Wollstonecraft. El principio siempre es hoy. Presentación con Ricard Ruiz Garzón 5k1a20

Bienvenida, bienvenido a mi pequeña librería.

Aquí podrás encontrar entrevistas, presentaciones de libros y diálogos literarios.

Todo ello sin mirar ni al reloj ni al calendario.

Porque las mejores entrevistas ocurren sin prisa y los mejores libros no tienen fecha de caducidad.

Pasa, entra, al fondo hay sitio.

Allí siempre ocurre lo mejor y lo más interesante.

Al fondo de la librería.

Buenos días y bienvenidas, bienvenidos a esta pequeña librería.

Hoy en horario nocturno, como suele ser común aquí, pero con una razón muy importante porque tengo a un escritor que me hacía muchísima ilusión presentar.

Luego hablaremos también, no solamente por el autor, sino por la obra en sí.

Muy buenas, Rekard.

Muy buenas, feliz de estar contigo.

Ya sabes que más allá de que sea con pantalla o sin, es una de las personas con las que siempre me va a apetecer conversar, o sea que encantado.

Me alegro muchísimo.

Vamos a hablar de tu última novela, de Wolfenstein Craft, El principio siempre es hoy.

Pero antes, yo siempre suelo empezar con un pequeño juego para que vayamos entrando en la novela.

Y es que hay un personaje, lógicamente, que es muy importante en esta, que es Marguerite, que es la mujer que cuenta la historia.

Bueno, luego hablaremos que no es tan sencillo el explicar cómo es el libro porque es como una especie de matriusca en la que una historia está dentro de otra y luego dentro de otra.

Pero sí que la gran mayoría conocemos a través de los ojos de Marguerite.

Y la pregunta es esa.

¿Qué crees que diría de ti Marguerite? Pues yo creo que precisamente Marguerite, que nunca tuvo voz en la historia, que no es nada más que un apunte, una línea en algún libro de biografías de la propia Mary Wollstonecraft, se reiría un poco de este juego de que ella sea la que narre, pero en realidad no del todo, pero en realidad todavía menos porque soy yo quien la utilizo para hablar.

Y estas diferentes capas de quién cuenta la historia y quién es utilizado en el buen sentido creativo para explicar la historia, pues creo que igual le pondría alguna observación.

Y la segunda cosa es que me diría, tú sabes que te has inventado toda mi vida y como soy, porque claro, es una línea.

La pobre mujer es una línea.

Entonces ahí sí que debo decir que así como con Wollstonecraft he sido muy fiel a muchos hechos, al calendario, al mapa y a la personalidad, en Marguerite me lo he inventado prácticamente todo.

Con lo cual no sé si habré acertado, ella me lo tendría que decir.

Si he acertado en algo, en un poquito, espero que al menos en el espíritu sí.

A ver, hay que decir, luego hablaremos de la novela, pero es verdad que Marguerite se come la novela sobre todo en ese punto en el que te das cuenta como una mujer tan frágil al principio, ves viendo cómo va creciendo como personaje y cómo al final saca desde esos inicios en un ático encerrada a todo lo que hace al final, la evolución que tiene es alucinante, sobre todo teniendo en cuenta que es casi una niña, que es una adolescente.

Entonces también hay que ponerle ese tipo de contextos, porque claro, muchas veces cuando leemos personajes, hay muchas veces que le ponemos el físico que nos semejamos a nosotros, pero en realidad ella es casi una niña, además que ha sufrido muchísimo, que ha tenido una vida muy dura en esos poquitos años que lleva vida y de repente el mundo se le pone patas arriba. Pero bueno, hablaremos de ella un poquito más tarde, pero antes quiero hablar un poco de ti, porque Ricard, últimamente mucha gente te une al Festival 42, yo creo que eso es obvio.

Algún día nos explicarás cómo tienes ese giratimbo para poder estar con todas las presentaciones, con todos los personajes y con toda la gente que viene y todo eso Pero también, como autor, yo te conocí con Esquizo, una novela muy potente sobre la esquizofrenia. Luego también tienes, entre otras muchas, tienes por ejemplo La Inmortal, que es el premio EDB. Y luego, entre los ensayos, que por favor las editoriales que usan, quiero que sean castellano también ese ensayo, porque no lo he podido encontrar, es Mary Shelley y el monstruo de Frankenstein, que lo publicaste en 2018.