Riesgo de nuevo apagón 6g6h5w

Va un día y todo día. ¿Cómo pasan los días, eh? ¿Cómo pasan las cosas? Ya tenemos Papa Nuevo, el Mauro Urbano entró en una guañazolla en el filó, no ha habido otro apagón...

Por cierto, que la luz se apague no es noticia.

La noticia es saber quién apagó la luz, ¿no? Un oscuro escenario que se puede reproducir en cualquier momento.

Mucho más si nuestros eléctricos es con Sánchez y sus muchachos al frente, a la cabeza, siguen sin ponerse de acuerdo en confesar a los españoles y portugueses de quién fue la idea y si hay un por qué.

No creo que fuese cosa del tranvía ni del tren de Sóller, aunque vayan repletos de estos artilugios eléctricos, ni del cobre de la catenaria del ave, ni los cercanías, ni del puente, ni de la oposición de la oposición y de Cezanos, el que hace las estadísticas y magia con ambas manos, Cezanos.

De todos modos, hay que estar preparados, puede volver a ocurrir y hay que estar prevenidos.

Para ellos, todos los días aparecen los asesores del cuerpo de sabios de esta España de los inventos con gaseosa.

Han proliferado como boletos edulis para impartir al respetable Cursillos de Supervivencia.

Con permiso de nuestro director y después del gran apagón del que no se sabe quién es el padre o la madre, me atrevo a poner un anuncio gratuito, un consejo publicitario para su seguridad.

Dice así, ¿ya ha encontrado el curso de supervivencia estatal para poder superar el apagón? No, pues aprenda con nuestro cursillo titulado Nunca te fíes de las renovables, pueden fallar.

En este caso, otro catástrofe, esté siempre preparado.

¿Sabe cómo conseguir un refugio, una casita? Pues yo no, pero ellos sí, en Sonbaña le pueden asesorar.

¿Sabe cómo encender fuego? ¿Dónde guarda la hucha del dinero con tanta insolante? ¿Y las latas de atún y sardinitas? ¿Y el pienso del perro y el papel higiénico? ¿Y el jamón, azúcar, café, leche en polvo, colacao, quesitos y las galletas de Inca? ¿Y el jabón y el bim? ¿Cuánto tiempo hace que no se ha confesado? ¿Sabe potabilizar el agua y el vino? ¿Y de los gelocatiles y boprofenos, qué? ¿Tiene reservas? ¿Sabe hacer una lamparita, una llantia de aceite con un cordón de zapato en una lata de sardinas? ¿Y el aután? ¿Y el tres en uno? ¿Y el no hay dos sin tres? ¿Y los evangelios y el juego de cartas? ¡Ah! No, pues espavile, esté preparado y haga nuestro cursillo de supervivencia.

El último que apague la luz, que se gasta.

Ah, y en verano no duerma con la ventana abierta, que puede entrar un mosquito y electrocutarle el pito.

Por lo demás, otros titulares dicen que la basura de Ibiza y Formentera llegarán a Mallorca.

Se incinerarán en Mallorca.

Y no se sabe cómo nombrar al retrito civicenco.

Seguramente que los creadores de modas, Alic, por ejemplo, te harán con ello, ¿no? Le pondrán nombre.

¿Que no hay acuerdo sobre cuántos venas nos toca acoger? No, no hay acuerdo.

¿Ni cómo empadurarse si vives bajo un puente o algo parecido? Desembarcos en Palma, más de 60.000, decían, en una semana.

Y alguna patera de propina, ¿eh? Y para tener de todo, algún terremoto en el Mar Balear como el de ayer, ¿no? En los parlamentos, el variado elenco continúan, pues, sus circenses representaciones.

Sigue aumentando la presión demográfica.

Los de allá vienen para acá para quedarse y los de aquí huyan como y cuando pueden para ya no volver.

Mallorca, tierra ocupada.

En este filo de Sóller siempre ganan esmoros.

Y ahora, más que nunca, Sánchez, Diábalos y sus mensajes de WhatsApp mandando a la hoguera a los críticos del partido.

¡Pégale un toque a Page! Y que dejen de tocar los cojones con perdón.

Perdón mío, ¿no? ¡Uy, presidente Moder ese! ¿Y del Coletas, qué? Es un tonto y un torpe y un maltratador.

Vaya, vaya.

Vaya pájara con la de defensa, ¿no? Que se acuesta con el traje y suma y sigue.

Dios mío, qué vergüenza.

Díganme por qué puerta salir.

Martínez, es hora de irse.

Vale, vale.

Antes, un recuerdo que hace una semana mi compatriota del Valle, Rafa Rullán, intentó en el último minuto un triple, pero el juez de mesa le indicó fin de partido.

Este año, Rafa, nos hemos perdido en Esfiro.

Tú porque te has ido y yo porque me quedé a la entrada del túnel.

No había más entradas para ir en Esfiro.

Pasan más cosas cada día, pero la jornada laboral de las Yoli Díaz no me lo permite.

Me estoy pasando de horas.

Y como dice la canción de Serrat, lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos.

O la otra de Sinceramente tuyo.

Nunca es triste la verdad.

Lo que no tiene es remedio.

Buen día todo el día.