La vida despues de la Trombosis 6d7255

Las opiniones vertidas en este programa son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan el pensamiento ni la ley.

Hola, soy Vivian Gregory. Hoy tengo para ti información valiosa con el deseo y la intención de enriquecer tu vida. Hablaremos de temas que te inspiren a mejorar en todas las áreas de tu existir. Salud, amor, dinero, tiempo, desarrollo personal. Tal vez hoy escuches algo que te haga reflexionar y que al hacer lo tuyo y ponerlo en práctica, te lleve a vivir tu vida a tu manera. Comenzamos.

Hola, buenos días. Hoy te tengo un programa que te va a encantar y te va a sorprender mucho. Mi invitada, a quien ahorita te presento, es una persona a quien yo conozco desde hace muchos años y siempre la he visto, pues, normal. Sin embargo, hace un par de meses escuché que comentó que ella había tenido una embolia. Es una persona a quien no le notas absolutamente nada y yo le dije, oye, yo tengo que saber qué hiciste, esto es maravilloso. Y de eso vamos a platicar porque estoy segura de que te va a interesar.

Mi invitada el día de hoy es Hilda González y ella y yo nos conocimos en la comunidad empresarial a la que ambas pertenecemos y hemos hecho una buena amistad. Hilda, muchas gracias por estar con nosotros. Bienvenida y pláticanos un poco acerca de ti. Pero yo te voy a pedir algo. Para que sepamos exactamente de qué estamos hablando, a grandes rasgos, por favor explícanos qué es una embolia. Claro que sí. Pues, muchas gracias por la invitación. Estoy muy contenta de estar aquí. Y, pues, en el momento que yo tuve el problema, me enteré exactamente de qué cosa es eso de una embolia.

Es la obstrucción de uno de las arterias de algún tipo de vaso. Puede ser muy pequeño, puede ser grande. El problema es que se tapa y entonces ya no permite la irrigación del músculo. El músculo ya pierde movimiento, pierde vida y ese es el problema. ¿Por qué se tapa? Esa sería una pregunta que yo preguntaba con el médico. ¿Qué es lo que sucede? Y me decía, puede ser estrés, puede ser un hábito fuerte, a lo mejor de problema de colesterol, puede ser grasa. El problema es que se da y es muy silencioso. No se da una cuenta qué es lo que está sucediendo.

Se va dando cuenta uno al día al día cuando el médico le dice, ¿qué desató esto? ¿Qué fue lo que te desató esto? Y yo me preguntaba en ese momento, pues, si fue un problema de estrés. En ese momento tuve, pues, me quisieron asaltar. No, no llegó al asalto, pero esto me provocó una impresión, una emoción demasiado fuerte que no supe controlar en ese momento y esto fue lo que me llevó al problema de la embolia. ¿Y dónde fue la embolia? El problema fue, en ese momento yo llegué y me di cuenta que me pasé un día sin hablar. Y casi tengo borrados los momentos de ese día. Esto fue un domingo en la madrugada y todo el domingo no recuerdo.

Tampoco recuerdo cómo llegué a mi trabajo. Llegué manejando. Llegué a mi trabajo manejando y de todas maneras no sabía yo qué había pasado. Empecé a sentir un dolor muy fuerte detrás de la oreja y ese dolor, pues, sí me dio pendiente porque pensé que podía ser paperas. Y nunca tenía paperas, pero sabía que eso podía ser un síntoma. Y entonces yo dije, yo no quiero paperas.

Y me tuve que salir de mi trabajo. Me fui a casa y mi esposo me apoyó. Me llevó al doctor y el doctor me dijo, se está desarrollando una embolia. Entonces, pues, no se preocupe. Esto es lo que le va a pasar, ¿no? Este, en ese momento todavía no tenía declarada la parálisis facial tan fuerte y en cuestión de unas horas se me quedé ya con un, se me fue mi boca de lado, mi ojo quedó completamente abierto y empecé a sentir paulatinamente como perdía movilidad en el brazo derecho y en la pierna derecha. Y ya fue cuando en el Issste, pues, me asistieron. Yo tenía Issste, soy maestra. En el Issste me dijo el médico, pues, mire lo que va a pasar.