Milshakelánea - Voy a Londres con buen pie 1612m

Bienvenidos al salón privado del Club de los Refinados, con Violeta Sánchez y Estefanía Hernández, y Gangi. Hoy en el menú degustaremos una milkshake Lania. Hola a todos, no deberíamos estar grabando, es tarde y mañana madrugó.

Estamos comiendo, Gangi ha empezado sus sinfonías de la tristeza, de dame de comer, dame de comer, dame de comer, soy un murciélago, soy un murciélago. Hola Estefi, tú también estás aquí. Y se ríe, porque también está aquí, aquí estamos, hola. Hace mucho que no... Bueno, en realidad, grabar, grabar. Sigo aquí a pesar de todo, a pesar del calibre de mis errores. Calibre 22 aquí en la frente, por favor.

Sí, le han echado y la bronca en el trabajo. Por ponerlos en evidencia, que habían hecho las cosas mal. Por supuesto, no en evidencia, se lo dijiste por privado en persona y en bajito le dijiste cuidadito, que... Y dijeron, pues vamos a buscar un sitio más público para echarle la bronca a Estefi por algo. A mí me iba a decir pobrecito. A mí yo ni estaba, yo iba mañana, a mí yo...

Ahora irán a por mí. Y si hubiera comido todo el problema, si Estefi no hubiera dicho nada.

Pues a ver si me lo hubiera comido, les hubiera venido mejor. Llegar yo y decir esto qué es. Esto no tiene sentido. Ustedes me habéis dicho que no haga estas cosas, pero aquí están poniendo estas cosas.

Bueno, en fin, da igual. Pero tú hubieras agobiado. Y yo no creo que te agobies. No, sabiéndolo ya no me agobio. Creo.

No me mires así, Estefi. Yo puedo hacer cosas, aunque mi hermana piense que soy una inútil.

A ver, es que Dios se ha ido. Adiós. De España. Para siempre. Bueno, vivos en Canarias.

Está bebiendo. Ahora continuará su declamación. Y claro, pues al irse de España ella ha vivido unas aventuras que están fuera de nuestro alcance. Hombre, no sé yo. Sí, claro, que están fuera de nuestro alcance.

Los ingleses no están a mi alcance. He estado en Londres. Tampoco es que me haya ido yo a un sitio súper exótico, que nadie conozca, o que esté en manos de algún régimen militar, más o menos. No, hombre, no. Eso no.

Has ido a un lugar lleno de gente rara. Eso sí. ¿A qué he ido? Pues he ido a ver a mi hermana.

Mi hermana es de esas personas que le preguntas tú, ¿te gusta esta vida? Porque ella estuvo viviendo en Londres.

Luego estuvo viviendo en Vigo y ahora ha vuelto a Londres. Sí. ¿Por qué? Es la maldición del millennial.

No puedes quedarte demasiado tiempo en un mismo sitio o te empezarán a ir las cosas como a nosotras.

A mi hermana le preguntas, ¿qué tal Londres? ¿Te gusta vivir ahí? Y te dice, ¡no! ¡Lo odio! También ella... Es que claro, lo que ella dice. Tú vas a Londres, estamos paseando nosotros ahí por la parte antigua, ¿no? Estamos viendo The Club, el puntual de Thames...

Thames, no sé cómo es. La verdad, siempre lo he oído en español, no sé si es Thames. ¿Por qué son así? ¿Por qué son así? No lo sé. Como el West Ham, que no se dice West Ham, se dice Wesam.

Claro. O el Tottenham, no se dice Tottenham, se dice Tottenham.

Ni yo sé cómo se pronuncia y... No lo saben ni él.

Van a saber, van a saber. Bueno, y uno se viene a Londres diciendo, ¡ay, me voy a ver todo esto! Y no, acabas viviendo en un barrio de extramuros, en un piso patera, con otras 14 personas, pagando 700 libras al mes y comiendo sopa de sobre. Esos son los días que es de bueno. Y por eso no le gusta eso a Londres.

¿Sabes qué es triste, Ganji? Lo más triste es que me estés llorando y que te quieres comer mi comida.

A ver, yo hoy cojo, me voy al sur, que eso es una hora de mi casa, que yo vivo por la zona norte.

Al sur se refiere al aeropuerto del sur. Al aeropuerto del sur, una hora de viaje.

No sería problema si luego el viaje en avión no fuera cuatro horas y media. Era un vuelo de Ryanair.

¡Bú! Que es como ir en un... Yo siempre recuerdo...

¡Que vuelva bowling! Es que por lo menos puedes distraer un poco más las piernas y por lo menos te dejan unas maletitas un poquito más grandes.

En buen Ryanair es como... ¡Hola, soy Escoria! ¿Sabes? Lo único bueno que tienes es que cuando llegan a tiempo te tocan las trompetas y aparece un leprechaun a bailarte.