T,5 E.32 03/04/2025 El veneno era la cura 6f4p3o

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En 1874 Charles Romley Alder Wright aisló un nuevo peacio gracias a la acetilación del clorhidrato de morfina, obteniendo diacetilmorfina, pero pasaron 23 años hasta que volvió a ser sintetizada por otro equipo, Felix Hoffmann, que trabajaba en la farmacéutica Bayer en Wuppertal Alemania, tratando de producir codeína, un constituyente de la dormidera y similar a la morfina. Pero en lugar de esto se produjo una morfina acetilada entre un 50% y un 100% más potente que la morfina, dándole el nombre de heroína, comenzando su fabricación industrial y su comercialización.

En un primer momento, entre 1898 y 1910, se la comercializó como un sedante para la tos y como un sustituto para la morfina, pensando que era menos adictiva, pues se creía que producía menos euforia y desviaciones mínimas en el comportamiento y la inteligencia.

Más tarde se descubrió que la heroína se transforma en una morfina al ser absorbida por el hígado, teniendo una gran acción adictiva, mucho más intensa que la que tenía la morfina sola. Luego de darse cuenta que muchos pacientes que la habían usado durante largos periodos de tiempo desarrollaron dependencia a la sustancia, en 1913 Bayer suspendió su producción, perdiendo a la compañía farmacéutica junto con la aspirina parte de sus derechos de marca sobre estos fármacos como consecuencia del Tratado de Versalles, que sellaba la derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial.

En 1924 el Congreso de Estados Unidos estableció que no existía ningún uso legal de la heroína, prohibiendo su elaboración y venta, y un año después el Comité de Salud de la Sociedad de Naciones prohibió la diacetilmorfina, aunque desde 1920 a 1930 se utilizó esta droga en la terapia de reemplazo en pacientes con adicción a la morfina y la cocaína, y hasta 1971 se podía comprar heroína en las farmacias alemanas.

Con la firma de la Convención Única sobre Explotacientes en 1961 y su reforma 10 años después, en 1971, la heroína quedó ilegalizada prácticamente en todo el mundo, aunque se la sintetiza aún legalmente para realizar investigaciones o para ser usada en tratamientos variativos para aliviar el sufrimiento de pacientes en situaciones extremas o terminales.

El tráfico de heroína fue prácticamente eliminado en los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial al cortarse el comercio causado por la guerra, pero luego de esto, al ver que el Estado italiano era muy débil, la mafia comenzó a establecer laboratorios para sintetizar heroína en Sicilia, isla perfecta para esto por su situación geográfica en el Mediterráneo.

Ayudando también a la expansión de estos laboratorios, el triunfo comunista en la guerra civil china, pues luego de ganarla, el partido comunista de este país eliminó casi por completo la producción de opio. Pasando a la producción de opio al llamado Triángulo de Oro, que desde Laos llevaba la droga a través de Francia hacia EEUU.

Desde inicios de la década de 1970 hasta mediados de los 80, el consumo de heroína experimentó un boom mundial, quintuplicándose los adictos en Europa entre 1967 y 1987, provocando la muerte de miles de personas, especialmente jóvenes, convirtiéndose en una epidemia en países como Alemania, España, Francia o Italia, teniendo especial incidencia en las clases bajas de la población. La fuerte adicción física a la droga arrastraba a muchos jóvenes a la marginación social, entrando en la delincuencia y la prostitución para poder pagarse la dosis diaria necesaria para no tener problemas de abstinencia.