El Pirata Garrapata - Capitulo 9 - Lara y Manu Leemos y715e

Él quiere atajar la pata de juan muñoz martínez ahora militares en los libros una papi hola princesita o debería decir picadita bien y tú bien bien con ganas de seguir avanzando con el pirata garrapata si que todavía nos queda medio libro más o menos sí hay que ir cogiendo ritmo oyen que pasó el otro día entonces ya que pasó fue que estaba garrapata y su tripulación con su barco así navegando no se sabe muy bien adónde intentando ir a tierra firme pues resulta que la tierra firme que ellos vieron eran con salga súper grandes que dejaban los barcos atrapados y resulta que se quedaron atrapados y al lado había un barco un poco extraño seguro que vamos a ver qué pasa con ese marco este año y si pues empezar capítulo nueve el barco misterioso setas venenosas la armadura automática esqueleto del pajarito el coco los fantasmas llegada la noche amparado por las sombras el salmonete se acercó al extraño buque me huele a puchero rambo dijo lechuza flaca cállate ordenó garrapata el salmonete avanzaba en silencio con las luces apagadas aunque la luna no brillaba aquellos arbustos proyectaban una luz blanquecina y tenue echarlos dios ordenando garrapata los garfios del salmonete agarraron al buque y los marineros de puntillas conteniendo la respiración saltaron sobrecubierta llevaban los cuchillos preparados y las pistolas cargadas están durmiendo dijo que la foca mejor los cogeremos por sorpresa susurro lechuguino las maderas crujían al menor movimiento abrieron la puerta del sollado y un largo gemido le puso la carne de gallina garrapata alguien ha gritado murmuró garrapata han sido las razones de la puerta goznes que a que son los goznes como las bisagras los goznes de la puerta dijo cara foca adelante no seáis cobardes zapata temblando los marineros bajaron por unas escaleras carcomidas quién me ha tocado la cara preguntó capaces de a mí también quién habrá sido exclamó garrapata son murciélagos observó mister cebollino mala señal son aves de mal agüero sentenció lechuza flaca todos los marineros iban temblando llevaban las pistolas preparadas cara foca alumbraba con un candil llegaron al comedor de marinería y no había ni un alma sólo se oía el crujido de las viejas maderas del barco unos cincuenta platos vacíos se alineaban en las mesas vamos a la despensa sugirió comadreja eso eso queremos comer palmo oteo alegre el doctor cucharita cruzaron un largo pasillo y abrieron una puerta que rechinó con un lamento prolongado olía a humedad y muy grandes telaraña pendían de las vigas y un farol mortecino oscilaban un acuerdo que tendrán esos sacos pregunta lechuguino atiza son zetas que rica dijo cara foca no las toquéis que arrebatado por qué porque lo ponen el saco no lo veis no tocar peligro de entierro cucharita abrió su maletín sacó la cucharita de planta la mentira el saco y se puso más negra que el carbón son venenosas porque las tendrán aquí preguntó garrapata es extraño dijo gu careta maceta de estas puede matar a un caballo percherón garrapata salió al pasillo seguido de sus marineros de pronto vieron abrirse una puerta uno gigantesca armadura de hierro salió y avanzó lentamente por el pasillo moviendo los brazos y las piernas al compás huyamos a la pecho gritó garrapata los marineros se dirigieron en tropel a la despensa y cerraron la puerta se miraron unos a otros y chapa retro gritó soltando la foto donde está cara foca se oye un grito angustioso corramos escalafón fosca los marineros salieron precipitadamente y viven como armadura llevaba entre sus brazos a cara enfoque corrieron pasillo adelante pero la armadura había desaparecido vamos al camarote