Romantica Escrita por hombres con Ricardo Álvarez 6t3r6z

Bienvenides un domingo más al mejor podcast literario que hallarás en los hilos de escucha.

Mi nombre es Minara Velar y hoy dirigiré este capítulo en el que vamos a hablar sobre romántica escrita por hombres. Hoy tenemos el placer de conversar con Ricardo Álvarez, un escritor de literatura romántica que ha encontrado su voz en un género que, como todos sabemos, tradicionalmente ha sido dominado por autoras. Con su enfoque único y sensibilidad especial, Ricardo explora las complejidades del amor, la conexión humana y las emociones profundas que caracterizan las relaciones modernas.

En esta charla nos adentraremos en la literatura romántica actual escrita por hombres, analizando cómo su perspectiva enriquece el género y cómo ha evolucionado en los últimos años. Pura Literatura, un podcast para escritores y lectores sin etiquetas. Bienvenido Ricardo. Hola, muy buenas, ¿qué tal? Encantado de estar aquí y pasar un rato aquí con vosotras. Igualmente, un placer. Pues nada Ricardo, para empezar cuéntanos cómo te adentraste en este mundo de la literatura romántica.

Bueno, yo creo que al final lo que me atrajo de este género es un poco lo que me atrae de la literatura en sí, que es centrarse en los sentimientos. Yo entiendo eso de la literatura como una manera de adentrarme en el interior de los personajes y de explorar un poco las emociones humanas, los pensamientos, los traumas.

Hay gente que busca otra opción, aventura, fantasía, lo que sea. Y es totalmente lícito, no tengo nada en contra. Pero yo, tanto lo que leo como lo que escribo, pues al final necesito ese componente de explorar un poco lo que es el interior de las personas y los sentimientos. Vamos, que buscas hacer sentir.

Eso es, busco hacer sentir y sentir yo mismo. Una novela que no me transmita emociones no es una novela que esté escrita para mí. No soy el lector, digamos, de Thriller por el Thriller o de Thura. Yo necesito que pueda haber Thriller y me gusta mucho el Thriller si va acompañado de que al final las acciones repercutan en cómo afecta eso a las personas, cómo lo sienten ellos. Estoy totalmente de acuerdo, yo busco un poco lo mismo. A mí me tiene que hacer sentir la historia, si no se queda un poco como meh. ¿Y qué fue lo que te atrajo de este género en particular, de género romántico? Como lo que busco es adentrarme en los sentimientos y en las emociones.

A lo mejor es el género que tiene una conexión más directa con eso, con los sentimientos. Y fue lo que me decidió dar un poco el salto hacia escribir ese género. En realidad, al final, no soy yo ni lector ni escritor de género, porque no tengo un género en sí que me llame que es solo o que principalmente lea ese género. Pero sí que tenía la historia sobre todo, hasta que todavía, mientras me olvide, es muy metida en mi interior y quería sacarla fuera. Y sí que me sirvió para explorar mucho los sentimientos. O sea, que ya tenía historia bien profundizada en la mente antes de desarrollarla.

Sí, antes siquiera de esas cosas que te imaginas cuando te da por imaginar cosas, y de imaginarte situaciones, emociones y estas cosas. Y al final, lo que hago es escribir.

Sí, sí, sé lo que es. Mi novela, los personajes de mi novela y los primeros pinitos de la historia empezaron cuando yo tenía 13 años, o sea que sé lo que es.

Es lo que dicen, que las novelas no se escriben cuando te sientas a escribir, sino que las escribes las 24 horas del día, que estás en la ducha, estás pensando en la historia...

Totalmente.

Y al final convives con los personajes, pero que al final te da hasta pena cuando acabas la historia, porque dices, ahora no voy a saber más de ellos.

Sí, es verdad, es un sentimiento ahí agridulce. Y cuéntame, ¿qué diferencias crees que existen, si crees que las hay, entre la manera en la que un hombre, a diferencia de una mujer, puede abordar el tema del romance en la ficción, en la literatura en general? Yo creo que cada autor y cada autora aportamos algo único a esas historias.

Como se suele decir, en realidad ya está todo escrito, no hay una trama que sea novedosa por completo.

Y al final lo que nos queda a los escritores es dar nuestra propia voz a esas historias, llevar nuestro bagaje personal, tanto de lo que hemos vivido, como de lo que hemos leído y visto en las películas o en las series, pues llevarlo, plasmarlo en esa historia.

Y al final el amor es un sentimiento universal y es un género que nos permite conectar con las emociones y eso creo que al final quien escribe, quien lee literatura romántica lo siente de manera parecida. Está claro, día de hoy todavía sigue habiendo diferentes sensibilidades entre hombres y mujeres. Muchas de ellas son educacionales, sigue habiendo unos roles de género muy definidos.

Totalmente.

Yo creo que a los hombres nos educan a no mostrar muchos sentimientos ni vulnerabilidades.

Pues se puede reflejar en cómo los hombres y las mujeres tratamos un poco la ficción.

Si hiciera una generalización así un poco burda, podríamos decir que la mayoría de las mujeres que se acercan al arte y sobre todo a la literatura, pues se centran más en lo que son los sentimientos y los conflictos internos y los hombres se suelen acercar más a los conflictos externos y no a denuncias.