías a los viticultores y a los bodegueros de California
de los vinos europeos, ¿vale?
Porque, claro, los vinos europeos dejarían de ser competitivos,
o serían menos competitivos, y por lo tanto el consumidor americano
al elegir un vino tiene dos opciones.
Si quiere comprar un vino europeo y hay un arancel,
el vino estará más caro hoy que ayer y tiene dos opciones.
Pues o lo compra o no lo compra. No tiene ninguna otra opción más, ¿no?
Entonces, si lo compra, pues tendrá que pagar más.
Lo que pasa es que eso también tiene una consecuencia.
Y si no lo compra, pues se puede decir, bueno, pues compraré vino de California.