Tipos Oscuros 356 - Presencias inquietantes 271o1l

¡Tipos! Saludos, amigos y amigas y amigues reptilianos, todos y todas y bienvenidos una semana más a este podcast que por tercera vez en una mañana reiniciamos.

Ya no voy a hacer casi ni presentaciones.

Llevamos una hora y media que no se sabe de lo que hemos hablado con un problema técnico que tampoco voy a explicar.

No lo voy a ni explicar. Da igual, sí.

Da todo igual. Teníamos tres películas, ¿no? Como siempre, todas las semanas.

Un borracho dando palmas, una espiva que no sé qué, el otro con el perro y el vecindario.

Venga, películas de terror.

Era tu medalla de plata, me decías hace una hora.

No, de bronce, de bronce. No sé ni lo que digo yo.

Era mi bronce. Era tu bronce.

Estábamos con cine de terror, ¿verdad? Eso, de presencias, de presencias como la de Escobedo.

Bien, ahí está, ahí está.

No sabíamos si estaba o no estaba.

Sí, sí, sí.

Es que tenías tu puesto en off.

Ah, mira, clave eso.

Ahora se me oye mejor.

Por Dios, esa pregunta no la quiero escuchar en lo que queda de mañana.

Creo que la explicación sobra. No hace falta.

Pero, bueno, teníamos tres películas de terror, técnicamente diferentes tipos de terror y, en un momento dado, más concretamente, sobre presencias.

Quizá la que yo he puesto en el bronce, que no sé si es vuestro bronce, el vecindario.

Sí.

Sí, Escobedo, sí. Bien, bien, bien.

Vamos por buen camino.

O sea, la que, a priori, es menos sobre presencias, porque es un poco tramposilla, es un poco engañosa, porque la película de David Marmore, su única película ópera prima, y es también guión suyo, nos cuenta la historia de una chica que llega a Los Ángeles y que, de repente, está intentando hacer su vida, perseguir sus sueños de ser, creo que, costurera o algo así.

Maestro de la costura, sí.

Claro, el tiempo entre costuras, como de vestuario, entiendo, para Hollywood o algo así.

No sé, tiene una puta máquina de coser.

Pues, está buscando piso, mientras que sus padres, o su padre, en este caso, le dice, ay, hija, vuelve a casa, de verdad, no te metas en esos jardines que tal, no sé qué.

Y a esto que se va a una jornada de puertas abiertas en un condominio ahí, en un bloquecillo de vecinos y tal, para que vea la gente un poco cómo funciona esa comunidad, cómo son los pisos, todo el rollo, y la chica va allí muy insegura, no, ay, a ver si tengo suerte, tal.

Conoce a un chico que le pone fácil las cosas, esto y lo otro, y de repente le dicen, oye, eres una persona ideal para esta comunidad, vente a vivir con nosotros.

Entonces, contábamos que, bueno, ha contado González, que la descubrió en un ciclo del matadero, cuando él iba a ver un documental, ya contó yo por ti la anécdota.

Sí, sí, dale caña.

Y que le sorprendió precisamente, porque, o sea, no verla ahí, sino como descubrirla ahí, como que estaba programada para esto, y digo, es que esto me parece bastante importante, le he dicho, joder, siendo en el matadero de aquí de Madrid, a lo mejor era un ciclo sobre la vivienda, porque literalmente es como, tal y como está el tema de los alquileres y yo no te digo las compras, en esta película te plantea esta chica que no tiene donde caerse muerta, que está prácticamente sin un clavo, trabajando en una empresa casi de teleoperadora o algo así, para sacarse unas perras, y de repente tienes que pasar prácticamente un examen para que te cojan en una comunidad de vecinos, para ver qué tal si tu perfil encaja con el resto.

Entonces, a partir de aquí la película avanza y ella por la noche empieza a escuchar ruidos, y entonces es cuando dices, ah, va a ser una película de terror, no lo parecía en un principio, además este terror independiente que hemos comentado en una de nuestras siete grabaciones anteriores a esta...

De hoy, de una de las siete anteriores de hoy, se oyen ruidos, tío.

Han pasado muchas cosas hoy ya.

O sea que digo que en la peli se oyen ruidos como los...

Ahora encima me estoy oyendo con eco, tío.

Bueno...

Ya ahí sí que no podemos hacer nada, ¿sabes? Por favor, avancemos.

Que si no, ¿sabes? Llevamos hora y pico aquí, ¿sabes?, con esta movida.

Sea como sea.