LVDA 5x04 -Querido Hacker 5d4s2l

Cuartoría banco, cuartoría banco, la última vuelta de tuerca.

Las vecinas de arriba, con Marichel Villalba y María Fuster.

Hola por fin María, ¿cómo estamos? Buenas tardes, digo tardes porque son tardes, tardes y muy tardes.

¿Cómo estás María Fuster? ¿Te llamas? Pues ahora mismo estoy entrando en una especie de enajenación mental porque la tecnología está jugando en nuestra contra y yo no soy amiga de la tecnología y estoy ahora mismo bloqueadísima.

Yo no sé, oyentes, si nos vais a escuchar bien, si no, ahora mismo Mary y yo ni nos estamos viendo, nos estamos intuyendo que estamos ahí una ante la otra porque Mary habla, yo le hablo y ella me responde.

Pero vamos, ¿cómo estoy? Aparte de así, como ya te comenté Mary, creo que me ha mirado un tuerto, me han echado un mal de ojo, no lo sé, desde que ha empezado 2025 te lo juro, por el culo de la inco, me la está encando hasta la coronilla.

Empezamos bien. Oye, creo que el mal de ojo ha puesto los dos ojos, uno para ti y otro para mí.

No te lleves el mérito, te lo digo yo porque te voy a contar una cosita, os voy a contar.

Y me perdonáis la voz, pero hemos tardado en grabar porque he estado súper mala, que cogí un gripazo, esto me pasa por dormir con el culo al aire.

Allí no sé, en Suiza, pero aquí ya ve el calorete.

Sí, se hace calor también, hoy hemos ido al lago, que no hay playa, aquí no hay playa.

¿Tú te acuerdas? Sí, vaya, vaya.

Y vaya, vaya, pero hemos ido al lago, que hay un laguito con una playita, un chiringuito y tal.

Y yo ya he podido ser más o menos persona, pero si me oís la voz así, es que estoy todavía, tengo la ley tapada, no me oigo, o sea, me oigo en ultratumba, ¿sabes? Por dentro, he chillo y la gente no chille, digo, es que no me oigo, entonces no sé si los demás también o no.

Con lo cual, que me vais a perdonar si en algún momento saco el crines y estornudo y eso, pero es porque todavía lo estoy acabando, pero cogí un gripazo, tía, que no veas.

Dime, ¿que podemos confirmar que eres un moco con piernas? Total, lo fui, lo fui, vuelvo a ser persona, por eso hemos tardado, entre otras cosas, pero bueno, intentaremos hacer este podcast lo mejor que podamos.

Bienvenidos una vez más a las Bacinos de Arriba, muchas gracias a todos por estar ahí sin papel cañón y la verdad es que sí que estamos tardando más de la cuenta, pero hija, entre el tuerto tuyo, el mío y en fin, y las, ¿qué te voy a decir?, los gremlins tecnológicos que no nos dejan grabar, pero bueno, todo se andará, todo se andará.

Es que somos de la old school, es que no lo entienden, la vieja escuela, es que a ver, yo viví los teléfonos con redonditas, ¿sabes? Y marcando, me cago en la leche y aquí, tío, cuando tenemos problemas, pero en fin, espero que los demás también estén bien. Yo quería empezar el programa, María, si me permites, empezando a leer, sí. Primero de todo, dar las gracias a todos los oyentes que, como siempre digo, están ahí y la verdad es que es un placer, al menos para mí, leer siempre todos los comentarios en positivo y que recibimos y todo el que recibimos.

Es que, bueno, me da un subidón cada vez que los leo. Y así, lo que vamos a hacer esta primera parte, si te parece, es leer uno de los mails que más me impactó y entre otros, ¿vale?, s y mensajes que nos van llegando por todas las plataformas, ¿vale? En este caso, sí, es el de Patricia, Patricia Ríos, que nos envió un mail y lo leeré tal cual.

Patrick, bueno, me doy la licencia de decirte Patrick, muchísimas gracias porque de verdad, te lo juro, que a mí aquellos días chungos en el trabajo, lo que sea, caravanas y tal, y lees estos s y se te da el subidón, ¿vale? Venga, empieza.

Vamos a ver un momento.

Perdónate.

¿Ves lo que es la tecnología? Odio máximo la tecnología, llamarme arcaica, vintage o como queráis.

Es que, tío, en un momento dado, puf, se me ha ido. Digo, no, ¿sabes?