156 | Cosas que bookstagram ha normalizado y no son normales 5l5b1m

Bienvenidos y bienvenidas a ¿Qué libro? Mi nombre es Elena Chorén, soy periodista y una lectora voraz. En este podcast te traigo recomendaciones literarias para todos los mortales, reseñas de libros y temas relacionados con la adaptación de la literatura a la era digital.

Esto no es normal. Seguro que más de una ocasión has pensado esto mientras estabas echando un vistazo a Instagram, en concreto a Bookstagram, que nos gusta mucho esto de los nombres en inglés para llamar las cosas, pero esto viene a ser la parte de la comunidad de Instagram que habla de libros, los reseña y o los recomienda. Y en más de una ocasión, creo que todos podemos decir que nos hemos sentido abrumados al ver a la gente que lee más libros que días tiene el mes, que muestra montones de libros nuevos comprados o recibidos por parte de las editoriales, que reseña sin descanso y a veces sin criterio.

De todo esto hablamos en el episodio de esta semana. Es un canto a racionalizar un poquito este asunto, a visibilizar la importancia de practicar el slow reading, otra vez en inglés pero dicho en español, leer lo que te apetezca y a tu ritmo, sin postureo ni tendencias virales. Todo un reto y todo un tema. Bienvenidos, bienvenidas y comenzamos. Los datos sobre cuánto leemos los españoles hablan por sí solos. Por primera vez, el porcentaje de población que lee libros en su tiempo libre supera el 65% de la población.

Esto es una tendencia que está en alza desde 2017, son datos del Ministerio de Cultura de España. Por destacar, otro aspecto más interesante es que ya rompemos ese falso mito que persiste en nuestra sociedad sobre que los jóvenes no leen. Son datos del barómetro y dicen que por edades la población entre 15 y 24 años es la más lectora de nuestro país. Son buenas noticias y estoy segura que comunidades literarias en Instagram, TikTok o YouTube han contribuido a esto.

Así que empiezo este episodio celebrando esta parte y ole por las redes sociales, por fomentar la lectura y en esta idea baso todo mi trabajo en el podcast y todo mi trabajo en redes sociales. Pero me entenderéis si os digo que el ser humano es tan capaz de crear cosas bonitas como de corromperlas. Y una comunidad de personas lectoras que empezó a hablar de libros en redes y que buscaba en esas redes a otras personas afines, ha terminado por alejarse muchas veces de su esencia, de esa idea que tuvieron de compartir una foto de lo que estaban leyendo y poco a poco crear un ecosistema en torno a eso.

Y en esta corrosión del mensaje nos centramos hoy para que todos reflexionemos sobre este asunto y reflexionemos como creadores y también como espectadores. Pero yo quiero que este espacio también sea un momento de reírse de uno mismo y pasar un buen rato. No vengo a dar lecciones, sino a compartir reflexiones. Me ha salido un pareado y todo y además no vengo sola porque ya sabéis que me gusta siempre dar voz a otras personas que tienen algo que decir sobre el asunto que trato.

Cosas que Bookstagram ha normalizado y no son normales. Así titulé en Instagram un vídeo que habéis comentado muchísimo, que ha generado mucho debate y a mí me gusta muchísimo hacer podcast de aquello que genera interés. Así que aquí estoy para poder extenderme más sobre este asunto, analizarlo y por supuesto a contar con otras personas, otras experiencias.

Y empiezo escribiendo en este folio en blanco, recibir libros cada semana no es normal.

Hay muchas personas que lo reciben, claro que sí, y no pasa nada. El problema es que el compromiso que tienen esas personas de mostrarlo en redes sociales, porque así lo han acordado con el autor, con la editorial, con la persona que se lo haya enviado, pues hace que muchas otras personas, en este caso los espectadores de ese contenido, puedan llegar a frustrarse porque también quieren tener todos esos libros y no pueden.

Esto no es algo nuevo y no es algo que sólo pase en el ámbito literario. Vivimos en una sociedad consumista. Esto es consumismo puro y duro, pero segmentado al máximo dentro de una comunidad literaria que habla de libros. Y creo que no es nada nuevo bajo el sol, pero que sí que va muy ligado a aquellos famosos unboxings que empezaron en YouTube, sobre todo.