2025_12 | Miedo a elegir a la persona incorrecta 5u5z4b

Aprender de los errores es fundamental, pero cuando se tiene la sensación de que siempre nos equivocamos de la misma manera, podemos tener ese miedo a que no sea la persona correcta.

Cómo saber, cómo tener la certeza de que es la persona correcta. Pero esto ya a mí me suena a ansiedad, tener que estar asegurándonos todos los días de que es la persona correcta, la persona correcta no será.

Con Juan José Candón hablamos del amor.

Estamos en el AGL de París, en Madrid, en calle Velázquez 11 y estamos con Juan Pedro Tudela. Muy buenas, Juan Pedro.

El primero, qué vergüenza.

El primero y qué responsabilidad. Hoy compartes micro por un problemilla técnico que hemos tenido.

Estoy encantado.

Micro con Alejandra, por favor.

Nunca voy a estar tan cerca de ella como hoy.

Eso nunca se sabe, no digas nunca.

Alejandra, Alejandra Frade.

¿Qué tal? Buenas tardes.

Gracias por estar con nosotros.

Gracias a vosotros.

Alejandra es productora, es, lo fuiste, productora audiovisual. ¿Sigues haciendo algo? ¿No? ¿Forma parte de tu pasado? ¿Quizá en el futuro? Dicen que los productores son productores para toda la vida.

Entonces nunca se sabe.

De momento no estoy produciendo nada, pero bueno, ¿quién sabe? Bueno, nunca se sabe.

Eso es lo interesante de la vida.

Ese suspense.

El otro día hablaba Francisco Javier de suspense.

Mira, tenemos a Olga López de la agencia Unicis, la agencia matrimonial Unicis en Madrid.

Muy buenas, Olga.

Hola, buenas tardes.

Encantada de estar aquí.

Buenas tardes.

Bueno, pues hoy hablamos de un tema también complicado, pero es que queremos seguir conociendo más en profundidad esto del amor de pareja.

Tenemos hoy, bueno, en Cádiz, no, creo que en Extremadura, a Beatriz Pérez, que es extremeña como Javier.

¿Ah, sí? Bueno, bueno.

Sí, Beatriz Pérez, socióloga, poeta, profesora de la Universidad de Cádiz.

Beatriz, muy buenas.

Hola, buenas tardes.

Muy buenas.

¿De dónde eres, Beatriz? Sí, mira, yo soy de Plasencia y me he venido al valle a ver florecer el cerezo.

¡Oh! Bueno, yo soy de Cáceres, pero mira, somos aquí cacereños los dos.

Sí, estamos al lado.

Bueno, a ver, yo llevo ya más de la mitad de mi vida aquí en Madrid, pero bueno, por eso soy extremeño.

Oye, que Beatriz estudió en Madrid, ¿no es así? Estudiaste aquí, ¿no, Beatriz? Sí, sí, en Madrid, en la Complutense.

Entonces, cuando se estudiaba Sociología en los años ochenta, pues había, solo había ese sitio para estudiar.

Me parece que en el país casco había algún curso, no sé.

Pero la carrera entera solo estaba en Madrid, en los ochenta.

Perdonad, como profesional del turismo tengo que meter esta cuña aquí, que es que habéis nombrado ayer el Jertes, que lo ha dicho un poco Javier, que tú no lo has nombrado, el Valle del Jertes, que es maravilloso, y Cáceres, que es de las ciudades más bellas de España, y quizá de las más desconocidas.

Pero ahora ya tenéis sabe, a partir de la semana pasada, han probado ayer el tren a trescientos diez kilómetros por hora.

Entre poco lo tendréis en la realidad.

¡Qué bien! Bueno, bueno, bueno, gracias.

Que se sepa esto, que por fin Extremadura ha dejado de estar aislada, y que merece la pena Cáceres y el Valle del Jertes.

Hecho el apunte de turismo, ahí está.

Habrá que comprar rápidamente antes de que suden los precios.

A ver, bien, pues empezamos, entramos ya en materia.

Muy buena noticia, por cierto.

Juan Pedro Tudela, empresario especializado en el mundo del turismo.

Bueno, pues aquí estamos, como siempre, muy bien rodeados en un lugar maravilloso.

A ver si podemos silenciar ese móvil para que la gente no se confunde, no crea que es el suyo y que esté centrado en lo que estamos haciendo.

Bueno, pues esa sensación, la sensación de que a lo mejor no estamos con la persona correcta.

En el momento en que haya algún tipo de roce, que siempre lo va a haber.

Bueno, cuando esto ocurre, Javier, y ocurre, tú lo cuentas en tu libro, el otro día hablamos de tu libro, El Código del Amor Radiante, esta especie de prevención, de sospecha y de búsqueda incluso de señales.

Las haya o no, para decir, no, no es la persona correcta.

Cuando ocurre esto, ¿qué pasa? Pues yo es que creo que hay que agachar un poco la cabeza y decir, sí, es la persona correcta.

El hecho de que nos cause malestar o sufrimiento no quiere decir que no sea la correcta.

El amor es la persona correcta.