¿Qué significaba “arrepentimiento” antes de ser una palabra de moda-AqS 443ro

El artículo de Daniel Esparza explora cómo distintas culturas y lenguas antiguas han moldeado nuestra comprensión del arrepentimiento. Antes de asociarse principalmente con el sentimiento de culpa, el arrepentimiento implicaba una transformación profunda del corazón y la mente, más cercana a una revelación que a un remordimiento.

En el griego de las primeras comunidades cristianas, se hablaba de metanoía, una palabra que denota un cambio radical de entendimiento, no necesariamente motivado por culpa, sino por el descubrimiento de una verdad mayor. En contraste, el término latino paenitentia, origen de penitencia, se enfocaba más en reparar el daño a través de acciones externas, como el ayuno o la confesión.

Ambos conceptos coexistieron en la tradición cristiana, pero con matices distintos, metanoía se centraba en la transformación interior, mientras que paenitentia enfatizaba la justicia y la restitución. En el judaísmo antiguo, el arrepentimiento, tesuva, o retorno, también implicaba una dimensión colectiva y concreta, una vuelta a Dios más que un castigo. Por su parte, los filósofos grecoromanos veían el cambio interior como un camino hacia la virtud. El cristianismo fusionó estos enfoques al entender el arrepentimiento como una colaboración entre la gracia divina y la decisión humana.

Según el catecismo, la conversión es obra de Dios, pero también requiere una elección personal, ver de otro modo, metanoía, y actuar en consecuencia, paenitentia. El artículo concluye destacando que, en una era de soluciones rápidas, el arrepentimiento auténtico propone algo más profundo, el valor de una transformación interior sostenida por la verdad y la gracia. Te invitamos a que compartas esta información, para que más católicos lo conozcan. Dale me gusta, toca la campanita, suscríbete y que Dios los bendiga.