Señora lo será tu puta madre 2w2f48

¿Qué sucede cuando tu carné de identidad y el espejo te dicen que tienes 50 años pero tú sigues sintiéndote como la chica de siempre? La señora pasó la hoja de sueños, fantasías y aventuras y vive por y para el que dirá Este tema precioso de Diango que anima a esa señora a tirarse, bueno a tirarse no, a echarse la manta a la cabeza y a salir a la calle y a disfrutar de la vida nos sirve perfectamente para darle la bienvenida a los anaqueles de las librerías, al nuevo trabajo de Sibila Freijoh que con una sonrisa y sobre todo con esa ironía que ya sabe manejar perfectamente pues acaba de sacar a la calle Señora lo será, tu puta madre.

Sibila Freijoh, ¿qué tal, cómo estás? Hola, buenos días, muy bien, encantada de estar aquí.

Un placer saludarte.

Yo creo que el consejo de Diango es un buen consejo, yo creo que echarse la manta a la cabeza y disfrutar de la vida, debiéramos hacerlo todos.

Totalmente hasta que podamos, no tiene nada que ver con la edad.

Eso es, independientemente de la edad, en Señora lo será, tu puta madre hablas de la crisis de la edad que sobre todo la sociedad impone a las mujeres, que parece que siempre tenéis que ser perfectas y estar en perfecto estado de revisión, ¿no? Es una sensación que tú también has tenido y tienes, Sibila, ¿o no? Sí, justamente, yo creo que hay mucho edadismo, sobre todo con las mujeres, porque un señor, pensemos en un George Clooney, de 60 años está estupendo y hasta las arrugas, las canas le sientan bien y las mujeres estamos siempre exigidas, nos exige perpetua juventud, belleza, ser sexys, buenas madres, trabajadoras, pero sobre todo en cuanto a los cánones estéticos hay una continua lucha contra el envejecimiento que se da muchísimo más en el caso de las mujeres que los hombres, o sea que sí, mucho edadismo.

Libros de menopausia hemos tenido en nuestras manos mucho, o muchos, pero ensayos, no novelas o historias como esta que tú acabas de sacar a la calle, yo creo que es uno de los primeros libros que trata este tema, donde además cada personaje lo vive de una forma diferente.

Tenemos a Ali, que tiene muchos más síntomas, cuida a su hija, de su madre, una mujer sandwich, podríamos definirlo así, esta Vera, que lo vive desde la negación, que tiene amantes jóvenes, que cuida la dieta, una madre que no ejerce y que desaparece, una novela sobre todo de mujeres y sobre este trasfondo, ¿o no? Sí, como tú dices, es la primera novela que trata el tema de la menopausia porque hay mucha divulgación pero no había ninguna ficción y lo he querido hacer desde el humor y desdramatizando un poco todo lo que sucede, que es bastante gordo, a veces, otras veces no tanto, depende de cada mujer, ¿no? Y en la novela he querido reflejar un poco las dos posturas que hay a la hora de enfrentarse a la madurez, ¿no? Por un lado está la historia de dos hermanas, una de las hermanas, Ali, es como tú has dicho, una mujer sandwich, que está un poco... para empezar tiene todos los síntomas de la menopausia, o sea, lo está sufriendo a tope, luego está en un matrimonio infeliz, también está cuidando de una madre que acaba de llegar del otro lado del mundo y que viene a morírsele a casa y a la vez luchando con una hija adolescente, ¿no? O sea, como...

Lo tiene todo.

El queso en un sandwich, sí, la pobre está como un poco desesperada y luego la otra hermana, que es Vera, la vive de manera diferente, pues un poco intentándola negar, ¿no? Y refugiándose, pues eso, en el sexo, en sus aventuras con sus amantes y en hacerse todo tipo de tratamientos, de cuidados, pensando que así va a huir de la madurez y no es así.

Pero bueno, son dos visiones opuestas de enfrentarse.

Sí, sí, enfrentadas.

Enfrentadas, además, pues se llevan fatal.

Bueno, ahí...

Sí, se llevan muy mal.

Es el temazo de la novela, en las relaciones complicadas entre hermanas y entre madres e hijas también.

Claro.

Y hasta hace nada la menopausia era algo de lo que se huía o de lo que no se hablaba, ¿no? No sé en qué punto estamos o si algo está cambiando.

Me da la sensación de que sí, sí, Vila.

Está cambiando porque ya, bueno, creo que está cambiando a nivel de la conversación y de aparecer en los medios, entre otras cosas porque también es un gran negocio, ¿no? Es un negocio que mueve bastante dinero.

Pensemos en...

Las farmacéuticas, por ejemplo.

Las farmacéuticas con todos los suplementos, que no hay menopausia sin suplemento.

Sí, sí.

O clínicas de esteroides.

Y luego...