Homilía de Monseñor José Luis Cardenal Lacunza - Martes 23 de abril de 2024 4d414i

Sí sí aleluya aleluya mis ovejas escuchan mi voz dice el señor yo las conozco y ellas me sigue el señor esté con ustedes programa dios de jesucristo según san juan por aquellos días se celebraba en jerusalén la fiesta de la dedicación del templo invierno jesús se paseaba por el templo bajo el pórtico de salomón nos rodearon los judíos y le preguntaron hasta cuándo vamos a tener en suspenso si tú eres el mesías dínoslo claramente respondió ya se lo he dicho y no me cree las obras que hago en nombre de mi padre dan testimonio de mí pero ustedes no creen porque no son de mis ovejas mis ovejas escuchan mi voz yo las conozco y me siguen la vida eterna y no perecerán jamás no jamás nadie las arrebatará de mi mano me las ha dado mi padre y es el superior a todos y nadie puede arrebatar de la relámpago del padre el padre y yo somos uno palabra del señor hermanas y hermanos cuando parecía que peor y las cosas para la primera comunidad cristiana después de esa gran persecución que desató a raíz de la muerte de esteban fue como suele ocurrir tantas veces una crisis de crecimiento porque aunque un nexo de discípulos y discípulas de jerusalén no fue una huida de la fe fue un cambio de lugar y estos hombres y mujeres que salieron de jerusalén aprovechado llegar a cualquier sitio guiar supe anunciar a jesucristo nos dice lucas al comienzo de texto de hoy uno dos los que salía dispensado recurrieron fenicia chipre y antioquía pero iba predicando el evangelio y es significativa la situación pero intensamente de la unidad de antioquia dónde la predicación del evangelio yo abundantes frutos y frutos novedosos hasta el punto de que cuando llegó a jerusalén la comunidad madre la noticia de lo que estaba pasando en antioquia la comunidad decidió mandar a un permiso un chipriota bueno hombre bueno lleno del espíritu santo dice lucas para qué un ojo a ver a ver cómo iba esa comunidad que decían que era tan floreciente en antioquía bernabé