44. Corselli en la Real Capilla 6031t

Todos sabemos que la fama y el prestigio va y viene, que el tiempo no siempre es justo con los esfuerzos de los grandes artistas.

Sin embargo, hay que agradecerle a la musicología y al esfuerzo de algunos intérpretes que se empeñan en rescatar los tesoros del pasado, que hoy los podamos disfrutar y, por qué no, devolverle la gloria a aquellos compositores que desde aquellos tiempos nos saludan agradecidos porque sus obras vuelvan a sonar.

Este es el caso del maestro que os traigo hoy, hasta hace poco todo un desconocido para la sociedad, uno de los grandes olvidados, Francisco Corselli.

Pero vamos, no anticipo más que el programa viene cargadito y hay ganas de desarrollarlo.

Venga, a la va, subiros que la nave que os va a llevar a la música del siglo XVIII está a punto de despegar.

Sujetaros bien que arrancamos motores en 3, 2, 1… Hola a todos mis queridos escuchas, bienvenidos, bienvenidas a este nuevo programa almorhispano, un episodio que nos ha llevado al siglo XVIII, eh, ya veis, hoy me pongo en plan moderno.

Nos vamos a un tiempo y a un lugar muy concreto, la Real Capilla de Madrid en la época en la que Francisco Corselli trabajó como maestro.

Un tiempo apasionante en el que la música ya había tomado otros derroteros, donde instrumentos como el violín se habían hecho un hueco con un lenguaje propio y donde los músicos italianos traídos por los borbones trabajaban codo con codo o codo contra codo con algunos genios nacionales como José de Nebra o Antonio Soler.

Es por ello que he introducido este cuadragésimo cuarto programa con una pieza instrumental, la sonata para violín y bajo en re menor de Francisco Corselli interpretada por el grupo Música Voscarecchia dirigidos por Antoni Mercero.

Y como sabéis que siempre me gusta documentar muy bien mis programas, el de hoy no va a ser menos y para hablaros de Corselli, la Real Capilla, quién mejor, quién mejor que mi buen amigo y codirector de tesis, Paulino Capdepont Verdú.

Hoy os hablaré de todo lo desarrollado en su artículo La Real Capilla de Madrid durante el magisterio del compositor italiano sco Corselli 1705-1778, vamos, una manera genial de conocer a este italiano que se vino a hacer las Españas y que acabó sustituyendo como maestro a otro grande del que muchas veces os he hablado, José de Torres.

Pero antes que nada y para que os hagáis una idea de la magnitud del lugar y del autor y de la influencia que ejerció sobre la música española gracias al peso de su obra y prestigio, lo suyo es que contextualicemos aquí el momento para que podamos comprender bien el entorno en el que sonó la música de sco o Francisco Corselli, a ella con su nombre españolizado.

Lo primero es hablar de La Real Capilla, una institución que se mantuvo en pie hasta la segunda república y que era de lo más atractiva para los profesionales del mundo musical por las ventajas y prestigio que suponía el trabajar para la monarquía, además de ser un entorno que propiciaba otro tipo de oportunidades como los encargos para otras instituciones religiosas o del ámbito teatral, hacer bolos fuera del ambiente de la corte e incluso acceder a puestos de profesor para personas ilustres.

A La Real Capilla le correspondía el hacer la música para solemnizar los oficios que se ofrecían en palacio para la familia real, además de ser un elemento primordial de la proyección pública de la monarquía.

Por extensión, también se le amaba así al organismo eclesiástico donde se realizaban los ensayos y funciones musicales y, como no, al grupo de cantores e instrumentistas contratados.

A este penúltimo punto, el del lugar de trabajo, hoy pensemos en…